La Sociedad Española de Calidad Asistencial (SECA) celebra desde hoy en Córdoba su 34º congreso anual, que tiene lugar del 19 al 21 de octubre, coincidiendo con el de la Sociedad Andaluza de Calidad Asistencial, que lo hace en su 21ª edición. Alrededor de 800 congresistas asisten al encuentro que este año gira en torno a la gestión clínica, elemento central del debate sanitario que se va a abordar desde diferentes perspectivas y así poder comprobar el grado de avance de las iniciativas que se están desarrollando en estos momentos en nuestro país.
El congreso reúne a un grupo muy calificado –con proyección nacional e internacional en sus diferentes ámbitos de trabajo- y de gran nivel científico y personal para abordar las diferentes perspectivas de la gestión clínica. Al acto inaugural de esta tarde asistirán numerosas autoridades, entre ellas la delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Mª Ángeles Luna. Por su parte, el neurólogo del Hospital Ramón y Cajal, Ignacio Hernández Medrano, emprendedor en el campo de la inteligencia artificial, impartirá la conferencia inaugural orientada hacia la innovación y el impacto de las tecnologías en la práctica clínica.
La gestión clínica es una herramienta de gestión que en la actualidad de una u otra manera están abordando los diferentes servicios de salud de nuestro país. Implica la puesta en marcha de nuevos modelos de gobierno clínico y organización de los servicios en los que se impulsa la autonomía y el desarrollo profesional y establece nuevos modelos relacionales en la toma de decisiones clínicas compartidas.
Este modelo se presenta como una oportunidad para afrontar el desarrollo de los profesionales sanitarios con eficiencia y con elementos de sostenibilidad para el sistema sanitario que también busca ampliar la transparencia y participación de los ciudadanos. Además, se tratarán otros muchos aspectos de actualidad relacionados con la calidad de la asistencia que se ofrece al paciente, las experiencias autonómicas en el despliegue y medición de objetivos de calidad asistencial y los aspectos éticos en relación a la calidad asistencial y la seguridad del paciente, entre muchos otros.
En ambos congresos conviven cada año clínicos, gestores, salubristas, universitarios, representantes de los pacientes, etc., cuyas aportaciones permiten enriquecer el debate. En esta ocasión, el programa científico se centra en cinco aspectos claves que serán desarrollados por los distintos ponentes en sus intervenciones. A esto hay que sumar las mesas temáticas de debate simultáneas, desde las que se van a abordar estas cinco perspectivas de la gestión clínica desde una visión más práctica y a través de experiencias concretas que se desarrollan en los centros del Sistema Sanitario. Tampoco faltarán las comunicaciones orales y los posters electrónicos y habrá una selección de las mejores comunicaciones que optarán a premio en las diferentes modalidades que propone el congreso.
Así, se analizarán los modelos de gobernanza y las alternativas organizativas que se están planteando en estos momentos, cómo abordar el desarrollo de los profesionales y mejorar sus competencias y los mecanismos de evaluación tanto interna como externa que hoy se pueden utilizar en los servicios clínicos y su capacidad de medir resultados en salud. Otra de las cuestiones de interés será hasta qué punto las iniciativas de gestión clínica pueden influir sobre la sostenibilidad del sistema y, finalmente, qué ofrece la gestión clínica para mejorar la participación de los pacientes y la transparencia.
Otros asuntos como la seguridad clínica y de los pacientes, la acreditación y certificación de los centros y servicios sanitarios, la variabilidad clínica y la alfabetización en salud (dar conocimiento y herramientas a los ciudadanos para que sepan cuidar su salud y sepan comunicarse con los profesionales sanitarios) también se tratarán esta reunión científica.
Finalmente, la gestión clínica el modelo de gestión actual de los centros asistenciales, consolidado, que ha puesto a los clínicos en los puestos de gestión, que está demostrando que es el mejor para conseguir buenos resultados asistenciales y de calidad asistencial, permitiendo la sostenibilidad del sistema sanitario.
