Juzgado de Instrucción número 7

El Ayuntamiento prevé recuperar unos 427.880 euros estafados por una banda especializada

Las alarmas saltaron tras una conversación entre el jefe de obra de la Ronda Norte y Urbanismo sobre dos certificaciones de obra en vías de cobro de las que no se tenían razón
Fuentes
photo_camera Salvador Fuentes, esta mañana en la rueda de prensa ya presencial

El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Córdoba, Salvador Fuentes (PP), ha desvelado esta misma mañana un intento de robo al Ayuntamiento por más de 628.000 euros mediante un delito de estafa con falsificación mercantil; dinero que correspondía al pago en dos facturas de las certificaciones de obra de la Ronda Norte.

Y se ha quedado en intento, porque, gracias a la actuación de los servicios jurídicos municipales, a los técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), la diligencia de la Policía Nacional, el silencio de algún medio de comunicación y la actuación del Juzgado de Instrucción número 7 de Córdoba "se ha cogido a tiempo y vamos a poder recuperar la práctica totalidad de los 427.880,23 euros de la primera factura, la cinco, que sí se pudieron llevar", ha indicado Salvador Fuentes, quien ha asegurado que la otra factura, correspondiente a la numero seis, "la pudimos parar a tiempo".

La estafa se detectó tras el Pleno celebrado el pasado 14 de abril, a las 21.00 horas, ya que tras una conversación entre responsables de la Junta de Andalucía y de la Gerencia sobre el cobro de dos facturas que no aparecían por ninguna parte empezaba a oler mal, y daba la idea de que pudiera haber un presunto delito de estafa con falsificación de documento mercantil.

Acto seguido se estuvo toda la noche trabajando para salir al paso de lo detectado en una conversación entre el jefe de obra de la actuación que fue adjudicada a Viales Constructora Aragonesa SLU y responsables de la gerencia, que hicieron saltar las alarmas, ya que se hablaba de facturas que se había dado orden en Bankinter de que se cargaran a una cuenta nueva. Y al día siguiente, sobre las ocho de la mañana, Fuentes mantuvo reuniones con la Junta y con la GMU para preparar la demanda que al mediodía del día 14 presentó el propio edil en la Comisaría de Policía, que se pusieron de inmediato a investigar. "El mérito de toda esta operación la tienen los técnicos y funcionarios que supieron actuar con total diligencia", no para de repetir el concejal.

Eso vino acompañado de un absoluto silencio sobre la investigación, ya que se trata "de auténticos profesionales, especializados en delitos mercantiles que tienen totalmente controladas las redes sociales y que se les denomina policialmente", y se trataba de que no detectaran que estaban siendo ya investigados. Estas personas iniciaron la operación fraudulenta en febrero y tuvieron la suficiente paciencia para esperar a abril a cerrar la operación, para lo cual contaban con certificados falsificados e información privilegiada, lo que hace sospechar que en la empresa hay un posible topo.

Al mismo tiempo, desde Urbanismo se contactó el mismo viernes con el banco, que modificó la cuenta tras recibir hasta cinco correos electrónicos para que se modificara esa cuenta, así como con la empresa para informarles de esa fuga de dinero. Y gracias eso la segunda factura se detuvo a tiempo y no se ingresó en esa cuenta-agujero.

Ahora será el juez quiene deberá solicitar a la entidad la devolución de esa cantidad perdida, para lo cual el letrado mayor del Ayuntanmiwbnro ya ha iniciado le redacción para la solicitud formal. Ayer, jueves, fueron informados del suceso los sindicatos municipales, y hoy se les daría traslado también a los portavoces de los grupos municipales, ha apuntado Fuentes.