ROBERTO SOTOMAYOR. CONSEJERO CIUDADANO ESTATAL DE PODEMOS

"El sector de las apuestas ha logrado la gamificación del juego para que se vea como si fuera un deporte"

Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS
photo_camera Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS

Vamos a ver. Ha sido tres veces campeón de Europa en la categoría máster de atletismo, con una doble coronación como subcampeón a nivel mundial. Se le conoce más por la cantidad de medallas recibidas y las veces que ha subido a un podio que por otra cosa. Pero Roberto Sotomayor Menéndez se dedica también a la política, especialmente tras una lesión que llevó a dejar la competición de elite Y su opción no deja lugar a dudas.

En 2021 fue fichado por la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, para liderar Podemos de cara la cuarta Asamblea Ciudadana, que elegirá a la nueva dirección estatal de la formación, y desde entonces no sólo se ha convertido en el azote por redes sociales de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, sino que ha viajado por la geografía española dando a conocer uno de los principales azotes de la sociedad española, como son las casas de apuestas y sus perniciosos efectos en la sociedad.

Evidentemente se pasó por Córdoba durante la campaña para las autonómicas y en un momento de esa gira, le pillamos en un aparte (literal) y le asaltamos para que nos desvelara el rostro verdadero que se oculta bajo la amable sonrisa del juego. Y la verdad es que pone los pelos de punta.

Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS
Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS

¿Es posible luchar contra el problema de las casas de apuestas? En Córdoba da la sensación de que sólo hay trabas para poder aplicar una normativa.

Maneras para luchar contra eso hay. Pero tienen que venir acompañadas de voluntad. El problema es cuando no hay voluntad por parte de las instituciones y por parte de los políticos, que son los que tienen que poner los medios y quienes tienen que legislar. En Córdoba, especialmente en Córdoba, que es la ciudad de Andalucía con menos inspecciones, no hay voluntad. Cuando tienes una ciudad como Córdoba, donde las cifras de auto-prohibidos se han duplicado en un año, mientras que el Ayuntamiento está aprobando nuevas licencias de aperturas de locales de apuestas, tienes un problemas de voluntad. No hay voluntad para legislar.

Cuando tienes un territorio donde la Junta de Andalucía ha sacado unos últimos datos que demuestran que la población cordobesa ha aumentado hasta en un 50% el gasto en juego presencial y tú estás aprobando nuevas licencias de apuestas, eso es falta de voluntad.

Por tanto, es posible.

Claro que se pueden hacer cosas, el problema es que desde el propio Consistorio no están haciendo su trabajo, no legislan en favor de la ciudadanía, porque éste es un problema de salud pública. Si tienes un problema de salud pública, y es que tu gente está cayendo enferma, que las asociaciones están saturadas de chavales que entran con unos trastornos de juego problemáticos o directamente con ludopatía y no haces caso a las asociaciones, casi ni les das subvenciones, y no les escuchas ni tampoco a los investigadores o no te lees sus informes que se han hecho por toda España, cuando no haces eso, ocurren dos cosas: O no te estás enterando de nada y lo mejor es que te vayas y a ver si en estas elecciones os echamos del Consistorio y te vas de una maldita vez a tu casa, o bien eres un colaborador.

Es lo que está pasando en muchos territorios, y también en Córdoba. Eres un colaborador y trabajas con la industria de las apuestas, porque te sueltan mucha pasta y cuando hacen eso has dejado de trabajar por la gente y trabajas por la industria.

Pero es, más bien, a nivel estatal donde llega ese dinero que acaba de mencionar.

