El Foro por la Memoria de Espejo 'Comandante Pérez Salas', con el apoyo de la Diputación, a través del delegado de Memoria Histórica, Ramón Hernández (IU) y el Ayuntamiento ucubitano, ha presentado esta mañana en la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía y la Subdelegación del Gobierno las solicitudes correspondientes para la declaración de Bien de Interés Cultural (la Administración andaluza) y Lugar de Memoria (la central) los lugares que forman parte de 'Caminos de Memoria. Ruta de Robert Capa', a raíz de la icónica imagen de Robert Capa 'Muerte de un miliciano', y que son, entre otros, la Haza del Reloj, El Alcaparral o Los Molinos del Campo.
Así lo han señalado hoy el propio Hernández y José Luis Santos, presidente del Foro, quienes, además, han animado a todos los andaluces y andaluzas a conocer de primera mano esta ruta "que nos lleva a recordar nuestra historia oculta y nos lleva a los inicios del fotoperiodismo moderno de guerra, ya que es una de las imágenes más importantes del Siglo XX".
Hernández ha aprovechado la ocasión para lanzar el mensaje a la Administración andaluza, competente para todo lo relacionado con la Memoria Histórica y Democrática, de que desde el año 2020 no se declara ningún lugar de memoria. "Están obligados a cumplir la Ley y a financiar la Memoria Democrática en esta comunidad y, por tanto, a declarar los expedientes de lugares de memoria almacenados y sacarlos adelante", ha señalado, para añadir que "el Gobierno de Moreno Bonilla se tiene que poner las pilas y empezar por esta declaración en Espejo".
Por su parte, Santos, quien ha agradecido a la Diputación el hecho de que gracias a sus subvenciones "Espejo es mucho más conocido a nivel incluso internacional", ha explicado los motivos por los que se pretende conseguir la declaración de BIC y Lugar de Memoria para ese paraje cordobés. "La foto de Capa, para nosotros, va más allá de ser una imagen icónica del fotoperiodismo de guerra", y en este sentido un BIC "implica el reconocimiento de los maestros y maestras de la República que tuvieron que dejar de enseñar, como fue el caso de José Luque Langa o Clodoaldo Gracias".
Por otro lado, que sea Lugar de Memoria serviría como homenaje a los "muchos héroes de nuestro pueblo" obligados a serlo por la Guerra Civil. Entre ellos, exiliados como Virgilio Peña o Antonio Ortiz Roldán, quien llegó a ser comandante en el ejército soviético en la Segunda Gran Guerra, o asesinados como Serrano Ramírez, un guarda de campo con carabina que fusilaron por esa razón, el policía municipal Francisco Elías Tienda o su tío-abuelo, Rafael Medina Ramírez, fusilado en Castro del Río.
José Luis Santos, que es pura memoria viva, guarda abundantes historias en su haber, como la del hijo de Antonia la Partera, quien cuando se perdió la batalla de Espejo y el comandante Pérez Salas ordenó evacuar el pueblo, él se negó y se subió a la torre del Castillo con una ametralladora y un fusil para acabar arrojándose desde lo alto para no caer en manos de los golpistas. "Todo un gesto de dignidad".
Igual que el que tuvo su propio abuelo, Julián Medina, fusilado en Jaén. "Hace ocho años me llegó cómo fusilaron a mi abuelo, hermano de Rafael Medina, Julián, en el cementerio de San Eufrasio de Jaén: Los franquistas tenían la costumbre de que los condenados a muerte contemplaran la ejecución de sus compañeros, y al hombre que estaba con mi abuelo le acabaron conmutando la pena por otros ocho años de cárcel, y así pudo contar que mi abuelo, que se negó a que le pusieran la venda para mirara a sus asesinos, gritó dos veces ¡Viva la República! antes de la orden de fuego. Otro gesto de dignidad".
Por ello, en palabras del presidente del Foro, en la foto de Capa "están representados todos estos héroes que dieron su vida por la libertad y la democracia".
Y el gran 'culpable' de que elaborar la documentación para que se declare el paraje BIC y Lugar de Memoria es el arqueólogo, académico y escritor Fernando Penco. En su opinión, 'Muerte de un miliciano' "es, junto al Guernica de Picasso y la muerte de García Lorca, las imágenes más universales que hay de la Guerra Civil española". Pero no es sólo la famosa instantánea "que debería estar en la estación del AVE de Córdoba para que los visitantes la ubiquen claramente en nuestra tierra", sino todas las demás imagines vinculadas a ella la que dieron pie a ubicar el suceso en Espejo y no en Cerro Muriano.
Son una treintena de fotos, elaboradas tanto por Capa como por Gerda Taro, en las que aparecen una serie de rincones vinculados a ese momento histórico y que son los ya citados Haza del Reloj, los Molinos y otras cortijadas, y que configuran parte de la ruta que se inauguró el pasado año. En este sentido, Penco ha considerado que esos espacios deben ser protegidos cuanto antes para que no se degraden más, ya que algunos, como los Molinos están ya en ruinas, y que sean Sitio Histórico de Bien de Interés Cultural supondría "la máxima de protección que hay".
Fernando Penco lleva más de 20 años ligados a 'Muerte de un miliciano' y fue a raíz de una monografía sobre el afamado reportero bélico en 2007 de Richard Whelan, 'This Is War: Robert Capa at Work', cuando salió a la luz el trabajo fotográfico que realizaron Capa y Tardo, probablemente del 4 al 6 de septiembre de 1936 en el frente de Córdoba, y que "considero que ahí nace como tal el fotoperiodismo de guerra moderno". Esa treintena de imágenes son las que han permitido, a modo de secuencia, ubicar el lugar donde se realizó la foto. "Cuando las vi supe que no se había hecho en el Muriano, porque conozco sus formaciones, muy antiguas, y no eran parecidas, así que era cuestión de buscar el nuevo emplazamiento".
