PEPE PALACIOS. TÉCNICO DE EMERGENCIAS EN EL 061 Y PRESIDENTE DEL COTO CÓRDOBA BALONCESTO

"La capacidad de respuesta del 061 andaluz no tiene nada que envidiar a la de otros muy reconocidos"

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
photo_camera Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

Pepe Palacios, además de ser buena gente, tiene una capacidad de trabajo asombrosa. es capaz de combinar tres pasiones poniendo toda la carne en el asador en cada una de ellas y sacando adelante proyectos e iniciativas que de otro modo sería muy complicado.

De 56 años, casado y con tres hijos, es cordobés, del Sector Sur, de la zona de la Avenida de Cádiz, que es donde ha estado viviendo la mayor parte de su vida, salvo por una temporada que viajó a Cabra, cuatro años, ya que su mujer trabajaba en esa localidad de la Subbética.

Como se ha apuntado, es un tanto polifacético, porque cuenta con varias profesiones. La principal es la de técnico de emergencias sanitarias en el 061, pero también es formador, y no uno cualquiera, porque es de los que organizan simulacros de catástrofes para formación de alumnos y profesionales. "Me encanta la formación; dar clases es mi otra pasión", asegura. Y empezó a hacerlo ya estando en el trabajo, dentro del 061, pero ahora forma a los futuros técnicos de emergencia en un instituto de Fernán Núñez, en la Campiña Sur en el centro privado de Enseñanzas de Régimen General Greguerías. En ese centro de formación privada tiene a unos 15 alumnos este año, y es el quinto año que trabaja allí.

Entre otras cuestiones, hace años participó en el montaje de un simulacro en Mojácar (Almería) de atentados terroristas simulando lo que pasó en París y movió a más de 125 personas para participar en él.

Atención a su tercera faceta, la de presidente del Coto Córdoba Baloncesto, donde está conformando un proyecto la mar de bonito y que se explica al final de esta entrevista. No se la pierdan.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

Tengo entendido que también se decía a organizar simulacros de actuación en catástrofes.

Sí. En la parte de formación, en nuestra profesión hay una parte que se dedica a la atención a múltiples víctimas. A la hora de dar la formación hay varias maneras: A través de las clases magistrales en el aula o bien complicándose un poco la vida y desarróllanos ejercicios de simulacros donde tú valoras la capacidad de respuesta de los alumnos en situaciones de estrés. Cambia mucho el concepto.

Hay dos formas de hacer un simulacro. Una donde tú exhibes la capacidad de respuesta que tiene una organización, la que sea, o un grupo de alumnos. Ese tipo de simulacros no es el que más me atrae. El que yo hago es un simulacro en el que el alumno no sabe a lo que se va a enfrentar y se intenta valorar la capacidad real de respuesta. ¿Que va a haber errores? Por supuesto. La filosofía del simulacro es valorar la capacidad de respuesta que tiene un alumno o un profesional y si acierta, reforzarlo en sus acciones y si se equivoca, reconducirlo en ese error para que cuando llegue el momento de verdad no se vuelvan a cometer. No son situaciones habituales a las que nos enfrentamos. Entonces, es la mejor manera de desarrollar ese tipo de ejercicios y valorar la capacidad de respuesta.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

Usted los acaba de apuntar: Está pensado para alumnos de su curso, pero es también para profesionales, en plan bomberos, policía y demás.

Sí. Yo estoy en el Grupo Provincial de Catástrofes de mis servicio. Uno de los últimos en los que participé fue un simulacro que hicimos en el Aeropuerto de Córdoba, dentro el Plan de Emergencias de Actuación del propio aeródromo. Simulamos que un avión se salía de pista con un número importante de pasajeros, unos 20, y al final de la pista está el Guadalquivir y metimos a gente que se había caído en el propio río. La verdad es que fue algo con mucho despliegue, porque supuso la participación de bomberos, Guardia Civil, los recursos del propio Aeropuerto y ahí valoramos un poco cual fue la capacidad de respuesta. También participó Ambulancias Córdoba, estuvimos nosotros como 061.

La cuestión es que sobre la teoría es muy fácil organizar el mando, pero luego cuando hay que responder es cuando estás allí, sobre el terreno.

¿Cuál es la diferencia entre los simulacros de profesionales y el de los alumnos?

