SEGÚN LA AUGC

El primer trimestre registra más ataques a guardias civiles que en todo el pasado año

La provincia duplica en agresiones a provincias con mucha más población, como Sevilla o Málaga, donde hay también una plantilla mucho mayor de agentes actuantes

coche guardia civil1
photo_camera Efecto de una agresión a personal y vehículo de la Guardia Civil en Puente Genil


La Agrupación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) lleva mucho tiempo avisando del preocupante incremento en el número de agresiones a agentes de la Benemérita que se están produciendo en la provincia de Córdoba, y ahora es el propio Gobierno quien lo confirma, en una respuesta parlamentaria al diputado socialista Antonio Hurtado, quien ha pedido datos de los últimos cinco años.

La AUGC sabía que la situación había empeorado considerablemente en los últimos meses, pero los datos ofrecidos por el Gobierno superan las peores estimaciones y ponen de manifiesto una situación gravísima y muy preocupante, porque en el primer trimestre de 2017 se han producido 45 agresiones a guardias civiles en la provincia de Córdoba, superando en tan sólo tres meses las registradas durante todo el 2016, cuando fueron 33 las agresiones.

Así, esta provincia ocupa el segundo lugar en Andalucía de ese negro ranking, superada sólo por Huelva, que ha registrado 56 episodios en el primer trimestre del año. Resulta muy revelador que Córdoba haya duplicado en agresiones a otras provincias con mucha más población, por ejemplo Sevilla (23 agresiones) o Málaga (20). Sobre todo si se contrasta esa situación con los últimos datos sobre plantilla disponible facilitados por el Gobierno: 1.165 en Córdoba, 2.705 en Sevilla, 2.011 en Málaga.

Pero es que además a nivel nacional sólo tres provincias superan a la de Córdoba –Huelva, Ciudad Real y Alicante–, encontrándose esta provincia muy por encima de otras tan relevantes en población y plantilla como son las de Madrid y Valencia.

Y el dato preocupa aún más si se observa la evolución que han experimentado esas agresiones durante los últimos años en la provincia de Córdoba: 31 en 2012, 44 en 2013, 35 en 2014, 21 en 2015, 33 en 2016. Una evolución más o menos estable sin grandes altibajos, que ahora experimenta un crecimiento brutal en tan solo tres meses. De hecho durante el periodo de 2012 a 2016 Córdoba fue la segunda provincia andaluza con menos agresiones (164), tras Jaén, por lo que resulta aún más preocupante el exagerado incremento registrado en el primer trimestre de 2017.

Puente Genil, donde más agresiones se registran

Dentro de la provincia, la localidad que presenta un mayor número de agresiones a guardias civiles desde hace mucho tiempo es Puente Genil, habiéndose producido un considerable incremento durante lo que va de 2017, como ya ha ido informando AUGC: el 21 de febrero un individuo agredió a dos agentes que acudieron para impedir que insultara, amenazara y agrediera a su propia madre; el 9 de marzo cuatro agentes resultaron heridos por la agresión de un numeroso grupo de personas que intervinieron para evitar la detención de un requisitoriado; el 30 de mayo dos guardias civiles fueron agredidos por un individuo que se encontraba robando en una vivienda; el 3 de junio un agente sufrió lesiones al reducir y detener a un individuo que le amenazaba y esgrimía una navaja; y hace tan solo unos días, el 3 de julio otros tres agentes del mismo Puesto han sido agredidos por dos personas a las que intentaban identificar por encontrarse consumiendo drogas en la vía pública.

Pero no es Puente Genil la única población que padece esta lacra, aunque sí la que registra muchos más casos, también se producen agresiones en Bujalance, Rute, Córdoba, Posadas o Baena. En todos esos casos y en muchos más los servicios jurídicos de AUGC han asistido y representado a los guardias civiles agredidos, consiguiendo penas contundentes para la mayoría de los agresores, como ocurrió por ejemplo con los nueve vecinos de Puente Genil que agredieron a cuatro agentes el 9 de marzo, los cuales fueron condenados a más de 37 años de prisión. En la sentencias también se fijan numerosas indemnizaciones para los guardias civiles lesionados, pero el problema es que en la mayoría de los casos no se pagan dichas indemnizaciones porque los agresores se declaran insolventes.

Para intentar paliar esta grave situación AUGC viene reclamando desde hace años el incremento de la insuficiente plantilla de la Guardia Civil en la provincia de Córdoba, así como la dotación de los medios necesarios y sobre todo el endurecimiento de las penas para este tipo de hechos.