Licenciada en Ciencias del Trabajo y diplomada en Relaciones Laborales, la vida profesional de Teresa Romero, alcaldesa del municipio de Monturque, en la Campiña Sur, ha estado siempre vinculada a la prevención de riesgos laborales y a la formación profesional para el empleo. Pero en 2011, con 28 años, decidió presentarse a las elecciones municipales, tras haber estado el PSOE monturqueño ocho años en la oposición.
"Comenzamos mover un poco la agrupación del PSOE local desde las Juventudes, donde yo era militante y también del partido, y quisimos darle un nuevo enfoque a lo que era el Partido Socialista en el pueblo", afirma. Eso se llevó a cabo sin apenas experiencia, porque Teresa Romero no había sido concejala con anterioridad y se encontró de golpe y porrazo gobernando en minoría.
En palabras suyas "se hizo un trabajo muy intenso" y estuvieron varios años trabajando bastante fuerte con los concejales que estaban en la oposición en aquel momento. "Y ahí surgió de un grupo joven, una alternativa de gobierno al que la gente le dio su confianza y obtuvimos la mayoría absoluta en los cuatro años siguientes", recuerda con alegría.
Y ahora ahí siguen, en el tercer mandato manteniendo la mayoría absoluta. Son prácticamente 12 años ya de alcaldesa y preside también la Comisión de Turismo y Empleo de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), un sector, el turístico, que en su municipio cada vez adquiere un peso específico mucho mayor.
¿Cómo estaba el pueblo cuando llegó al sillón de la Alcaldía y cómo lo ve ahora?
Lo percibido en aquellos días lo recuerdo de una manera intensa, especialmente por mi inexperiencia. Para mí era todo muy nuevo, porque estaba vinculada al mundo de la política, pero no es lo mismo estar militando en un partido, que es actividad orgánica, que dentro de una administración, que es la actividad institucional. Considero que mis primeros cuatro años fueron un verdadero máster acelerado, el mejor de mi vida, y es una enseñanza que no existe en ningún otro lugar, especialmente en un sitio pequeño, donde todo está tan cercano, tan intenso, donde no hay tiempo de desconectar; todo se vive en el momento y todo el mundo te busca.
Sobre todo lo que viví en esos momentos fueron colas y colas interminables de personas que querían verme y querían hablar conmigo. Un montón de gente que necesitaba ser escuchada. Fue muy importante, porque 2011 estaba inmerso en unos años complicados de crisis y la gestión se hizo muy difícil, porque no había recursos y pocos proyectos materiales se pudieron llevar a cabo.
Nos encontramos el Ayuntamiento en una situación en minoría, que supone una dificultad añadida, porque todo se tiene que negociar con mucha más intensidad, donde los acuerdos son más importantes y hay que dedicarle a esto un tiempo extraordinario para que las cosas salgan.
La gente necesitaba que se la escuchara. Lo he hablado con mis compañeros estos días: Da igual los proyectos que lleves a cabo, que hay que hacerlos evidentemente para avanzar y mejorar, pero en la gestión de pueblos pequeños no hay que olvidar la atención a la gente y escuchar sus problemas. Se demostró luego en el mandato siguiente que eso era lo que necesitaban, y así fue.
Bueno, pero aparte de escuchar, hay que aportar soluciones y la segunda mayoría absoluta de ustedes indica que algo más que escuchar se ha tenido que hacer.
Evidentemente. Yo he puesto el ejemplo de cuando llegamos en 2011, y que era esa necesidad de que alguien les atendiera. Eso ocurrió durante meses hasta que pude estabilizarme. Pero había una serie de proyectos que Monturque necesitaba poner en valor, relanzar y llevar a cabo.
¿Por ejemplo?
Nosotros nos encontramos en lo que son servicios básicos con un pueblo donde la red de saneamiento y abastecimiento de agua potable, algo tan básico como eso, no se habían renovado en los últimos 60 años. Prácticamente permanecieron intactas desde las primeras que se instalaron en el pueblo. Con lo cual ahí hemos tenido un trabajo durante estos 12 años de renovación de servicios básicos, que eran fundamentales. Renovación de infraestructuras, mejora de espacios públicos y siempre abriéndonos al ciudadano. Venimos de un momento en que los espacios públicos estaban un poco opacos y aquí optamos por abrir puertas y ventanas para que todo el mundo entrara y fuera partícipe disfrutando de su pueblo.