No, porque éstas son competencias autonómicas o municipales. Es decir, una cosa es el juego on-line y la publicidad, que se han limitado con el Decreto de la llamada Ley Garzón, y otra cosa son las competencias autonómicas que son las que rige por ejemplo aquí en Andalucía la Junta. La Administración andaluza tiene competencias y tiene que aprobar una Ley del Juego que restrinja distancias, publicidad... Pueden hacer muchísimas cosas. Y pongo un ejemplo: Lo que hacen en Baleares es justo lo contrario que lo que están haciendo en Andalucía. Lo que han hecho en Valencia es justo lo contrario de lo que se está haciendo en Andalucía. Lo que se va a hacer en Aragón, donde se va a aprobar la nueva Ley del Juego dentro de pocos meses, es justo lo contrario que lo que se está haciendo en Andalucía.

Es decir, tratar esto como un verdadero problema de salud pública, dotar con recursos públicos la atención sociosanitaria, porque hay mucha gente que no tiene dinero para llevar a su hijo, o directamente a sí mismos, para ponerse en tratamiento, y el problema que tenemos creo que es de voluntad. Sin voluntad, o si no eres consciente de que esto es un problema que cada vez es más grande y que te va a estallar en la cara, pasan cosas como éstas.

Creo que esa visión cortoplacista de los políticos es la que está impidiendo que se legislen las ciudades para, no digo prohibir, porque es una actividad legal, pero sí regular

¿La Seguridad Social no cubre ese problema?

Sí. Pero evidentemente los recursos son muy pequeños. Las unidades de salud mental están abarrotadas y te dan, a lo mejor, tratamiento de tres meses o te meten en una lista de espera para tratarte dentro de cinco o seis meses con tratamientos de tres meses, y la ludopatía necesita tratamientos incluso de años. El caso es que España carece de un gran estudio que determine cuánto dinero nos está costando a los españoles y las españolas el tratamiento a la ludopatía.

¿Hay países de nuestro entorno que sí lo han elaborado?

Reino Unido, sin ir más lejos. Sería interesante que supiéramos cuánto le está costando al Estado español el tratamiento de la ludopatía.

Disculpe que le interrumpa. ¿Al Reino Unido, como ha mencionado, cuánto le está costando?

No tengo el dato de las islas británicas, pero es muy elevado. Cuando hablan de que el juego deja en España 20.000 millones de euros, habría que preguntarse el coste de ese problema. A lo mejor a largo plazo nos termina costando más caro. Creo que esa visión cortoplacista de los políticos es la que está impidiendo que se legislen las ciudades para, no digo prohibir, porque es una actividad legal, pero sí regular.

No puede ser que haya casas de apuestas a menos de 250 metros de los colegios o que directamente haya colegios que estén sitiados por las casas de apuestas. Eso es intolerable.

Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS
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En Córdoba doblan esa cifra y se habla de 500 metros; medio kilómetro.

Sí. Y ni siquiera han hecho moratorias para no aprobar licencias o para que no sean prorrogables; que bien podrían hacerlo. Al contrario, no lo hacen. Aquí es al revés: Aprueban nuevas licencias. Si tenemos ya bastantes casas de apuestas, venga vamos a implementar más. Me parece un crimen de Estado, que muchas veces lo digo y suena muy fuerte, pero realmente es así cuando tienes una población que está cayendo enferma y les permites que les vendan impunemente el juego.

Hay un tema que nadie pone encima de la mesa y que son las alternativas para la gente joven. Nos hemos olvidado de ellos. Hay ciudades que son realmente lugares hostiles para ello y ellas por falta de alternativas: No hay casas culturales, no hay posibilidades de que tengan alternativas deportivas gratuitas; las canchas de los barrios están desapareciendo; los chavales ya no tienen espacios públicos para reunirse. Entonces cuando hay sitios donde la única alternativa que hay es ir a una casa de apuestas a las seis de la tarde para ver un partido donde te ponen bebida casi gratuita, evidentemente la gente joven entra a las casas de apuestas a ver el partido, pasárselo bien, que es lo que nos están indicando muchos informes de los observatorios de muchas comunidades autónomas.

Me parece un crimen de Estado, que muchas veces lo digo y suena muy fuerte, pero realmente es así cuando tienes una población que está cayendo enferma y les permites que les vendan impunemente el juego

Póngame un ejemplo.

