CAMPIÑA SUR

El senador Mulet pregunta por qué la Guardia Civil no dejó que sonara La Internacional en Santaella

Igualmente, como denuncia CTA, pregunta al Gobierno el motivo por el que se permitió que hubiera una contramanifestación ilegal

Tras las extrañas circunstancias que tuvieron lugar en Santaella el pasado 30 de junio con motivo de una convocatoria de CTA en apoyo a su delegada sindical en la firma ajera Fuente el Pino por parte de de la Guardia Civil, el senador del grupo parlamentario de Izquierda Confederal (Adelante Andalucía, Más Per Mallorca, Más Madrid, Compromís, Geroa Bari y Agrupación Socialista Gomera), ha presentado una serie de preguntas al Gobierno central para que se aclare una situación anómala.

En su escrito, el senador plantea siete interrogantes, a saber: ¿Por qué motivo se permitió la celebración una contramanifestación el mismo día y a la misma hora y en el mismo lugar de la sí autorizada a la CTA? ¿Por qué se tardó tanto en trasladar a esta manifestación no autorizada? ¿Por qué motivo no se identificaron a todos los alborotadores de la manifestación no¡ autorizada? ¿A cuantas personas de las concentradas para alterar el orden público contra la manifestación legal de CTA se llegó a identificar? ¿Estas identificaciones han acabado con algún tipo de sanción?

Igualmente ha preguntado ¿por qué motivo por parte de la Guardia Civil se prohibió que sonase por megafonía la Internacional? ¿Existe alguna orden interna de la Guardia Civil que impida que se use este himno de la clase trabajadora? ¿Va el Gobierno a investigar este caso concreto y adoptar medida para que ningún miembro de la Guardia Civil vuelva a impedir o amedrentar a quien quiera hacer sonar en un espacio público la Internacional? ¿Ha contestado o adoptado alguna medida la Subdelegación del Gobierno en Córdoba?

Y es que, tal y como reza el escrito del senador, tras haber recibido una queja formal por parte de CTA en Córdoba, el pasado día 30 de julio este sindicato tenía comunicada en tiempo y forma una concentración en la Plaza Mayor de Santaella, una caravana de coches por las calles del municipio y otra concentración en el polígono industrial del Cañuelo, con motivo de la sanción de dos meses interpuesta de forma injustificada a una delegada suya, representante de los trabajadores, de este Sindicato en la empresa Fuente el Pino. Y así se desarrolló.

Tal y como comunicaron el día anterior a la Subdelegación del Gobierno, por las redes sociales se estaba convocando una contramanifestación, que además era en el mismo sitio y a la misma hora convocada, por motivos contradictorios, y sin que se hubiera informado de ella a las autoridades competentes.

Aunque la Guardia Civil se dirigió a ellos, tardaron entre tres cuarto de hora y una hora en disolverse, o mejor dicho en trasladarse de lugar unos 150 metros más abajo, junto al bar El Tejar, donde siguieron increpándo a los miembros y familiares de CTA durante la caravana de coches. En todo momento mantuvieron una actitud gesticular y vociferaron de forma agresiva contra la manifestación legalmente convocada. "E, insisto, tardaron más de tres cuartos de hora en trasladarse a otro lugar", abunda el senador.

Según informó el teniente de la Guardia Civil a miembros de la CTA le tomó la identidad a  cuatro de ellos, cuando había 46 según consta en fotos que se han publicado por este sindicato en sus redes sociales. "Dicha manifestación fue concebida para crear un acto de desorden público, increpar y amedrentar el libre ejercicio de manifestación de los que legalmente la habían convocado", por ello, "todos sus asistentes deben de ser identificados y sancionados con falta muy grave, por los hechos allí acaecidos", indica en su escrito Carlos Mulet.

"Y con el consentimiento expreso durante más de tres cuartos de hora de la Guardia Civil, puesto que no procedió a disolver", añade.

Reflexiones del senador

En su reflexión, en senador se pregunta que "si los que hubieran convocado de forma ilegal hubieran sido CTA, seguramente se habrían detenido y la manifestación se hubiera disuelto a palos".

Cuando los manifestantes legales se concentraron en el polígono industrial de El Cañuelo, y por parte de CTA se informó por megafonía que iban a poner La Internacional, en torno a las 12.20 horas, se acercó un agente de la Guardia Civil, y, según informa desde de la CTA, se le comunicó texturalmente: "¿Si la manifestación la estamos haciendo legal, vamos a hacer todo legal, La Internacional es un himno inconstitucional y por lo tanto es ilegal". Le replicó el representante sindical que "¿eso no es así, en España ese himno no está prohibido", a lo que contestó el teniente: "¿Pues tendremos que escribir".

Desde la CTA se respondió que no había problema y que no se ponía, pero "yo sé de Derecho, y poner ese himno por megafonía no es ilegal". Y el agente replicó en tono mucho más agresivo "si usted sabe de Derecho, debería de saber que ese himno es ilegal, como lo es el cara al sol". La respuesta no se hizo esperar: "Por desgracia, tampoco es ilegal". En ese momento se acercaron cuatro agentes más de la Guardia Civil, por lo que desde el sindicato se zanjó la cuestión diciendo que "no hay problema; no se pone".

Según el senador, el hecho de acercarse los cuatro agentes al que ya estaba hablando con la CTA y al teniente, "pudo tener un efecto intimidatorio, y quién sabe si hubiera acabado con detenidos por desobediencia y atentados a la autoridad".