ECONOMÍA

Cajasur ganó 6 millones en tres meses

La entidad financiera cordobesa incrementó sus beneficios netos en un 68% con respecto al primer trimestre de 2016

Sede
photo_camera Sede principal de Cajasur en Córdoba.

Cajasur ha obtenido un beneficio neto de 6 millones de euros durante el primer trimestre de 2017, un 63,8% más que el mismo periodo del año pasado, según informa la entidad en un comunicado de prensa. El resultado global del Grupo Kutxabank -propietario de Cajasur- durante los tres primeros meses del año se ha situado en los 90,2 millones, un 20,1% más respecto a 2016, en línea con los objetivos de crecimiento marcados por la entidad para el año en curso.

En el primer trimestre de 2017, la entidad con sede en Córdoba ha formalizado 142 millones de euros en nuevos préstamos hipotecarios y 93 millones de euros en préstamos personales, un crecimiento en el volumen formalizado del 38% con respecto al primer trimestre de 2016. Esta decidida apuesta de Cajasur por facilitar el crédito a particulares se ha complementado con un "espectacular" -así lo califica el banco- crecimiento del 44% en la financiación concedida a empresas, con más de 89 millones de euros en nuevas operaciones de financiación de activo circulante.

Los recursos de clientes avanzan también por encima de las previsiones, tanto por el buen ritmo en la captación como por la evolución de las valoraciones de los productos fuera de balance. Así, Cajasur continúa un año más en tasas de crecimiento interanual en torno al 4%, con más de 67 millones de euros contratados en productos fuera de balance (planes de pensiones y fondos de inversión, el 90% a través del producto estrella: las carteras de fondos de gestión delegada).

Tanto en Cajasur como en todo el grupo matriz, "la evolución del negocio con clientes ha sido uno de los factores fundamentales en la mejora del resultado, que se ha producido de nuevo en un entorno de tipos de interés persistentemente adversos", asegura la entidad.

Este factor penalizador se ha visto compensado en cierta medida por el mayor ritmo en la contratación de productos de financiación por parte de las empresas, el crecimiento sostenido del nuevo crédito destinado a particulares y familias –tanto en préstamos hipotecarios como en consumo–, los ingresos derivados del negocio asegurador, y un ritmo creciente en la captación y la valoración de los recursos de clientes, en especial de los productos fuera de balance, citados anteriormente, que han mejorado notablemente la aportación de ingresos.