Muchas veces los profesionales nos sentimos como interpelados en estas cuestiones. Nos cuesta más trabajo la situación el error, porque pensamos que si nos equivocamos nos somos buenos profesionales o no estamos preparados. Y no es eso. Hay que tener en cuenta que este tipo de asistencias que montamos en un simulacro no son las habituales. Tú puedes tener una asistencia de este tipo y a lo mejor en tres, cuatro o cinco años no volver a tener otra igual. Pero si no lo practicas y te entrenas para ello se te olvidan cosas fundamentales.

¿Cuántas veces haría falta tener un simulacro e ese pelo para que la gente esté preparada?

La idea es que al menos una vez o un par de veces al año. Nosotros en el 061 tenemos como objetivo la realización o la participación en dos simulacros. Muchas veces lo hacemos bien con los profesionales o bien participando profesionales y alumnos. Por ejemplo en el instituto cuando hemos hecho algunos de ellos hemos integrado a los alumnos en equipos con profesionales. De esa manera, el alumno se siente mucho más involucrado e incluso le ve mucho sentido a todo lo que está dando en clase. Ve cómo los profesionales lo aplican y cómo ellos se integran también en esos equipos.

Y, visto lo visto, si tuviera que decir cómo es la capacidad de respuesta de nuestro profesionales en Córdoba, qué diría?

Hombre, yo creo que se está formando a gente con una calidad. Yo cuando me formé prácticamente fuimos autodidactas. Nosotros, en su momento, estuvimos trabajando básicamente con la formación que nos íbamos consiguiendo nosotros mismos, en aquellos años con los cursos de Cruz Roja o lo que ibas obteniendo por experiencia. Entonces, los alumnos de hoy en día tienen unas posibilidades que no tienen los alumnos que nos formamos hace 35 o 40 años. Ha sido un paso adelante bestial.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

La información y la formación que reciben, por ejemplo, yo les doy formación en tele-emergencias, preparo a los técnicos en emergencias en cómo atender las llamadas. Que no deja de ser u planteamiento muy complicado. La sala de coordinación decide qué recursos enviar en función a la información que te den por teléfono. No es fácil, porque el que llama tiene. a un familiar, a una amistad o está viendo una situación en la que le puede costar la vida y n o habla de forma tranquila, sino que van a estar estresados y agobiados y no es fácil llevar eso. En el instituto donde yo estoy trabájanos y entrenamos a los alumnos en ese tipo de técnicas, en cómo simulamos la manera de recibir la llamada, le metemos presión para que se sientan como si estuvieran en un entorno real. Y, a partir de ahí, comprobar la capacidad de respuesta.

¿Y los profesionales? ¿Ve usted que están preparados para estas cuestiones?

La gente que estamos en Emergencias, o, al menos, una gran mayoría, somos unos enamorados de este trabajo. Cuando todavía no existía el 061, uno de los gérmenes de las Emergencias fueron empresas de Andalucía, como Los Ángeles de la Noche en Córdoba, que el actual gerente del 061, Fernando Ayuso Baptista, salió de ahí; yo salí de ahí, y muchos e los grandes profesionales que hay ahora mismo distribuidos por Andalucía trabajando en Emergencias o ya en cuerpo de gestión salieron de la cantera de Los Ángeles de la Noche.

Se hizo ahí una apuesta muy importante. De hecho, las primeras UVIs que hubo en Córdoba las luso en marcha Los Ángeles de la Noche. Ahí se juntaron una serie de 'frikies' de las emergencias, a quienes nos apasiona esto, y no nos resignamos a saber mucho, sino que nos gusta compartir y que otros tengan la oportunidad y demás. A nivel profesional, consideró que hay un nivel de equipo ahora mismo de tecnología muy puntero que nos permite al 061 de Andalucía dar una respuesta y somos equipos con una capacidad de respuesta que no tenemos nada que envidiar a otros equipos muy reconocidos, como los de Madrid.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

¿Y cuando preparan una prueba de simulacro fuerzan la máquina, como hacen en los simuladores de vuelo para la formación de pilotos, donde los sitúan en las peores condiciones posibles?

Sí, sí, sí. A mí me gusta introducir el factor emocional. En muchos de los simulacros introducimos dentro al familiar o a alguien que está muy nervioso y que cuando lo consigues sacar de la zona de impacto, que es donde están trabajando los primeros equipos de intervención y donde los bomberos realizan los rescates, por ejemplo, para llevarlo a la zona segura donde se agrupan los heridos. Pues bien, nosotros muchas veces simulamos que alguno de esos heridos se escapa de allí y vuelve a la zona de impacto para buscar a ese familiar o amigo que se supone aun no han rescatado. Mucha gente piensa que lo hacemos sólo por fastidiar, pero es que en la realidad eso puede ocurrir bastante a menudo. Se trata de mostrar a una persona preocupada por alguien o con un nivel de estrés muy elevado. Forzamos las situaciones.

