Un grupo de unos 160 vecinos del barrio de Santuario, en el Distrito Sureste, han contactado con el colectivo Córdoba Denuncia, que preside Manuel Ortega, para denunciar situaciones de inseguridad con daños físicos por el estado en que se encuentran las instalaciones municipales de la piscina.
Según ha expuesto la portavoz de esa representación vecinal, Montse Bonilla, hay bordillos que no están al nivel del agua y que dañan la piel, escaleras rotas, una "absoluta falta de limpieza", además de "personas incívicas que se bañan con la ropa puesta y empujan a otros dentro de las piscinas" y muchos problemas con los niños de escasa edad que se producen numerosos heridas sangrantes en rodillas, pies y manos de la piscina infantil, por no hablar de lo que estiman son "precios abusivos".
Por este motivo, han contactado con el colectivo Córdoba Denuncia, a fin de que o bien que la empresa concesionaria de la piscina del Santuario o bien el Ayuntamiento, a través del Instituto Municipal de Deportes de Córdoba (Imdeco), pongan una solución o adopten las medidas pertinentes.
Por el momento, Ortega les ha propuesta una recogida de firmas que se llevarían por Registro de Entrada al Ayuntamiento a fin de "se les dé respuesta".