¿Físicamente se nota el cambio en el pueblo?
Creo que sólo hay que venir a verlo. La renovación de infraestructuras realizada es una realidad más allá de lo que yo quiera o pueda decir. Quienes más lo notan son los que vienen temporalmente o de cuando en cuando de visita. Quienes vivimos aquí todo el año nos acostumbramos a verlo, pero la verdad es que se ha valorado mucho, y hoy puedo decir que entre el 80 y el 90% de nuestras calles se han renovado por necesidad básica.
Estamos acometiendo ahora la mejora de la calle Padre Curiel, que era una de las más esperadas, pero, igualmente, una de las más difíciles, y estamos rematando los último lugares más conflictivos y con problemas de infraestructura de agua.
Puedo decir que a lo largo de estos años, los grandes problemas hemos intentado abordarlos y creo que se les ha dado una solución importante. Y una de ellas era el abastecimiento de agua potable. Todo esto culminó en 2017 con la entrada de Monturque en la Empresa Provincial de Agua, Emproacsa, Tuvo su momento difícil porque el salto no fue fácil. Veníamos de una situación muy mala también en la calidad y la gestión del servicio, pero fue una decisión valiente de un equipo de gobierno que teníamos muy claro que había que hacer las cosas necesarias que el pueblo necesitaba, aunque no fueran medidas populares. Por eso, lo que hicimos en 2017 no lo hicieron 20 años antes.
¿Y por qué no fue una medida popular?
El malestar vecinal llegó con la tarifa de precios. Teníamos tarifas sin actualizar en 30 años y al Ayuntamiento de Monturque le estaba resultando un servicio bastante deficitario, no se estaba ya prestando bien, la calidad del agua no era la adecuada y llegó un momento en el que se tuvo que tomar una determinación.
Es algo que siempre tuvimos muy claro este equipo de gobierno, que es muy joven, hasta el punto que en la mesa de edad el mayor tiene 40 años y el menor, 20, con una vida profesional y un trabajo, que han dedicado su tiempo y su voluntad porque buenamente quieren.
La política en pueblos pequeños es pura dedicación, porque te gusta y porque quieres trabajar por tu pueblo; no es lo mismo que en lugares mas grandes, donde se puede ver recompensado de otra manera. Yo dejé mi trabajo cuando tomé posesión. Lo dejé porque creía en esto y vi que era el momento y cuando me vaya volveré al trabajo y no pasa nada. Esto es un sitio de paso y todos los que estamos aquí ahora y los que me han acompañado estos 12 años lo tenemos muy claro. Estamos aquí para servir a la vecindad de la mejor manera que podamos y sepamos en cada momento, con nuestros aciertos y errores, pero siempre con cercanía, con humildad y sabiendo muy bien dónde estamos.
Eso choca de frente con la mentalidad de quienes son políticos de carrera.
El que piense eso se equivoca por completo. Creo que los que estamos en pueblos pequeños eso lo tenemos claro. Esa cercanía de la que hablo es la que te pone los pies en la tierra todos los días.
Con la orografía que muestra el municipio, las obras allí han de ser complicadas.
Sí, bueno. Obras de infraestructuras no tienen por qué. Obras nuevas, la verdad es que sí. Tienen más dificultad a la hora de excavar, quizá. Es verdad que es un cerro que tiene sólo la parte alta plana y lo demás es todo en pendiente. Eso te obliga a tener más en cuenta una serie de circunstancias por los niveles, los accesos a las viviendas. Pero a día de hoy contamos ya con empresas muy profesionales que lo tienen totalmente controlado.
Es de suponer que usted tiene la intención de repetir en el cargo, ¿no?
Yo siempre he estado entregada a mi pueblo, yo lo disfruto y a mí me gusta. Soy secretaria general de la agrupación de Monturque y tengo una satisfacción enorme por el trabajo que hemos podido hacer. Me encuentro satisfecha en lo institucional, pero igualmente en lo orgánico, porque hemos creado una agrupación de militantes grande, fuerte, que está unida y que cree en lo que hace a diario, que para mí es lo básico y fundamental. Si no existe ese grupo de personas que trabajan duro no se consiguen los gobiernos en los ayuntamientos.
