Sabor, ahorro y ayuda al medio ambiente: el explosivo cóctel de las pajitas comestibles

Sabor, ahorro y ayuda al medio ambiente: el explosivo cóctel de las pajitas comestibles
photo_camera Sabor, ahorro y ayuda al medio ambiente: el explosivo cóctel de las pajitas comestibles

Ahorrar gastos y obtener ventajas es algo a lo que ningún negocio, ni tampoco ninguna persona, puede ni debe negarse. La carrera por la maximización de beneficios es una constante que siempre ha estado presente, y a la que ahora se suma también la búsqueda de las soluciones más "eco-friendly". Queremos ganar más, pero también ayudar a un planeta que cada vez necesita más atención.

En ese sentido, no son pocas las soluciones que han ido apareciendo en los últimos años. Pero hay una propuesta muy concreta que está pillando a todo el mundo a contrapie, totalmente desprevenido. ¿Sabías que existen pajitas comestibles? Y más aún, ¿sabías que son una solución de lo más económica y de utilidad para el medio ambiente?

Pajitas comestibles para acabar con los residuos

El concepto de las pajitas comestibles es bastante original, y lo mejor es que se encuentra accesible tanto para negocios como para particulares. Su propuesta es muy simple, ofrecen lo mismo que las pajitas tradicionales, con el aliciente de que están aromatizadas, tienen sabor y, además, te las puedes comer si lo deseas. Una idea que, para empezar, da bastantes alas a la gastronomía para experimentar con más opciones y que, para terminar, evita que se acumulen más residuos plásticos.

Cada vez hay más hoteles y restaurantes ofreciendo esta opción. Algunos la plantean como un extra para sus cócteles o bebidas, mientras que otros lo han integrado directamente en su carta habitual, sin cambios de precios ni nada por el estilo. Lo cierto es que no importa el enfoque que se le dé, porque todo apunta a que esta propuesta va a acabar convirtiéndose en un estándar de cara al futuro.

Empresas como SHAlbaida ya ofrecen estas pajitas consumibles a través de su página web, https://www.shalbaida.com/. Se está integrando en más y más catálogos de hostelería y suministros porque, desde su concepción, ya se ha podido posicionar como un referente para el futuro. Es de esperar, de hecho, que de aquí a unos años sea el estándar. Y es que las ventajas que presentas son muy interesantes tanto a nivel gastronómico como a nivel de reciclaje y contaminación.

¿Cómo influyen las pajitas comestibles en el medio ambiente?

Hay muchos datos interesantes en relación con los residuos plásticos tanto en nuestro país como en otros. En 2017, se crearon más de 130 millones de toneladas de residuos de todo tipo en España, de los cuales, un 0,6% son plásticos, es decir, 780.000 toneladas arrojadas como residuos eran única y exclusivamente de material plástico.

Es cierto que en el país estamos haciendo los deberes reciclando, de hecho, en 2018 se reciclaron 600.000 toneladas de plástico; pero cada nueva solución que llega en este sentido es más que bien recibida. La clave del papel que juegan las pajitas comestibles en la reducción de residuos es evidente. Por su mero planteamiento, jamás se convierten en algo que acaba en la basura o que busca una segunda vida reciclado.

Se consumen, como se consume cualquier alimento, cosa que evita que acaben depositándose como basura. Es otra forma de utilizarlas, aunque sigan teniendo el mismo uso de siempre. Estas pajitas, como todas, valen para que tomes cualquier bebida que desees. La diferencia está en que te las puedes comer, cosa que acabaría con una gran cantidad de residuos en bares, restaurantes, hoteles y demás negocios del sector de la restauración. De hecho, también podría acabar con este tipo de residuo en los hogares.

¿Qué posibilidades ofrecen estas pajitas en lo gastronómico?

Sin entrar en concretar demasiado, podemos asegurar con facilidad que las posibilidades de las pajitas comestibles a nivel gastronómico son prácticamente infinitas. El único límite que puede haber en este campo está en los sabores y aromas en los que estas se encuentran disponibles, y es que en los catálogos disponibles actualmente se pueden ver modelos con sabor a manzana, limón, lima, fresa, chocolate o incluso neutro. Aunque hay más, mucho más.

De hecho, algunas firmas ofrecen pajitas exclusivas para diferentes tipos de cócteles. Propuestas más pensadas para encajar con los ya más que tradicionales gintonics, para saborear más un mojito o para cualquier otra combinación de bebidas espirituosas. De hecho, algunas incluso funcionan muy bien con algo tan sencillo como un zumo o un batido. La clave está en saber buscar la mezcla más adecuada de sabores.

Algo que ya abre muchísimas posibilidades a cualquier negocio que quiera experimentar un poco más y construir una carta de bebidas diferente al resto, y que probablemente se vaya explorando más y más en el futuro. Para empezar, porque los catálogos se van ampliando con más opciones y más sabores, para terminar, porque cada vez más especialistas en bebidas idean formas de aprovechar esta ventaja tan interesante a través de las pajitas.

Ampliando el abanico de sabores como nunca antes

Una idea tan sencilla como hacer comestible algo que siempre ha tenido un uso tan claro y limitado hace que su potencial se multiplique a unos niveles realmente grandes. Poco a poco las cocinas lo van incluyendo en sus elementos habituales, y hacen que degustar algo tan normal como una bebida se convierta en algo completamente diferente.

De hecho, se pueden hacer cosas tan sencillas como potenciar el mismo sabor de lo que se bebe con una pajita que sepa igual, o buscar contrastes fuertes e intensos a base de contraponer sabores radicalmente opuestos. Son tan solo dos opciones de las muchas que seguramente se estén explorando ya en diferentes negocios con estas pajitas comestibles.

Pajitas que, además, poco a poco están bajando de precio porque su uso se extiende y porque su fabricación se simplifica. Pajitas que nos permiten probar nuevas experiencias gastronómicas combinando el sorber con el morder y que, por último, nos ayudan a cuidar un poco más el planeta en el que vivimos. Son algo bastante innovador, capaz de cambiar muchas cosas en todo tipo de negocios. ¿Se quedarán y asentarán en los próximos años? Nuestra apuesta ha quedado bastante clara con ellas.

Más en Relatos