Diversas protectoras de animales cordobesas han lamentado el proceso por el que la Empresa Municipal de Saneamientos, Sadeco, ha dado en adopción a un mulo castrado de siete años, para lo que únicamente se pide presentar el documento nacional de indentidad y, en caso de que hubiera varios interesados, se sortearía.
El animal, según parece en la página de Facebook de Sadeco, se llama Lyo y en la misma notificación se indica que "la persona interesada debe acudir al centro con su DNI y código de explotación", además de que "en caso de haber varias personas interesadas se realizará un sorteo".
El animal estaba disponible para su adopción desde el pasado 24 de marzo, a las 10.00 horas.
Por esta razón, las protectoras de animales Apama Lucena Córdoba, Dejan Huella, Galgos 112, Gatitud Asociación Protectora de los Gatos, Guau Guau Adopta, Mascotas Córdoba, SOS Perrera Córdoba, Unión de huellas; la Federación de Asociaciones Protectoras de Animales de Córdoba (Fapac); Asociación de Juristas de Córdoba por la Defensa Animal y el Medio Ambiente (Damac Juristas); y los colectivos antiespecistas Colectivo Andaluz Contra el Maltrato Animal de Córdoba (Cacma) y Empatiza Córdoba, han indicado en un comunicado público que rechazan el procedimiento de adopción del mulo Lyo en el SBA Sadeco Córdoba.
Estas protectoras piden que el centro solicite información de los perfiles de los posibles adoptantes al principio del proceso, para localizar a aquellas personas que puedan aceptar una responsabilidad tanto económica como de tiempo. Y que al final se realice un seguimiento de los animales adoptados.
Señalan también que es el proceso rudimentario que realizan las protectoras de animales de la ciudad, para evitar que los animales caigan en malas manos y vuelvan a ser abandonados, explotados o maltratados (con la finalidad de que Córdoba sea una ciudad más amigable con los animales y que la responsabilidad de los cuidados de un ser dependiente de los seres humanos) sea tomada con prevención.
"Los animales deben ser dados en adopción con precaución y no banalizar sus vidas mediante la celebración de sorteos", abundan. Destaca Juan Antonio Cobos Obrero, como representante de Empatiza Córdoba, que "la vida de un animal que tiene intereses por vivir, debe ser considerada y no tratada como un premio".