"Sin una agrupación de militantes grande, fuerte, unida y que cree en lo que hace a diario trabajando duro, no se consiguen los gobiernos en los ayuntamientos"
Soy muy partidaria de eso, y a día de hoy puedo decir que estoy muy satisfecha del grupo de compañeros que tengo más todos los que vengan, bienvenidos sean. Hemos construido algo muy bonito en este tiempo y pienso que un proyecto de cara a unas elecciones implica un trabajo conjunto. Estaré siempre y estoy donde mis compañeros me digan, donde quieran y donde crean que es en el mejor momento.
Con todo eso, cuando llegue el momento, ya se verá. A día de hoy no hay nada decidido.
En cualquier caso, lo preguntaba porque si me hubiera dicho que no directamente, nos ahorrábamos la siguiente pregunta, pero no es el caso. A todo alcalde que se precie siempre le surgen ideas nuevas y retos por ejecutar, proyectos futuros si continuara en al cargo. ¿En su caso, cuáles serían?
Lo primero que tengo que decir es que no me gusta personalizar. Somos un equipo de trabajo y los proyectos son comunes y por supuesto quedan muchas cuestiones por hacer. Y, además, muchas cuestiones novedosas que la gente nueva que se van incorporando traen consigo. Son necesidades que van cambiando, al igual que las oportunidades, y tenemos siempre que ir añadiendo muchas más cosas.
Antes he comentado que hay grandes problemas en los que pienso que hemos sido capaces de darles solución: El de las infraestructuras de agua, pero estamos ahora terminando de gestionar la solución global. Otro fue el puente sobre el río Cabra. Monturque tiene un problema enorme de inundaciones y ahí, de la mano de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, y junto con la Diputación, fuimos capaces de poner nuestro granito de arena para minimizar el riesgo.
No está por completo solucionado, se ha mitigado bastante y eso se ha comprobado en las últimas avenidas de agua que se produjeron. Eso se consiguió negociando con la Diputación que el puente sobre el río Cabra tenía que hacerse nuevo, y así fue. Fue una inversión enorme en nuestro pueblo y a día de hoy está dando sus resultados.
Otro punto que se resolvió fue el ensanche del Arroyo Hondo que era el segundo punto negro que daban lugar a las grandes inundaciones en los llanos de Monturque. Se acometieron ambas obras, aunque la situación no está resuelta del todo, porque el río sí que tiene un gran problema, y la CHG tendrá que abordarlo tarde o temprano. Es un proyecto a futuro, espero que no muy lejano, al que tendremos que ser capaces de darle solución para que los vecinos de esa parte de Monturque puedan vivir tranquilos.
¿Por qué? ¿Qué requiere el río Cabra?
Los técnicos tendrán que ser quienes aporten la solución técnica correspondiente, pero entendemos que el cauce con el paso de los años se ha perdido. Está desviado completamente. Está sucio y no sabemos si la solución técnica es que lo limpien, pero desde luego tienen que venir y darle una solución definitiva, pero no sólo en el tramo de Monturque.
"Los municipios afectados por el río Cabra nos hemos constituido en plataforma y hemos planteado a la Confederación que tienen que resolver el problema del cauce de forma integral"
Es un problema en el que nos unimos varios ayuntamientos en plataforma para pedir una solución integral del río. La solución no consiste en arreglar el tramo que corresponde a Monturque y dejarle el problema al que está aguas abajo. Tendremos que acometer un encauzamiento desde donde nace en Cabra hasta donde desemboca en el río Genil, pasando por todos los pueblos: Monturque, Montilla, Aguilar, Santaella... Todo tienen problemas.
Eso corresponde a la Confederación. ¿Han hablado ustedes con ese organismo público? ¿Les han comentado ya algo?
Sí. Nos hemos ido constituyendo en plataforma todos estos municipios y la idea es buscar la oportunidad, en fondos europeos, ahora con los nuevos fondos, de ejecutar un proyecto común que pueda solucionar de golpe la situación. Ésta es una de las propuestas que estábamos hablando entre los alcaldes de los pueblos e incluso ha habido ya alguna reunión con el presidente de la Confederación en Sevilla y esperemos que este tema en algún momento se aborde.
