Una ingente cantidad de buitres leonados, algo más de medio centenar, según testigos, además de una pareja de buitres negros (en serio peligro de extinción), se han dado un festín esta misma tarde, sobre las 13.00 horas, con una oveja muerta en una dehesa ubicada en el Norte de la provincia de Córdoba, tal y como se aprecia en el vídeo cedido a este periódico por Juan Ortega Sánchez.
Aunque buena parte de estos animales es muy probable que hayan llegado desde la vecina provincia de Ciudad Real, hay que recordar que la Junta de Andalucía estuvo llevando a cabo el cuarto censo invernal de buitre leonado (gyps fulvus), con la colaboración de alumnos de la Universidad de Córdoba (UCO), algo que llevaba 10 años sin realizarse.
Ya en enero pasado desde la Administración autonómica se dio a entender que la proporción de buitres leonados que invernan en África podría estar disminuyendo debido al cambio climático, por lo que estarían concentrándose en Andalucía en mayor proporción.
El cuarto censo invernal estuvo organizado conjuntamente por el Plan de Recuperación y Conservación de Aves Necrófagas y por el Programa de Emergencias, Control Epidemiológico y Seguimiento de Fauna Silvestre de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible. En él participaron personal funcionario especializado, agentes de medio ambiente y personal técnico de Amaya, así como entidades que voluntariamente se unieron a la iniciativa, en base a su importancia en el contexto europeo.
El objetivo era actualizar la información sobre la importancia de Andalucía en la conservación de la población ibérica y europea de esta especie, teniendo en cuenta que en el último censo en Andalucía se contabilizaron 4.035 parejas, de las que 284 se ubicaron en Córdoba, siendo Andalucía la tercera de España, por detrás de Castilla y León y Aragón.
La población muestra una importante tasa de incremento desde 1979, cuando se censaron poco más de 850 parejas. En invierno Andalucía incrementa su población de individuos juveniles procedentes de otras regiones de España y parte de Europa Occidental, lo que implica una gran importancia para en la conservación de los buitres ibéricos. La especie se encuentra incluida en el Listado Andaluz y Español de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial.
Este año se ha incluido por primera vez en el censo a una nueva especie de buitre, procedente de África, que se ha asentado en Andalucía: el buitre de Ruppell o buitre moteado, del que se conocen varias decenas de individuos asentados en las colonias de buitre leonado.
Esta especie, catalogada en peligro crítico de extinción a nivel mundial, puede estar a punto de desaparecer en sus territorios africanos, mientras que en Andalucía es cada vez más abundante.
