La muerte de una mujer en Baena, supuestamente a manos de su pareja que se acabó suicidando también, ha provocado el rechazo generalizado de la sociedad cordobesa que ha mostrado su repulsa en diversos actos celebrados a lo largo de esta mañana. Así, en la puerta del Palacio de La Merced, sede de la Diputación de Córdoba, tuvo lugar al mediodía una concentración, en la que estuvieron presentes, los alcaldes de Baena, Jesús Rejano, y Lucena, Juan Pérez, ya que ambos fallecidos eran lucentinos, así como una nutrida representación de la Corporación municipal cordobesa, con la alcaldesa, Isabel Ambrosio, al frente, y también diputados provinciales. Igualmente, estaba convocada otra concentración de rechazo contra este crimen en la puerta de la Subdelegación del Gobierno.
Precisamente, en esa concentración, el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, ha desvelado que "la autopsia ha confirmado que nos encontramos ante un nuevo caso de violencia de género". Una situación que añade todavía más misterio al caso, ya que los familiares de la víctima, María Antonia, de 28 años, han insistido en que las relaciones de la pareja eran normales.
Durante el acto, la Plataforma Contra la Violencia de Género, leyó un escrito en el que calificó este nuevo asesinato como "un jarro de agua fría" que supone "una vergüenza nacional" y que demuestra que la sociedad actual "no es igualitaria" entre sexos. En varias ocasiones se hizo alusión a la mujer muerta, que engrosa la lista de fallecidas a manos de sus parejas a lo largo del presente año, y que suman y 51, las últimas cuatro en un intervalo de sólo 48 horas, para solidarizarse con su familia.
La Plataforma ha considerado que este tipo de casos traspasan los límites de lo íntimo y lo personal para convertirse en una vergüenza de proporciones nacionales, por lo que se ha solicitado a los partidos que apliquen todas las medidas que contempla la ley y que "el terrorismo machista se convierta en una cuestión de estado", a través de "un pacto entre todas las fuerzas políticas para erradicarlo", y ha incidido, además, en el hecho de que las víctimas son cada vez más jóvenes.
Reunión familiar en Lucena
Por su parte, Juan Pérez ha apuntado que realizó personalmente una visita a la familia de la fallecida quien le informó de que la mujer vivía en Lucena y "nadie sabía que hubiera una mala relación entre ambos". De hecho, la semana pasada tenían previsto acudir a un cumpleaños de un sobrino pequeño y al ver que no venían "marcharon a Baena y se encontraron con la tragedia". Según Pérez, ambos "parecían mantener una relación normal", por lo que "nadie en la familia se explica lo que ha ocurrido. El Ayuntamiento lucentino ha ofrecido a los familiares asesoramiento psicológico, la tiempo que ha informado de que el entierro tendrá lugar esta tarde, a las 17.00 horas, en la parroquia de Santiago.
Por su parte, Jesús Rojano ha abundado en el hecho de que "parecía una pareja normalizada" y que "no había indicios de malos tratos previos" por parte del hombre de 51 años con el que María Antonio compartía su vida. Tampoco había constancia de que en el Centro de Atención a la Mujer tuvieran información alguna al respecto ni se hubiera aportado "asesoramiento alguno para una posible separación", por lo que "se trata por ahora de meros rumores".
También, el presidente de la Diputación, Antonio Ruiz, ha calificado el hecho de "vergüenza social" que lleva "ya mucho tiempo ocurriendo en nuestro país". Por ese motivo ha reiterado el compromiso de su Administración para "trasladar todos los recursos posibles que eviten que esto vuelva a ocurrir". Una situación especialmente preocupante porque las víctimas de la violencia de género "sean tan jóvenes", ha insistido Ruiz.
Tal y como adelantó este periódico, una pareja de Lucena, que residía en una vivienda en el campo en la vecina localidad de Baena como guardeses de la misma, apareció muerta en el interior de la vivienda en la noche de del pasado sábado. Los fallecidos eran un hombre de 51 años de edad, F.P.G., y una mujer de 28 años, A.B.G., ambos naturales de Lucena. Todo apunta a que la joven habría encontrando la muerte en el interior del inmueble tras recibir un disparo de escopeta. Posteriormente, el presunto asesino se habría suicidado de un disparo en la boca.