Dentro de los simulacros una de las cosas que hacemos es que a los heridos les ponemos una ficha con la patología, las lesiones o la fractura que se supone ha recibido en un accidente o catástrofe. Luego intentamos que cada simulador, como son reales, se metan a fondo en su papel y eso significa que se ponen a gritar, que les dicen a los sanitarios que no les toquen, y eso estresa hasta extremos insospechados. Es una manera de meter en situación a la gente.

Por lo que está comentando, está claro que usan a actores, ¿no?

Sí. Siempre. Cuando lo hacemos con los profesionales muchas veces buscamos que los actores sean los propios alumnos. Por ejemplo, he organizado también módulos de catástrofes y simulacros en el master de enfermería y el master de médicos de Córdoba y lo que vas buscando son alumnos, o bien de ciclos formativos, o bien de la propia Enfermería, que a ellos les sirve también para ver un poco la situación desde el otro lado de la barrera. La sensaciones muchas veces hacen que te pongas en el lugar del otro.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

¿Tiene a la vista montar algún simulacro pronto?

No. A corto plazo estamos pendientes de organizar probablemente uno con el 061 para cumplimiento de los objetivos, que creo que nos queda todavía uno por hacer, y allá por el mes de febrero o marzo de 2024 realizaremos uno en el instituto que el último que hicimos tuvo mucho impacto en Fernán Núñez y los alumnos se sintieron muy emocionados, porque les dimos responsabilidades. Cuando se va con los equipos de Emergencias va personal sanitario y eso en realidad lo va a asumir un médico, pero lo que también queremos es que aprendan a vivir la complejidad que supone tomar decisiones en este tipo de casos. Cuando a alguien le toca mandar se come un auténtico marrón. Y lo hacemos para que entiendan la dificultad que supone mandar y organizar. Porque la clave aquí es organizar.

¿Eso que les hacen a sus alumnos son en realidad unas magníficas prácticas para formarse?

Correcto.

¿Y se da igualmente en otros institutos con esa Formación Profesional?

Yo he colaborado con el instituto público Juan de Aréjula, de Lucena, aunque en los último año no hemos hecho ese ejercicio, pero sí me han dado la oportunidad durante cuatro años que hemos colaborado. Para hacer esto te tiene que gustar mucho, porque un simulacro si lo montas en el sentido de que la gente no sepa con lo que se va a encontrar y hacer un ejercicio de estas características, supone un trabajazo increíble. O te gusta o no lo haces. Tienes que ser un apasionado y ser técnico de formación, si no no lo llevas a cabo. Son muchísimas horas de trabajo y se trata de buscar, reunir, realizar el despliegue, contar con la colaboración del 061 o Cruz Roja, los bomberos, tenemos que encajar que todos puedan, porque a veces es posible y otras, no, y es algo muy complejo de organizar. Lo que pasa es que cuando ves el resultado y el resumen de todo lo que has organizado te quedas con la satisfacción de que el alumno vive una experiencia que difícilmente va a recibir en un centro.

¿Han calculado cuánto puede costar un simulacro de catástrofe?

¿Cómo que cuanto cuesta? Nosotros lo hacemos de forma altruista.

Ya me imagino, pero me refería a la movilización de esos cuerpos, con ambulancias, vehículos, personal y demás.

Es que todo eso se hace de forma gratuita y altruista. Además, es un forma que tienen las diferentes instituciones que participan e trabajar en conjunto, de ver cómo nos podemos coordinar todos los diferentes servicios. Son oportunidades que hay que aprovechar. Ningún servicio cobra por esto.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

Perdone que sea tan insistente. Es que más que cobrar lo que yo pregunto es el gasto de material, mover los vehículos, montar una escena de un accidente, para lo que hacen falta materiales, los propios materiales que se usan para simular las curas...

Para que lo sepas, lo que supone el coste mayor es, por ejemplo, que tú simules un accidente de tráfico con varios coches implicados. Si llamas a bomberos, evidentemente el bombero, ya que tenemos la oportunidad de contar con ellos, está encantado de poder utilizar el material porque les viene genial practicarlo y es un entrenamiento formativo que pone a prueba sus capacidades. Y el coste que te puedes poner es comprar un coche del desguace, te lo lleven allí y te lo vuelquen.