Barato no es.
Por supuesto, barato no es, pero es que hablamos de vidas de personas y la prioridad está clara en este caso.
Para mí eso es una espinita grande en la que hemos ido haciendo lo que hemos podido a lo largo de estos años, porque no es de nuestra competencia y creo que hay que seguir ese camino. No vamos mal, hemos avanzado algo y hay que darle solución global.
Otro problema al que dimos solución fue la calle Rafael de Lara, tan histórica y tan importante en estos días de Munda Mortis por el sitio donde está ubicada, en el entorno del Castillo. Fue una obra de Planes Provinciales que ejecutó también la Diputación y era una demanda de largo de los vecinos, porque estaba en un estado realmente malo, en Pleno Casco Histórico, con problemas de redes, como todas, y conseguimos abordarla en el mandato anterior. Para mí fue también otra de las espinita importantes y otra de las necesidades grandes de Monturque que fuimos capaces de resolver y sin dificultades pese al lugar donde está, que es zona de protección del Castillo.
¿Por qué dice eso?
Porque aparecieron unas cisternas romanas de siete metros de profundidad en medio de la calle, lo que supuso una paralización de las obras. Pero hay que agradecer que tuvimos una Diputación muy sensible con las necesidades del pueblo, se acometieron las reformas que hicieron falta en la obra, añadiendo la financiación que faltaba, para poner en valor ese recurso turístico único que surgió en ese momento y se aprovechó muy bien esa oportunidad para el pueblo.
Ahora que va mucha gente al cementerio y esa calle es paso obligado se pueden contemplar unas cisternas romanas magníficas, que se han conseguido integrar en la calle como un atractivo más, y cuando pensábamos que lo teníamos todo salvado, porque la cisterna está ubicada en la parte de arriba al inicio de la vía, terminando la obra en la zona baja se nos vino abajo un muro también del entorno del Castillo.
"La Diputación fue sensible y acabó integrando las cisternas romanas que aparecieron en la calle Rafael de Lara en las obras de renovación, aunque su coste se duplicó"
Otro problema añadido al que se le supo de una solución acertada y sólo hay que ver que El Castillo ha quedado mucho más integrado en la calle y mejor, aunque el coste de la obra se duplicó, pero la Diputación no se echó para atrás.
Otro problema que también me quedaré con la espinita es que no hay que olvidar que Monturque es un pueblo eminentemente agrícola, que vive del campo y estamos en un marco de denominación de aceites de excelencia, no sólo de vinos de Montilla-Moriles, donde el olivo tiene un valor fundamental para las vidas de las familias monturqueñas y los caminos rurales tienen una importancia vital y cuando llega la campaña agrícola hay que sacar la cosecha fuera.
¿Y cuál es el problema?
Monturque tiene la peculiaridad de que la gran mayoría de sus caminos no son de titularidad municipal, sino que son vías pecuarias, titularidad de la Junta de Andalucía. Con lo cual, cuando acometemos obras, ya sean por planes de la Diputación, de la Junta o con recursos propios, el Ayuntamiento sólo tiene competencias para acometer los que son suyos.
Vamos acumulando un problema con el paso de los años, ya que algo se hizo en algún momento, pero no ha terminado de solucionarse y ahí está la Vereda de Córdoba.
Usted ha solicitado en varias ocasiones su arreglo, precisamente.
Es que es muy significativa para nosotros, porque atraviesa nuestro término municipal, de Moriles a Aguilar y hasta Lucena. Todas las vías secundarias vienen a parar a esa primera vereda. A día de hoy es un auténtico peligro y no podemos dejar trabajar a los agricultores; sería una temeridad. Algunos de ellos para entrar en sus fincas y sacar sus cosechas de forma segura tienen que dar una vuelta por otros términos municipales y hablamos entre 15 o 20 kilómetros que tienen que hacer.
¿Qué le ocurre a esa vereda?
Hay pasajes donde el camino se ha quebrado y hay una caída de dos o tres metros, impracticable para un vehículo que va con una carga de cosecha que lo hace mucho más inestable.