En el último informe del Observatorio del Juego del País Vasco, por ejemplo, o de Extremadura, lo que nos ponen de relieve es un denominador común: Y es que la gente joven está volviendo a ir a las casas de apuestas presenciales en grupo y como forma de pasárselo bien.

Para socializar.

Correcto, como fórmula de socialización. Y es un auténtico drama para nuestro país. Hay un dato muy relevante: España es el país de la Unión Europea (UE) con las cifras de ludopatía juvenil por debajo de los 20 años más altos. Es un dato que viene acompañado del suicidio, que es muy importante. Hay un estudio de Montserrat Gómez García, de la Universidad de Barcelona, que indica que el juego es ya la tercera causa de suicidio en el Estado español. Me da que cuando tenemos unos datos que nos están advirtiendo del problema, que hay que ponerse las pilas ante el juego y las apuestas, habría que actuar.

¿Qué ocurre? Que el sector de las apuestas, y del juego en general, está respondiendo de una manera muy reaccionaria. Por ejemplo, en Andalucía han puesto en marcha un proyecto llamado FES, de colaboración público-privada con las consejerías de Educación, Cultura y Deporte, ya me gustaría que alguien me explicara qué tiene que ver esto con las apuestas, para dar charlas de formación de juego responsable en los colegios públicos. Es decir, explicarles cómo se puede jugar de forma responsable.

Lo del FES de la industria del juego en los colegios es como si las tabacaleras fueran a los centros escolares a decirles a los chavales cómo fumar responsablemente

Yo me imagino si esto fuera la industria tabacalera y que fueran al colegio a decirles a los chavales cómo fumar responsablemente. Pues esa idea la ha comprado la Junta de Andalucía, lo ha comprado Euskadi, lo ha comprado Cantabria y lo ha comprado Ceuta.

Es algo en el que hay que ponerse muy serio, porque que la industria del juego entre en los colegios públicos a dar clases sobre cómo jugar responsablemente, mire usted, no. Si no queremos tasas de ludopatía, lo que tienen que hacer es no invitar a la gente a jugar.

Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS
Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS

Es que suena un poco a poner al zorro a cuidar a las gallinas.

Básicamente.

Comparando Andalucía con el resto del país, ¿cómo estamos aquí?

Pues mal. Mal. Es una comunidad que tiene una gran cantidad de casas de apuestas. En algunas ciudades, como Málaga o Córdoba es así. En Granada ocurre otro tanto. Tienen una cifra muy elevada con respecto a la población. Es que por cada 100.000 habitantes Andalucía es una de las comunidades autónomas con más locales de apuestas, y las tasas de ludopatía se han incrementado un 20% en los últimos cuatro años. Hablo de las tasas juveniles, porque si nos ponemos a ver prevalencias de ludopatía en personas de más de 30 y 50 años tendríamos ahí otro segmento social muy afectado. Siempre hablamos de la ludopatía juvenil, pero no de gente de entre 40 y 45 años, que son como yo los denomino, los ludópatas clásicos, que son conscientes de que tienen un problema y muchas veces visitan los centros de tratamiento porque saben lo que hay.

La diferencia con la ludopatía de las apuestas deportivas es que los chavales no son conscientes, acuden a los centros obligados por la familia e incluso llegan a pensar que si tuviesen otra vez la oportunidad de seguir apostando, lo harían de otra manera porque saben que ellos entienden de fútbol y ése es el gran drama: El sector de las apuestas lo que ha conseguido en este país es algo que se llama la gamificación del juego. O sea, inocular la idea a la gente joven de que apostar de por sí ya es un deporte y que deportes y apuestas van de la mano. Esa idea hay que romperla en mil pedazos. Una cosas es el deporte y otra bien diferente son las apuestas.

¿Por que dice que van obligados por las familias?

