Sólo han faltado dos alumnos esta mañana de los 219 que estaban apuntados a las pruebas de PEvAU (antigua Selectividad) en la facultad de Ciencias del Trabajo, donde curiosamente reina un ambiente más bien sosegado, a pesar de que hoy mismo han comenzado los exámenes que abrirán (o cerrarán) la puerta a una vocación de años o bien creará extrañas combinaciones de futuros profesionales que jamás habrían optado por una carrera determinada y que puede acabar en idilio. ¿Quién sabe?
La coordinadora de las pruebas en este centro concreto y también correctora de Historia de España, María José Ramos, si algo ha querido destacar es la total, absoluta y tranquilizadora normalidad en las aulas, para lo que ha venido muy bien que el tiempo no sea precisamente estival. "La temperatura es buena y no hay problemas de linotipias ni de mareos como otros años".
Hoy por la mañana tocaba Lengua Castellana, Inglés, Francés y Alemán y a última hora Historia de España. Las consideradas comunes, en una jornada realmente maratoniana. Por lo pronto, "hay tranquilidad en las aulas, parece que no sale nadie en blanco y eso quiere decir que vienen preparados". Mañana, miércoles, empiezan ya las más específicas, que son las que quizá puedan generar algo más de nervios.
Y es que las notas condicionan luego las carreras que se van a elegir. "Estamos en un sistema competitivo y quizá por media décima o un cuarto de décima no pueden entrar en la carrera que les gusta, por lo tanto hay que ser muy escrupuloso para que no se filtre ningún tipo de pregunta ni haya ningún tipo de favoritismo porque evidentemente estamos en una universidad publica y eso hay que vigilarlo mucho", ha advertido la coordinadora.
Por cierto, que para los próximos dos días que quedan se da un consejo sabio para afrontar os exámenes mejor. "Que vengan desayunados que es muy importante y que acudan también tranquilos como hoy, porque hemos notado, después de una charla que hemos tenido con ellos, hay muy buen ambiente en las aulas".
Álvaro Carbonero quiere estudiar Matemáticas en la Universidad de Sevilla, donde el año pasado pedían para poder entrar un 9,6 y se quedó en un 8,8. "No reclamé entonces porque iba a entrar en Informática y estaba prácticamente dentro", señala. Álvaro ha asegurado que le preocupaba la Historia, pero no el resto de asignaturas y ha destacado que este año las preguntas cortas entran desde la Prehistoria hasta el siglo XIX en la opción A y hasta el siglo XX en la opción B.
Su compañero Álvaro Elvira Jurado quiere estudiar Física y la referencia con la que cuenta es que el año pasado hubiera requerido de un 6,7, "pero este año no lo sé". Por el momento, "el texto periodístico de lengua me ha parecido bastante sencillo, pero he estudiado poco Historia".
Gonzalo Cabello, procedente de El Tablero, va a intentar estudiar Biotecnologías que aquí, en Andalucia, tiene en torno a un 10 de nota. "En Bachillerato tengo un 8,3 y ahora tengo que sacar un 8 de media en Selectividad para poder entrar seguro". Lo tiene tan claro que no tiene nada de segunda opción y ya vería lo que elige dependiendo de las notas. Tampoco le hace ascos a irse a otro sitio a estudiar.