A eso hay que añadirle que esos 20 kilómetros de más al precio que está el combustible es un gasto elevado.
Pues es así. Llevamos esa reivindicación al Pleno municipal donde todos los grupos la apoyaron, pero la realidad a día e hoy es que, a pesar de todo los que se ha hecho y se ha reclamado, se hizo una primera actuación en el año 2014 en la primera mitad del camino en dirección a Lucena, con nuevas cunetas para la recogida de agua y se reparó el firme. Esa parte funciona, pero el problema es la otra parte.
¿Es una actuación que depende de la Junta?
Sí.
¿Y qué razón o motivo hay para no rematar la reparación?
No sabría decirte. Es más, en las últimas reuniones que tuve con ellos se me llegó a decir que no sabían ni que ese camino existía. Y es una de las veredas principales. Llevé a Pleno esa respuesta porque me pareció francamente preocupante.
Se lo hice saber a los diferentes delegados del Gobierno de la junta que han ido pasando y ahí estamos. Es una reivindicación muy importante para nuestro pueblo. Si la gente no puede trabajar, no hay vida. La importancia de ese camino es que todos los demás secundarios desembocan en él.
"En las últimas reuniones que he mantenido con la Junta me han llegado a decir que desconocían la existencia de la Vereda de Córdoba, y eso me ha preocupado sobremanera"
Si en estos meses no se consigue nada, será una de las cuestiones principales sobre las que incidir en los próximos cuatro años. Que se niegue una realidad de algo que tiene un expediente importante de reclamación y reivindicación en la Delegación de turno, que incluyen escritos nuestros, de las asociaciones vecinales, solicitudes municipales, propuestas de proyectos que llegamos a plantear nosotros sobre diferentes tipos de actuaciones de diferente envergadura y muchas de urgencia, es muy, muy preocupante. Propuestas hemos hecho miles para intentar facilitar el trabajo y recortar plazos y dar pasos hacia adelante.
Eso significa que ese camino tiene un largo recorrido administrativo conocido por las delegaciones y por nuestro Ayuntamiento, y que me lleguen a decir, como así ha sido, que desconocen su existencia, me preocupa sobremanera.
¿Cómo ve las municipales y la situación el PSOE en la provincia?
Creo que el valor de este partido y su peso específico siempre ha estado en los pueblos. En los municipios de la provincia tiene una gran fortaleza y yo puedo hablar por el mío, donde hemos conseguido construir una agrupación fuerte, de militantes que creen en esto, históricos de siempre y gente nueva que se ha ido acercando, y contando con eso podemos enfrentarnos a unas elecciones con fortaleza, con proyecto y, además, nosotros que estamos en gobierno, con una gestión y un trabajo que nos avala durante estos 12 años.
Luego les tocará a ellos decidir. Yo siempre digo que esto es un examen y que un examen no se trabaja sólo el día de antes; hay que trabajárselo todos los días con la gente. A mí no me sirven las campañas electorales ni los 15 días de antes, que no son significativos de nada. En esos días parece que nos empeñemos en algunos lugares en ensuciar todo, cuando tampoco es cierto que sea así.
"A mí no me sirven las campañas electorales ni los 15 días de antes, que no son significativos de nada; esto consiste en una carrera de largo recorrido y no en un esprín final"
Esto consiste en una carrera de largo recorrido y no en un esprín final. Yo te puedo hablar desde la perspectiva de un pueblo pequeño, donde al final el trabajo diario es el que cuenta. La gente te conoce. Sabe cómo trabajas todos los días, sabe si has estado ahí para cuando te han necesitado para darle una respuesta, hayas podido solucionar el problema o no se haya podido (y eso hay que tenerlo claro que forma parte en nuestro día a día). Y de ese trabajo nuestro diario quiero pensar que no nos podemos enfrentar de mala manera, sino que hay que estar tranquilos. El trabajo está hecho y que luego la gente libremente decida cuál es la opción que más les convenga de cara al futuro.