Porque de verdad es que no son conscientes del problema. Es la familia la que les dice que vayan a un centro. Notan la presión; las familias están desesperadas con los jóvenes, porque se dejan mucho dinero con las apuestas y ellos no creen que tengan un problema. Siguen pensando que si tuviesen otra vez dinero lo harían mejor y ganarían seguro, y se auto convencen de que sólo han tenido una mala racha.

El ludópata clásico de 50 años de las tragaperras sabe que tiene un problema, el joven de las apuestas deportivas, no

Ésa es la diferencia entre el ludópata de las tragaperras clásico de 50 años, que sabe que tiene un problema y acude y quiere salir y el otro, no. Además el tratamiento en los jóvenes es realmente complicado, porque los psicólogos para intentar abstraer ese problema lo que les dicen es que no vean deporte. Porque cuando ven un partido de fútbol se acuerdan de las apuestas.

Eso me parece un pelín exagerado.

Eso es matar en vida a los jóvenes. Y eso es lo que ha conseguido la industria de las apuestas en este país. Por eso la industria del juego es muy poderosa.

Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS
Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS

Que se lo digan a Alberto Garzón.

Al ministro le están dando mucha cera, no porque diga que la carne roja sea una carne de mala calidad. Para nada. Le dan cera, porque los medios de comunicación han perdido muchísimo dinero en patrocinio de apuestas deportivas. Hace nada veíamos al señor Pepe Domingo Castaño en la Cope decir que Garzón iba a acabar con la radio. Me acuerdo cuando hace 20 años se prohibió fumar y se prohibieron los anuncios de tabaco; se gritaba con alarma que se iba a acabar la publicidad y se rasgaban las vestiduras quejándose de que se iba a terminar la radio. Mentira. No se va a acabar nada.

En el año 2017 se alcanzó el récord de la publicidad de las casas de apuesta. En España hubo 2.744.100 anuncios invitando a la población española a apostar. Tenemos los problemas que tenemos, porque durante 10 años no hemos hecho absolutamente nada. No ha habido ningún plan de prevención. Durante los años de Mariano Rajoy como presidente se licitaron en 2012 más de un centenar de licencias de juego on-line y se bajaron cinco puntos el impuesto de sociedades. No hubo nada y ahora tenemos los problemas que tenemos.

Me suena todo esto mucho a contemplar la bebida como algo socialmente bien visto. Y en su momento fumar le pasaba tres cuartos de lo mismo.

Con el juego es lo mismo, pero creo que va un paso más allá, porque hablamos del juego privado y dejamos de lado el juego público. ¿Qué pasa con la ONCE que tiene 50 juegos  de los cuales 41 son rascas que son superadictivos? Y se vende en las estafetas de Correos. Nadie habla de esto: ¿Por qué en las estafetas de Correos se venden productos de la ONCE? ¿Cuál es el motivo? Esto no puede ser.

Tenemos los problemas que tenemos, porque durante una década no hemos hecho absolutamente nada al respecto

Siempre hablamos del juego privado, pero habría que hablar también del juego público. De la Lotería Nacional y demás, que está como muy naturalizado todo.

Hombre, lo que yo no veo posible es que se eliminen de golpe y porrazo todo tipo de apuestas.

Creo que habría que regular también determinados juegos que son de respuesta rápida. El rasca es muy adictivo. Preguntas a cualquier vendedor del cupón de la ONCE y te va a decir que ya no vende casi cupones, pero sí rascas, y sobre todo en público femenino, por cierto, y en mucha gente joven.

Hemos hablado de la Junta y los ayuntamientos. Hablemos un poco a nivel estatal. Desde arriba se puede tener una visión mucho más generalizada de lo que hay y es desde donde se podría actuar mejor.

Lo que son casas de apuestas físicas es de competencia autonómica. Ahí no podemos hacer nada.

¿Nada de nada?

