El Centro Logístico de El Higuerón va a dar un paso adelante con un trámite administrativo que va permitir una segunda fase del lugar, que pasa por la compra de una serie de parcelas que requieren de una modificación del llamado Plan Funcional Andaluz por parte de la Junta y la aprobación después de la Gerencia de Urbanismo de Córdoba. De esta forma se ponen parcelas a la venta a partir de febrero en un recinto de 40 hectáreas ya urbanizado, al que le seguirá otra fase con 15 hectáreas más, justo en frente del Decathlon. Además habrá un rediseño sobre lo que estaba previsto para atender a las demandas de los potenciales clientes, que cada vez necesitan parcelas más grandes (no tan pequeñas como en la primera fase). De esta forma Junta y gobierno municipal superan uno de los obstáculos para el centro que más han resaltado, el hecho de que hasta ahora sólo existiese la posibilidad de alquiler.
Así lo ha anunciado el director gerente de la Agencia Pública de Puertos de la Junta de Andalucía, Rafael Merino, y el presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo de Córdoba, Salvador Fuentes. Ambos han indicado que ya hay diversos operadores de gran importancia interesados en trabajar en el centro logístico, hasta el punto de que han afirmado que habrá que buscar áreas nuevas, pues esta se va a quedar pequeña.
El impulso al centro logístico de El Higuerón no entrará en competencia con el de Antequera, sino que serán complementarios y ambos se beneficiarán, como ha explicado Merino: "el comercio electrónico lo ha cambiado todo, y ahora no hay competencia entre territorios, sino entre líneas de ferrocarril".
Para Fuentes, la característica fundamental del centro logístico es que podrá trabajar directamente con las mercancías procedentes del puerto de Algeciras, uno de los más importantes de Europa, además de con Sevilla, Huelva, Cádiz o Málaga. Todos ellos ya han mostrado su interés en operar en Córdoba.
El presidente de la Gerencia de Urbanismo también ha señalado que sería muy importante que ADIF diese vía libre a la posibilidad de que puedan operar en el ámbito logístico trenes de 750 metros, pues hasta ahora sólo pueden hacerlo los de 400 como máximo. Esa diferencia es fundamental para permitir convoyes de mercancías con mucha más capacidad. Este cambios lleva coleando legislativamente desde el año 2013.