Hombre, siempre intentamos, en la medida de lo posible, dependiendo de la institución que participe, invitarles luego a un algo o un pequeño refrigerio en agradecimiento a su colaboración y participación.

La verdad es que cueste lo que cueste, es un dinero bien invertido.

Es que, a decir verdad, esto no lo considero un gasto. Yo lo considero, precisamente, una inversión. Muchas veces, para las instituciones, pueden pensar que les cuesta dinero desplazarse hasta donde está el simulacro, con un gasto de combustible, pero los profesionales que vamos lo hacemos de forma voluntaria. Los profesionales que trabajamos en el 061 cuando se les pide colaboración para esto siempre te encuentras a profesionales que han participado de forma voluntaria. Te hablo de los simulacros, pero te hablo también de las actividades formativas de reanimación cardiopulmonar en institutos, asociaciones y demás.

Vamos a rizar el rizo. Tiene usted también su faceta deportiva y es el presidente del Coto Baloncesto Córdoba.

Pues sí.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

¿Cómo se come todo eso? ¿De dónde saca tanto tiempo para dedicarlo a sus tres trabajos?

Te vas exprimiendo un poquito. La ventaja que tiene las Emergencias es que tenemos unos turnos que nos permiten en un momento dado poder hacer otro tipo de actividades. Para nuestro trabajo nos viene genial, porque es una forma de cambiar el chip. Quiero decir que mi trabajo en el 061 es muy bonito para todos a los que nos apasiona el mundo de las emergencias, pero también es un trabajo que quema, porque cuando las cosas salen bien te da un subidón de adrenalina y te sientes la persona más feliz, pero cuando las cosas no salen bien, pese a haber hecho tu trabajo, hay veces que no salen como nos gustaría, no logramos salvar una vida, y eso te deja mella. Y más cuando son personas jóvenes.

Desarrollar todo este tipo de actividades, como la formación o participar en este lío del baloncesto, es bueno. Yo llegué a este deporte porque mis tres hijos han jugado al baloncesto. Pasé de ser un padre implicado que venía a sus hijos en la grada a entrar en la cantera y luego de ahí a nivel de entrenador, hacía fotos (se ríe), a pedirme colaborar en la directiva y me acabaron nombrando presidente de la cantera del Ciudad de Córdoba y luego pasé a la del Coto.

Sin comerlo ni beberlo.

Sí (se ríe). Estamos intentando construir un proyecto diferente. Las cosas hay que hacerlas por pasión y que te llenen. Creo que es una de las características que tengo. Allí donde voy intento transmitir mi pasión y mi ilusión y ganas. Luego te podrá salir bien o no, en cualquier ámbito de la vida, pero cuando le metes esa pasión y esa ilusión que uno tiene, al final siempre he visto que las cosas acaban dando un resultado.

¿Y en qué consiste ese proyecto?

Ahora estamos en un proyecto super ilusionante, que queremos que sea un proyecto que aglutine, porque el baloncesto en Córdoba siempre hemos estado muy divididos, y estamos intentando crear un proyecto, a través del cual podamos aglutinar. Ya lo hemos conseguido en un primer momento con el Carmen y el Ciudad de Córdoba, que es un club con mucho solera en la capital, y no renunciamos a ser capaces de aglutinar más.

Yo recuerdo cuando era joven las noches el Pabellón de la Juventud, de ver baloncesto allí, y ¿por qué no volver a rememorar esas noches?

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

¿Hay público para el baloncesto en Córdoba?

Yo creo que sí. Este domingo tenemos la final de la Copa Diputación y hay mucho ánimo de ver baloncesto. La semifinal que se jugó en el Carmen, aunque se iba a jugar en la UCO y ya había muy buen entrada allí, prácticamente llena, y tuvimos la desgracia de que se rompió un aro y tuvimos que irnos al Carmen, ya a una hora tardía, porque eran las diez de la noche, y las gradas del Carmen estaba llenas. Se disfruto del baloncesto y pienso que hay ganas de baloncesto, y tenemos que aprovechar ese tirón.

¿Cómo ve usted al equipo que se ha conformado para EBA?

Lo veo un equipo joven y con hambre. Hemos conseguido montar la estructura que teníamos en mente. Porque hasta la fecha siempre que se había hecho una apuesta de estas características se apostaba por un equipo senior, con una empresa que patrocine y punto. Tú, como club, recibías el dinero y la empresa mientras esté ahí, fenomenal y cuando esa empresa no vea ese reporte de la inversión que realiza abandona. Eso era un poco lo que ha pasado hasta la fecha. Nosotros estamos intentando hacer algo distinto, y eso significa que el jugador cordobés puede ser protagonista.

