"Haré una oposición contundente y dialogante", ha asegurado el hasta ahora alcaldable del PSOE en la capital, Antonio Hurtado, tras los resultados de las pasadas municipales para disipar cualquier duda de que se va a quedar en Córdoba ejerciendo como líder de la oposición. "Que a nadie le quepa la menor duda", ha asegurado.
Hurtado ha asegurado sentirse "muy orgulloso" del resultado obtenido en una campaña donde ha primado la política nacional sobre la municipal y después de que retara al alcalde del PP, José María Bellido, un par de veces para un debate cara a cara sobre la ciudad sin obtener respuesta. "Lo daba por hecho", ha indicado, teniendo en cuenta que los populares han aplicado el mismo mensaje en todos los rincones del país: "Hay que echar a Pedro Sánchez".
Ese mensaje ha conseguido sus frutos, porque el PP gana con 69.600 votos, es decir 23.000 más que las pasadas elecciones, "de los que 22.000 votos eran de Ciudadanos", y obteniendo con ello 15 concejales. Por su parte, el PSOE se ha quedado con casi 33.000 votos, es decir 6.800 votos menos, y siete concejales.
Hurtado ha comparado la actual campaña del PP con la que llevó a cabo en 2011, cuando su mensaje de entonces fue "Hay que echar a Zapatero". Es decir, "de nuevo traer al ámbito local la política nacional y sin debates sobre cuestiones locales", lo que volvió a servir para los intereses populares: Venció el PP, con casi 80.000 votos, lo que entonces fueron 15.500 más que en 2007, aunque son muchos menos que ahora (unos 9.800 menos), lo que les facilitó 16 ediles.
Tanto caló el mensaje contra el presidente del Gobierno de entonces, que en esa ocasión UCOR, el partido del condenado por la justicia Rafael Gómez, obtuvo casi 25.000 votos y cinco concejales, convirtiéndose, así en la segunda fuerza más votada.
Sin embargo, Hurtado ha recordado que "el éxito del PP duró poco, cuando se comprobó la política de recortes de Mariano Rajoy". Eso acabó traduciéndose en los resultados de las municipales de 2015: El PP recortó en Córdoba 28.717 votos, se quedó con 11 concejales y perdió el Ayuntamiento, gracias, de nuevo a los efectos de la política nacional.
Por su parte, el PSOE sumó 30.334 votos, es decir 10.790 más que cuatro años antes, lo que le proporcionó siete concejales. De este modo, Isabel Ambrosio, con unos 2.000 votos menos que ahora, y cogobernando con los cuatro ediles de IU y con el apoyo de los cuatro concejales de Ganemos, llega a ser alcaldesa.
La lectura, según Hurtado, no puede ser de fracaso, porque "con el viento político en contra, hoy hemos mejorado nuestros resultados de 2015, manteniendo nuestros siete ediles". En este caso, los cuatro de Hacemos Córdoba no daban para formar un gobierno del espectro de la izquierda.