He leído que tienen Wi-Fi gratuito en el municipio y que la administración electrónica ha evolucionado rápido allí. Algo normal por la juventud del equipo de gobierno, que usted mismo ha destacado, pero choca un poco con la media de edad elevada del municipio, hasta el punto de que usted en plena pandemia pidió que se cerrara la entrada al pueblo para salvaguardar a los mayores. ¿Cómo casa el envejecimiento que tienen con las últimas tecnologías?
(Se ríe). Casan a la perfección. Los tiempos cambian. Las necesidades cambian y hay que facilitar el acceso a todo el mundo. Evidentemente, los jóvenes lo tienen más integrado en sus vidas y los mayores estamos viendo cómo día a día en sus gestiones diarias se les está obligando a que también lo manejen. Así que entiendo que como Administración, en la medida de lo posible, hay que facilitárselo.
"Estamos haciendo también una labor importante de alfabetización digital con las personas más mayores, y no he visto personas con más inquietud a la hora de querer aprender cosas nuevas; es admirable y un orgullo"
Eso no se queda en instalar la Wi-Fi y punto. Estamos haciendo también una labor importante de alfabetización digital con las personas más mayores. De hecho, está teniendo un resultado maravilloso. No he visto personas con más inquietud, es que sobrepasan a los jóvenes en muchas ocasiones a la hora de querer aprender cosas nuevas, y para mí es por completo admirable.
Nosotros fuimos de los primeros municipios beneficiados hace ya algún tiempo del programa WiFi4EU, financiado con fondos europeos, y eso nos dio pie a poder facilitar conexión a Internet en todas las zonas públicas del municipio. Tenemos entre 15 y 20 puntos de Wi-Fi abierto con los que cubrimos todas las plazas, espacios públicos, infraestructuras deportivas o la zona turística. Entonces, a esas personas mayores a quienes se les está obligando en muchas ocasiones a utilizar las nuevas tecnologías para sus gestiones diarias (médico, banco y demás), y que entiendo no deberían ser obligatorias para ellos porque en muchos ocasiones no alcanzan ni saben ni han vivido con ello, habría que facilitarles la vida un poco más.
La realidad es la que es, y en la medida en la que cada uno quiera incorporarse a esas nuevas tecnologías, desde luego nosotros tenemos que darles las herramientas suficientes para que eso sea así.
¿Y se la dan?
En la medida que podemos, lo hacemos. Estamos llevando a cabo ahora mismo cursos y en estas últimas sesiones lo están haciendo de forma virtual para que aprendan a hacerlo desde casa, además de las presenciales. En esas sesiones por videoconferencia se les fuerza un poco a reengancharse con esas nuevas maneras.
Yo creo que con la pandemia se despertó mucho más el interés. Hubo personas mayores que quedaron aisladas. La verdad es que en Monturque, por suerte, existe una red familiar gracias a la cual hay pocas personas que vivan solas, pero las hay. Y al final tuvieron que recurrir a la videollamada, que durante esos duros meses sirvieron para sentirse más cerca de sus seres queridos.
Y había personas que hasta ese momento no sabían hacerlo, porque no lo habían necesitado. A día de hoy te vienen y te dicen que quieren aprender; son gente mayor muy dinámica y eso hay que aportárselo. Para mí es un orgullo que personas de 80 años pongan ese interés en aprender. Es admirable y desde el Ayuntamiento en ese sentido se ha hecho una labor muy buena.
Al contar con una población envejecida, ¿está teniendo Monturque dificultades para un relevo generacional?
El problema de contar con una población de media de edad avanzada es porque la gente está teniendo menos hijos y no porque la gente se vaya. Los hay que se van, pero también los hay que vienen, con lo cual el problema de la edad en nuestro pueblo no es porque se esté desangrando demográficamente hablando. Y eso se ve en el padrón a diario.
"La pandemia puso sobre la mesa la importancia y el lujo que supone vivir en zonas rurales, que das dos pasos y ya estás en el campo; esto es calidad de vida"
Es normal que por circunstancias de la vida muchos se vayan, igual que otros están llegando a construir sus hogares y vivir aquí. Que está ocurriendo. La calidad de vida que se tiene en un pueblo como el nuestro no se encuentra ni de lejos en una ciudad. Muchas veces la gente joven pasa por etapas en la vida de querer salir fuera a vivir experiencias, a estudiar, a trabajar, a empaparte de otra culturas, a buscar oportunidades. Eso es positivo y es bueno. Pero comprobamos que la gran mayoría, cuando llegan a la etapa de asentarse y formar una familia, buscan un lugar como el nuestro, por la tranquilidad y por la calidad de vida.
