La situación de los embalses cordobeses ha mejorado algo con las últimas lluvias, pero no está tampoco como para tirar cohetes. Desde el pasado día 11 hasta la fecha actual, se han pasado de los 988 hectómetros cúbicos de agua embalsada, cuando estaban al 28,97% de la capacidad de la cuenca, a los 1.012 hectómetros de hoy, martes, con un porcentaje global medio del 29,69%.
Efectivamente, se ha producido una ligera mejoría de 24 hectómetros cúbicos (un 0,72 de subida porcentual), pero es que ola media por estas fechas de los últimos 10 años era del 59,32%, y si se busca una comparativa algo más próxima, en septiembre pasado los embalses cordobeses estaban al 37,8% (un año antes, incluso mejor con un 47,38%).
Lo dicho, las últimas lluvias han venido muy bien, pero no bastan para llenar los embalses. De hecho, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), la pluviometría de los últimos siete días en las zonas que afectan a los embalses de su cuenca suman una media en Córdoba de 58,5 litros por metro cuadrado, con días especialmente llamativos, como el del pasado viernes, con la alerta amarilla, que dejaron 34,8 litros, con zonas muy interesantes como los 63,6 litros de Cacahuey, los 51,7 de La Carlota, los 47,8 de Puente Nuevo, los 47,7 de Guadaño o los 46,5 de La Breña. A nivel global Cacahuey recogió del 19 al 25 de este mes un total de 122,3 litros por metro cuadrado, mientras que en La Carlota fueron 90 y en Montilla 91,3.
Por embalses, sólo hay uno que está por encima de la mitad de su capacidad, que es el Martín Gonzalo, en la zona de Montoro, al 53,98%, pero todo el resto no llega ni a eso. Hay honrosas excepciones, como el de Sierra Boyera, en el Guadiato, con un4 9,60%; el de del Guadalmellato, en la Sierra y que entrega agua a la ciudad califal, con un 47,23%, o el de Guadaño, también en el Valle del Guadiato, con un 46,91%. También Bembézar, en la sierra de la Vega, está al 41,40%, y el de regulación de Retortillo, en Hornachuelos, tiene un 43,26% de su capacidad ocupada.
En el lado contrario, los peores son el de La Breña, en Almodóvar del Río, con un preocupante 17,67%; El Arenoso, en el Alto Guadalquivir, con un 22,86%, o el Yeguas, en Cardeña, con un 25,02%.
En un termino medio se sitúan el de Iznájar, que es el mayor de Andalucía, con un pobre 33,37%; el embalse de Puente Nuevo, en plena cuenca minera del Guadiato, con un 29,29%; el de San Rafael de Navallana, que suministra a la capital, con un 29,59%, y el de Vadomojón, en Baena, con un 29,36%.
Mejor que llueva un poco más y se empezará a hablar de final de la sequía.
