JUNTA DE GOBIERNO LOCAL

El Plan de Acción Contra el Ruido limitará a 40 la velocidad en la Avenida de Gran Vía Parque

El presupuesto calculado para esta tercera fase del plan es de entre 140.000 y los 200.000 euros
Estacionamientos en la Avenida Gran Vía Parque de Ciudad Jardín
photo_camera Estacionamientos en la Avenida Gran Vía Parque de Ciudad Jardín

La Junta de Gobierno Local (JGL) ha aprobado esta mañana de forma inicial el Plan de Acción Contra el Ruido en la capital cordobesa, que ahora pasará un mes de trámite en información pública para la presentación de alegaciones, y que, además, precisa de un informe de la Consejería de Medio Ambiente vinculante por contener información jurídica.

Se trata de "una herramienta básica de planificación para el control y mejora de los niveles de contaminación acústica identificados en el mapa estratégico del ruido llamado (MER), según ha indicado la primer teniente de alcalde, Isabel Albás (Cs), quien ha adelantado que el mayor problema de ruido en la ciudad es el tráfico rodado y diario, por lo que "este análisis vendrá a erradicar o rebajar ese tráfico viario fomentando más el uso del autobús y otros elementos de movilidad sostenible".

Según Albás, este plan, con un presupuesto calculado inicialmente entre los 140.000 y los 200.000 euros, tiene objetivos a corto plazo, que se irán aplicando durante los dos primeros años, y también más a largo plazo para los cinco años siguientes, "con medidas correctoras, preventivas y de control".

El Área municipal de Medio Ambiente es la que coordina este plan, si bien cuenta con la participación de Inclusión y Accesibilidad.

Las zonas más afectadas por el ruido en la capital cordobesa
Las zonas más afectadas por el ruido en la capital cordobesa

Así, el plan identifica el tráfico diario con fuente fundamental de ruido a nivel de mapa estratégico de ruido. Entre las vías principales de distribución del flujo mecanizado se encuentran Avenida del Corregidor, Avenida Conde Vallellano, Avenida República Argentina, Paseo de la Victoria, Avenida del Aeropuerto, Avenida Arroyo del Moro, Avenida de la Libertad, Avenida del Brillante, Avenida Al-Nasir, Avenida Ollerías, Avenida de Agrupación Córdoba, Avenida Barcelona. A nivel de flujo medio están Avenida del Cairo, Avenida Virgen de la Mar, calle San Francisco Solano y como distribuidores de barrio aparecen la calle Nuestra Señora de la Merced, Avenida Carlos III, calle Isla Malante, Ronda A-3050 y calle Algeciras.

Otra fuentes de ruido son el tráfico ferroviario y los diferentes polígonos (11) identificados más el Parque Joyero. De este modo, hay 24 candidatos a puntos de conflicto de carácter residencial, con lo que considera el 25% de la población total expuesta por encima de los objetivos de calidad acústica en el periodo día, el 28% en el periodo tarde y 10% en el periodo noche.

Igualmente, hay 14 centros docentes en la misma situación, que aúnan un 37,6% del total de alumnos expuestos a niveles superiores a los marcados por los Objetivos de Calidad Acústica: Conservatorio Profesional de Música, la Facultad de Medicina, El Tablero, Maimónides, Instituto Provincial de Educación Permanente, Gran Capitán, Salesianos, Blas Infante, Cervantes, Séneca, Faculta de Ciencias del Trabajo, Alhaken II, López Neyra y La Salle. Como centros hospitalarios afectados están el Reina Sofía y la Cruz Roja.

Planteamientos del plan

Lo que plantea el plan como fórmulas para reducir el ruido es la implantación de carril-bici y de carril-bus; la instalación de pantallas acústicas y pavimento fonoabsorbente; la modificación del viario, ya sea con modificación de los sentidos de circulación o sección de la vía; el control del tráfico mediante la optimización de la regulación semafórica, ondas verdes o ciclos cortos, y calmado de tráfico, a base de pasos sobre-elevados, reducción de la velocidad de circulación o el establecimiento de zonas 30.

Igualmente, se plantean medidas disuasorias tales como la promoción del transporte ecológico, carriles-bici e infraestructuras nuevas para favorecer a los peatones, incluso asociándolas a parkings y líneas de transporte público (bici+tren); la creación de carriles especiales para taxis, autobuses o vehículos particulares con más de un pasajero; la extensión del sistema del transporte público y ampliación de horarios de funcionamiento, la asociación de estas nuevas líneas de transporte a parkings o la disposición de las instalaciones de intercambiadores (tren+bus) con amplios parkings; el uso de conceptos y técnicas de gestión de estacionamientos (parkings); la reubicación y rediseño de viales en función de puntos negros (acústicos) de tráfico; la creación de restricciones (físicas) de tráfico en el centro de las urbes, de modo que las zonas peatonales pueden diseñarse para un acceso controlado de vehículos de residentes, taxis, carga y descarga, y con un control de horarios de tráfico sobre las zonas sensibles; la utilización de sistemas de control y coordinación del tráfico que permita la estabilización del flujo de tráfico (fluidez de la circulación), por ejemplo, minimizando el impacto de semáforos o cruces, y en el ruido provocado por las sucesivas aceleraciones y frenadas, la también las redefinición de las vías de circulación principales del tráfico rodado (diseño de circunvalaciones, by-pass, uso de calles y carreteras que atraviesen zonas menos sensibles acústicamente).

Al mismo tiempo se propone crear barreras, trincheras y caballones (terraplenes); barreras especiales que se integran en el paisaje, como es el caso de plantar vegetación en los caballones y barreras de material de construcción o barreras transparentes en ciudades; uso de túneles y de canales, o el cierre de los espacios entre edificios cercanos.

Actuaciones concretas

Algunas de las actuaciones concretas es limitar la velocidad a 40 kilómetros por hora en la Avenida Gran Vía Parque; instalar un carril-bus en la Avenida de los Piconeros, en el carril derecho, entre el Conservatorio y la calle Alonso el Sabio; implantar un radar pedagógico para reducir la velocidad en Avenida Campo Madre de Dios, donde se estudia también ubicar un carril-bus; la optimización de la regulación semafórica existente, aplicando ciclos cortos y una onda verde a baja velocidad de forma que se modere la velocidad en Avenida de las Ollerías y Avenida de Almogávares, donde también se instalará un carril-bus, además de repintar marcas viales.

En la Avenida Menéndez Pidal se instalará un reductor tipo 'lomo de asno' y se limitará la velocidad en su entorno a 30 kilómetros por horas; en la Avenida de la Arruzafilla también se limitará a 30 en el entorno del centro; en Compositor Serrano Lucena ocurrirá otro tanto; en la Avenida de Nuestra Señora de Fuensanta y en la calle Hermanos Pinzones la limitación del entorno será a 30; en Manuel Fuentes 'Bocanegra' se limitará a 30 en el entorno del centro en Avenida Guerrita y Avenida del Aeropuerto; en Isla Malante se aplicará limitación de velocidad en el entorno del centro a 30 en aquellas calles que aún no están limitadas; y, finalmente, en San Alberto Magno y Avenida Menéndez Pidal se limitará la velocidad a 30 en el área próxima al Hospital.

Otro sí será priorizar el uso de pavimentos fonoabsorbentes en las nuevas obras que se ejecuten en toda la ciudad.

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