Eso se pudo comprobar, precisamente, durante el confinamiento.
La pandemia puso sobre la mesa la importancia y el lujo que supone vivir en zonas rurales. Cuando nos dejaban salir a dar un paseíto en las ciudades se les daba la vuelta a la manzana y esquivando gente, y aquí dabas dos pasos y estabas en pleno campo. Cuando en la capital lo estaban pasando tan mal, nosotros lo hemos disfrutado y hemos sido conscientes de la suerte que teníamos. El problema es que muchas veces no somos conscientes de ello, porque se vive en un mundo donde apenas se valora lo pequeño que tenemos a diario.
Pero eso permitió que ahora se valore en su justa medida y está llegando gente joven a levantar su casa en Monturque. Están cogiendo viviendas antiguas y allí crean su proyecto y las transforman en su casa afincándose aquí. Por eso digo que no es un problema de que la gente huya, sino que es un problema de que se tienen menos hijos.
¿Tienen problemas de desempleo en Monturque?
Bueno, es un problema que tenemos en muchos sitios. En Monturque, precisamente, no es uno de los más acuciantes. No tenemos tasas de desempleo muy elevadas. De hecho, cuando hay programas de empleo específicos o talleres donde se valora esa tasa a nosotros no nos suman por ser de los pueblos que tiene las tasas más bajas.
"Cuando salen programas específicos de empleo o talleres donde se valora la tasa de desempleo, a nosotros no nos suman por ser de los pueblos que tiene las tasas más bajas"
A eso se suma muchas familias que trabajan de la agricultura, numerosas empresas agrarias que hay aquí, grandes firmas agroalimentarias que son polos importantes de trabajadores de la localidad y eso permite que aquí se viva de otra manera y que tengamos otros recursos. Por tanto no podemos decir que sea uno de nuestros principales problemas.
Aparte de la agricultura y del peso específico que tiene en su municipio, cuentan con otro recurso cada vez más destacado y con un gran potencial como es el turístico, y que está atrayendo a visitantes al municipio.
Y cada vez más. Estamos en plenas Jornadas de Munda Mortis, en las que estamos viendo una respuesta que me da que dobla a ediciones anteriores. Ya me pasarán datos, pero la sensación que tenemos es ésa. Desde el viernes hemos visto el doble de personas que antes. Es increíble. Por tanto, es verdad que el turismo está cobrando cada vez más peso. Es un trabajo de fondo que se hace y que poco a poco va dando sus resultados.
¿Y eso en qué se traduce en el municipio? ¿Se está generando algún tipo de empresa o de servicio que se dediquen más a fondo a este fenómeno?
A día de hoy tengo que decir que todavía no. Y queremos seguir en ese sentido, porque no nos damos cuenta de que tenemos un potencial que en muchos otros sitios con mucho menos han sabido explotarlo mucho mejor. A nosotros nos falta iniciativa privada y eso lo tenemos claro. Y hay que seguir dándole argumentos para que esto pueda convertirse en un sector capaz de tirar también de la economía de Monturque
Ahora mismo ya es importante, porque para restaurantes, bares y comercios toda la vida que se le da al pueblo y al entorno del municipio es muy destacado, sobre todo en épocas como este puente festivo, porque viene gente a alojarse, nuestros alojamientos están completos y buscan alrededor y éstos también se llenan en ocasiones.
"Este año en Munda Mortis hemos visto el doble de gente que en ediciones anteriores y empezamos a necesitar una iniciativa privada que sepa explotar ese potencial turístico cada vez de más peso"
Es un problema que lo tenemos y no es sólo de Monturque, así que tenemos que conseguir darle más valor y a ver si somos capaces, no sé la fórmula cuál sería, pero necesitamos tirar de iniciativa privada para que vea aquí una oportunidad de crecimiento y desarrollo, porque realmente ya existe.