Pero nada, porque son competencias delegadas en las comunidades, y por ese motivo cada comunidad tiene su propia ley autonómica. Hay leyes más restrictivas, otras más permisivas y otras que regulan directamente. Pero sí que se ha dado un paso desde el Ministerio de Consumo, por ejemplo con la regulación de la publicidad. Ya iba siendo hora de que los anuncios de televisión de casas de apuestas desaparecieran. Eso es un gran avance. La pandemia hizo que a muchos diputados se les abriera los ojos con esto. Porque es que todo el mundo estaba metido en casa viendo a casas de apuestas constantemente. Muchos chavales que estaban en tratamiento recayeron durante la pandemia.

Además la publicidad viene acompañada de rostros famosos, de actores y presentadores, pero también de deportistas.

Eso me lleva a la publicidad en los espectáculos deportivos. Era intolerable que en un recinto de fútbol infantil hubiera vallas publicitarias de casas de apuestas. ¿El siguiente paso cuál es? Regular las cajas-botín de los videojuegos monetizados.

Roberto Sotomayor posa para Córdoba Hoy. FOTO ÁLVARO SANTOS
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¿Qué son esas cajas-botín?

Las que aparecen en los videojuegos de repente y te dicen que pagues un poco de dinero para abrirlos y consigues recompensas para seguir jugando. Tienen un componente muy parecido a lo que son los juegos de azar. Se gastan pequeñas cantidades, pero al final invierten una pasta interesante. Genera mucha dependencia y se deja mucho dinero. Eso se va a regular pronto. Va a entrar una Ley, que están a punto de sacar adelante desde el Ministerio de Consumo, para regular las boxes, que es como se llaman a las cajas-botín.

Eso ya lo han hecho en algunos países de Europa, como es el caso de Bélgica . Eso sería un paso adelante, porque hay un componente muy parecido al jugador de azar. Es más, los chavales que empiezan con las boxes terminan participando luego en los juegos de azar y en las apuestas. Luego está claro que van muy ligados. El sector del videojuego lo que hace es responder diciendo que no hay informes al respecto y que incluso hay investigaciones que demuestran lo contrario, pero es que están financiados por la propia industria del juego. Perdone usted, pero eso no me vale. Lo que vale son las investigaciones de los profesores de universidad, de los investigadores y las investigadoras que sí nos están alertando de estas cuestiones.

Las tasas de ludopatía en Andalucía se han incrementado un 20 por ciento en los últimos cuatro años

En el último Plan Nacional de Drogas de 2021 lo que se pone de relieve es que los chavales juegan mucho a videojuegos y dejan un 20% menos de 50 euros al año en eso y un 9,2% más de esos 50 euros.

¿Es la izquierda política más consciente del problema que la derecha?

Aparece en nuestros programas. Yo me he puesto muy machacón con el tema, al menos desde mi espacio político, que es Podemos a nivel estatal. Ya en Castilla y León en campaña recalcamos mucho sobre el tema de las casas de apuestas, sobre todo en esa comunidad autónoma, donde las vinculaciones con (Alfonso Fernández) Mañueco (presidente de la Junta de Castilla y León) y el sector privado son completamente inadmisibles. Pero hay que decir que ocurre en todas las comunidades. Te vas a cualquiera y ves cosas similares.

En Andalucía la izquierda es consciente del problema que hay, y lo bueno es que se da voz, de este modo, a los colectivos sociales, que son los que te están diciendo lo que hay. Recientemente estuvimos con los compañeros de una asociación cordobesa, Acojer, que son los clásicos, los que saben que tienen un problema, y nos avisan de la amenaza que supone el juego para la sociedad en general. Hay que hacerles caso, hay que escucharles e ir a visitarles durante todo el año y no sólo cuando hay deportes y ligas. Hay que escucharles y leerse los informes de los observatorios del juego, hay que dar voz a los investigadores y a los psicólogos, que son los que nos están diciendo "oigan, que aquí un problema que es muy serio y hay mucha gente joven que está cayendo enferma". Es que no podemos tener estas cifras de ludopatía juvenil en España. Son indecentes.

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