Explíquese un poco más.

Eso significa que tenemos que formarlo y darle un plus añadido, porque con lo que hay ahora mismo no es suficiente. Los jugadores llegan, tienen un cierto nivel, pero si queremos que sean protagonistas hay que darle ese plus y ese protagonismo, para lo que hay que tener paciencia con ellos y confiar en ellos. Entonces, hemos montado un equipo senior, que es el que va a jugar este año en EBA, y luego tenemos un equipo en Primera Nacional y dos junior.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

La idea del equipo de Primera Nacional es que los junior sean protagonistas en ese equipo y jueguen minutos. Sabemos que lo vamos a pasar mal, que habrá partidos en los que vamos a sufrir muchísimo, que incluso perderemos en esa liga, pero es donde tenemos claro que hay que trabajar para que les podamos dar protagonismo a esos junior, y que se vayan fogueando y cuando lleguen al EBA, porque necesítenos de ellos, que no se limite a ser un jugador de tres minutos, sino que sea igualmente protagonista en esa categoría.

Ésa es un poco la filosofía. Montar una estructura de este tipo no puede depender únicamente de una empresa. Cuando le contamos el proyecto a Coto, se enamoró de él, y siempre dicen que los engañamos, pero creo que fuimos capaces de hacerles partícipe de esta idea. Pero no tenemos una única empresa. Estamos intentando montar un sistema parecido a lo que ha hecho Granada.

¿Que es?

Tener una empresa fuerte como base, y que lidera, que en nuestro caso es Coto, y luego tener un grupo de empresas dentro de la ciudad, con diferentes niveles de participación, colaborado. Por tanto, hablamos de un grupo de empresas, y, afortunadamente, cada vez estamos consiguiendo más. Este año ha dado el paso Ford, que se lo agradecemos de manera intensa; Piedra va a estar ahí un año más, y hay otras más pequeñas, como Federópticos, que no te pueden aportar una cantidad importante, pero la suma de pequeñas cantidades a nosotros nos permite poder conformar un proyecto importante, que es lo que vamos buscando.

En el último encuentro del equipo senior la puntuación fue de NBA...

Sí, porque el grupo que hemos conformado es de gente joven, con muchas ganas y mucha hambre. Por esa parte se está haciendo un baloncesto muy divertido. Esta temporada vamos a arriesgar porque vamos a jugar en Vista Alegre. Por un lado es muy atractivo ver el baloncesto allí, y hay mucha gene que nos ha felicitado por ese atrevimiento, y por otro lado es un atrevimiento porque meter 300, 400 o 500 personas en un pabellón pequeño lo conviertes en una olla a presión y es un verdadero ambientazo, y esa misma cantidad en un Vista Alegre implica un pabellón bien, pero no con la misma presión.

Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy
Pepe Palacios posa para Córdoba Hoy

Entonces, claro, el reto que nos planteamos es importante, pero hay una cosa que nos caracteriza en este grupo de gente que desarrollamos el proyecto: Somos atrevidos y no nos asustan los retos. Hemos pensado que podría ser interesante asumir ese riesgo y lo hacemos encantados, pero con responsabilidad e ilusión y las ganas de que la gente disfrute del baloncesto.

Los chavales son magníficos. Tenemos un líder que ya ha trabajado en este concepto de club que nos planteamos, que es Alfredo Gálvez, y nos tiene encantados por la forma de trabajar que tiene y cómo está consiguiendo engranar todo, que no es fácil. Y, sin embargo, para el poco tiempo que lleva con nosotros, nos tiene enganchados por su forma de entender el baloncesto. Esperemos que los resultados acompañen y apasione a la gente de Córdoba.

Un último apunte: ¿Vamos a poder comprar bufandas?

Pues estamos en ello (se ríe). Lo que ocurre es que es tantísimo el trabajo que supone la puesta en marcha de todo esto y estamos intentando, aparte de toda la gente que colaboramos, tener colaboradores y demás, porque muchas veces nos falta tiempo, y es muy difícil poder llegar a todo. Hemos sacado la campaña de abonos, que esperemos que, poquito a poco, podamos ir atrayendo a esa afición dormida y que le apetezca estar con nosotros en baloncesto y apoyarnos y no es fácil, pero lo de las bufandas vamos a verlo.

Más en Gente