En efecto, la iniciativa pública, el Ayuntamiento en colaboración con otras administraciones, puede poner en marcha una serie de proyectos que pueden hacer que el pueblo florezca a nivel turístico durante todo el año y no sólo en Todos los Santos. Es que ya cuenta con elementos patrimoniales de peso, pero tiene un potencial impresionante. ¿Qué oculta Monurque en su seno?
Tiene mucho que ofrecer todavía. No se ha hecho una investigación arqueológica en profundidad sobre ciertos asuntos y eso es algo en lo que estamos siendo muy conscientes. Uno de los proyectos que teníamos para este mandato era la creación, junto con la Diputación, de un Centro de Recepción de Visitantes (CRV) en el entorno del Castillo y enfrente del cementerio de San Rafael, en una zona protegida, donde el proyecto requería de un estudio arqueológico previo.
En esos estudios previos el resultado ha sido que han aparecido estructuras importantes que hay que investigar. Con estas interesantes novedades, el proyecto del CRV pasa, como no podía ser de otro modo, a un segundo plano, que ya se abordará más adelante, y ahora lo más importante es centrarnos en investigar. Muy próximamente vamos a firmar un convenio con las universidades de Granada y de Córdoba para comenzar a hacer investigaciones arqueológicas en ese lugar que vengan a completarnos parte de la historia que ya conocemos a día de hoy.
Y eso que se sospecha que hay ahí, ¿es romano?
No es que se sospeche, es que están, porque se han visto que están mediante georradar previo. Podrían ser de época anterior a la romana. Con lo cual merece la pena estudiarlo. Por los indicios que se han visto ya antes de iniciar las excavaciones, hace sospechar que son estructuras previas a la presencia de Roma y, además, únicas en España. Hablamos de incidíos, pero está claro que merece la pena sacrificar ahora el otro proyecto, que pasará a una segunda fase, y meternos a fondo con el otro. Todo esto está sujeto a informes y autorizaciones de Cultura y como gobierno no nos vamos a empeñar en un CRV que supondría menoscabar el patrimonio de Monturque cuando lo más importante a día de hoy es conocer y poner en valor lo que realmente hay ahí.
¿Se puede sacar a la luz? Lo digo porque esa zona está ya cubierta y ejecutada, con un Museo Local incluido. ¿Se va a levantar todo eso para sacar los nuevos restos que haya debajo?
No está totalmente ejecutado. Estoy hablando de una parcela virgen que está justo enfrente, porque es zona de protección y en su momento se le hizo la catalogación de Bien de Interés Cultural tanto del Castillo como de las Cisternas Romanas y se aprobó el Plan de Protección del Castillo, que protege toda la zona monumental de Monturque. Por tanto, esas parcelas quedaron protegidas.
Es que ya se sabía que ahí había algo. No se conocía bien qué podía ser, pero ya se sabrá cuando se investigue. En las obras de la calle Rafael de Lara se hicieron unos trabajos arqueológicos que iban conforme avanzaba la obra, porque se sabe que estamos en zona de protección y pueden salir restos como de hecho así ocurrió con las cisternas.
"Tenemos un potencial turístico que en muchos otros sitios con mucho menos han sabido explotarlo mucho mejor; a nosotros nos falta iniciativa privada y eso lo tenemos claro"
Es una riqueza enorme, y desde el Ayuntamiento tenemos que fomentar una investigación mayor sobre Monturque, sobre su historia. Tenemos indicios, pero no certezas ni estudios arqueológicos firmes y tenemos que meternos a fondo en ese trabajo de investigación dando pasos hacia adelante. Tenemos que recopilar más datos, que la historia cuadre muy bien, porque nos faltan elementos en ese puzzle, al margen de lo que ya sabemos de las Cisternas del cementerio de San Rafael. A ver si poco a poco somos capaces de irlos desvelando y encajando.
Entre otras cuestiones, y es una de las principales en su caso, averiguar de una vez por todas cómo se llamaba Monturque en época romana y a qué ciudad corresponde, porque es la base de la identidad de un municipio.
Ojalá que se dé con una inscripción que lo desvele por fin. Hay personas por ahí que están investigando, que tienen sus teorías, pero necesitamos certezas. Y eso es algo que vamos a encontrar en la propia Monturque.
