La mayoría de las personas cree que la posibilidad de acceder a cursar un grado universitario depende totalmente de haber aprobado anteriormente la selectividad (o EBAU como se le llama ahora).
Sin embargo, esto no es así. A pesar de que hoy en día la mayor parte de los alumnos pasan por el habitual proceso de preparar selectividad, hacer los exámenes y calcular la nota media para elegir el grado al que se quiere hacer, existen otras muchas opciones para realizar estudios universitarios mediante otros procedimientos de acceso.
Superar un ciclo formativo de grado superior
Quizás la forma más conocida de acceder a la universidad sin tener que pasar la prueba de selectividad sea la de tener una titilación de Técnico Superior de Formación profesional por haber terminado con éxito Grado Superior de FP. Este título, junto con la nota media obtenida en el ciclo, da acceso directo para cursar un grado universitario.
Universidad para mayores de 25 años
Existe una prueba específica para las personas con más de 25 años que no tengan aprobada la selectividad ni posean un título de Técnico Superior. Se denomina comúnmente prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años.
Esta prueba consta de dos partes, una general donde se desarrolla un tema de actualidad a través de un comentario de texto junto con una prueba de castellano y otra de lengua extranjera a elegir entre inglés, francés, portugués o italiano. La segunda parte es la prueba específica, que se compone de otras cinco pruebas que dependerán del grado al que se quiera acceder.
Universidad para mayores de 40 años
Se trata de una posibilidad que se abre a las personas de 40 años o más y que tengan una experiencia profesional acreditable que esté relacionada con el grado que se quiera estudiar.
Los criterios para la selección de estos alumnos los pone cada universidad, aunque suele estar condicionados a la experiencia laboral acreditada y a la superación de una entrevista personal.
Universidad para mayores de 45 años
Igual que sucede con los mayores de 25 años, existe una prueba de acceso específica para las personas que tengan más de 45 años y que no tengan ninguna experiencia profesional relacionada con el grado que deseen cursar.
Esta también se compone de dos partes: una primer similar a la de la prueba para 25 años, pero para la segunda se sustituyen los exámenes específicos por una entrevista personal para evaluar la madurez y la capacidad de los candidatos para cursar el grado elegido.
Estudiantes extranjeros con estudios equivalentes al bachillerado
Las personas extranjeras que quieran estudiar una carrera universitaria en España pueden hacerlo siempre que tengan aprobados los estudios propios de su país de origen que se correspondan al bachillerato español.
Aunque las condiciones de acceso varían según el país, lo más común es realizar lo que se conoce como selectividad Uned para extranjeros o pruebas de competencias específicas (PCE), especialmente para estudiantes de países miembros de la UE o de aquellos países con los que España tiene un acuerdo formativo.
Universidades privadas
La última opción para conseguir cursar un grado sin previo paso por la selectividad es optar por estudiar en una universidad privada. En muchos casos, estas universidades poseen titulaciones propias para las que los criterios de admisión pueden ser distintos, aunque estén homologados oficialmente.
En estos casos bastaría con poseer el título de bachillerato y abonar la correspondiente matrícula universitaria, que suele ser mucho más elevada que para los estudios comunes, aunque también es posible obtener becas de excelencia que reduzcan estos costes.
