Plataforma Cordobesa contra la Violencia a la Mujeres

La mujer de Posadas que denunció al marido por no dejarle ver a sus tres hijos pide que intervenga la justicia

La mujer denunció en su separación a su marido por "violencia psicológica y, desde entonces, el hombre ha incumplido las visitas acordadas a sus tres hijos --de tres, dos y un año-- reteniéndolos y no entregándolos" a la madre pese a la orden dictada por el juez

Sara violencia de género
photo_camera Sara en una imagen de archivo de este verano

La mujer de Posadas (Córdoba) que denunció en agosto al que entonces fuera su marido por no dejarle ver a sus tres hijos durante 17 días ha pedido este martes, junto a la Plataforma Cordobesa contra la Violencia a la Mujeres, que la justicia y las administraciones intervengan en su caso porque, "después de un régimen de visitas establecido por un juez, lo viene incumpliendo sistemáticamente reteniendo a los niños cada vez que los tiene con él".

En una rueda de prensa, la mujer y el colectivo han explicado que denunció en su separación a su marido por "violencia psicológica y, desde entonces, el hombre ha incumplido las visitas acordadas a sus tres hijos --de tres, dos y un año-- reteniéndolos y no entregándolos" a la madre pese a la orden dictada por el juez. En total, desde el verano hasta ahora, ha interpuesto un total de 22 denuncias contra su exmarido, 20 son por incumplimiento del régimen de visitas y otras dos por impedirle el acceso a la vivienda familiar para recoger sus pertenencias y las de sus hijos.

"Todas las instituciones, policía y cargos públicos dicen que hay que denunciar cuando hay un caso de violencia. Una vez que te armas de valor y das el primer paso de denunciarlo, ¿quién da el segundo paso?", se ha preguntado la joven, Sara, quien ha lamentado que "ningún juzgado se hace cargo de la situación de indefensión" de sus hijos, dado que su exmarido sigue "reteniendo a los niños cada vez que quiere", según ha confesado.

"Incumple el acuerdo de un juez y aquí no pasa nada", ha criticado la portavoz de la plataforma, Dulcenombre Rodríguez, quien ha expresado el apoyo del colectivo a Sara y ha pedido que "la justicia y las administraciones velen por el bien de los menores".

"Jamás he impedido que vea a sus hijos, aún sabiendo que los utiliza para hacerme daño y que cada vez que se los lleva no los va a devolver", ha denunciado Sara sobre la "tortura" que dice estar viviendo en estos meses.

Además, ha señalado cómo el hombre "incumple también la orden del juez de no mantener comunicación directa con ella al haberlo denunciado por violencia psicológica", pero, sin embargo, recibe "llamadas de madrugada, 'WhatsApp' a mí y mi familia, mensajes cuando tiene prohibido hacerlo", ha relatado.

"Macho alfa"

Al respecto, la mujer ha recordado que en esta situación "se cumple punto por punto", lo que su exmarido escribió, al poco de casarse y aún sin hijos, en un documento que tituló "contrato de permanencia" y donde se autodenominaba "macho alfa". En él decía que, si se separaban y tenían niños, estos "se quedarían con el macho alfa" y que si Sara le denunciaba "no pasaría nada".

"Y nada está pasando ante las 22 denuncias", ha suplicado Sara, quien ha exigido que "deje de utilizar" a sus hijos y "deje de castigar", al tiempo que ha solicitado "que se atienda el interés de tres niños, de tres menores" por parte de la justicia.

Además de esto, la mujer ha explicado cómo el padre de sus hijos los ha escolarizado en dos centros privados --uno en Montilla y otro en Córdoba capital--, pese a que "los niños están matriculados en los centros públicos que les corresponden en Posadas", domicilio de la madre que tiene su custodia provisional. Sobre ello ha interpuesto una denuncia en la Delegación de Educación de la Junta de Andalucía, ante la que aún tampoco ha recibido respuesta.

Fin de la relación

Cabe recordar que fue en agosto cuando la joven de Posadas denunció a su aún marido por no dejarle ver a sus tres hijos. Previamente, había interpuesto otra denuncia por violencia psicológica, razón que motivó el fin de la relación entre ambos que hasta entonces vivían en Montilla.

Recién separados, pero sin un régimen de visitas establecido por acuerdo, "el padre de los niños se los había llevado para pasar un día con ellos y estuvo 17 días sin dejar que la madre los viera". Tras denunciarlo, un juez dio la custodia provisional de los niños a la madre y estableció un acuerdo cautelar de visitas del padre a sus hijos, hasta que se celebren los juicios pendientes.