El concejal de Inclusión y Accesibilidad, Bernardo Jordano (PP), aprovechando el Día Mundial de las Personas con Discapacidad, ha presentado un balance anual de su área y ha señalado que, aunque siempre es memorable, al menos lo ejecutado es como para "estar muy contentos", con un trabajo "bastante intenso, a pesar de la pandemia", que se ha demostrado que "no es un simple brindis al sol", sino que, como señaló el alcalde, José María Bellido (PP), en el inicio del mandato "esto se convierte en un eje estratégico de ciudad por el que seguimos apostando".
Así, bajo el paraguas de 'Córdoba Incluye' se han puesto en marcha una serie de iniciativas que mejoran sustancialmente el día a día de las personas con algún tipo de discapacidad y que, además, según el parecer de estos colectivos beneficiados, "han sido muy bien acogidas". Así, por ejemplo, en materia de formación de personal, se han dado cursos sobre cómo tratar a las personas con discapacidad que a los empleados públicos "les quita el miedo y les aclara muchos conceptos que les ayuda en su trabajo". Empezó como prueba en Aucorsa y ahora se ha llevado a los planes de formación del Ayuntamiento.
El concejal ha destacado, igualmente, en materia de accesibilidad universal la aplicación de la lectura fácil en todos los documentos que necesito el usuario para entenderse con la Administración y que no sólo sirven par personas con discapacidad cognitiva, sino también para gente en edad avanzada o con perfiles bajos de estudios. Otro sí son los pictogramas que se pueden ver en los pasos de cebra y en los autobuses públicos, de la mano de Autismo Córdoba.
Para las personas sordas se ha puesto en marcha un boletín de noticias locales en lengua de signos "que funciona bastante bien en redes sociales", además de potenciarse el servicio de intérpretes en el Ayuntamiento y adaptar abundante información en servicios municipales como el hecho de que todos los animales del Zoo estén en lengua de signos.
También se han puesto en marcha iniciativas para las personas con discapacidad visual. El ejemplo más palpable son las tablillas con las principales obras en relieve del Museo Julio Romero de Torres, así como mapas del Casco Histórico o planos de situación de instalaciones. "Eso vamos a ampliarlo mucho más, porque es muy efectivo y nos lo agradecen mucho", ha señalado Jordano.
Igualmente, el edil ha recordado los códigos Navilens puestos en la red de Aucorsa en 20 de sus paradas que llevan al Hospital Reina Sofía, a petición del colectivo, y que aportan una valiosa información a través del móvil, incluso para los turistas, puesto que está traducido a 34 idiomas".
Hay, igualmente, un Observatorio de Accesibilidad para detectar, diagnosticar y hacerle seguimiento a las necesidades de los colectivos de cara a un proyecto de mejora de accesibilidad urbana, que el edil ha traducido como "una forma de trabajar, más que algo tangible". La información llega por numerosos canales, se identifica a quien tiene que hacerse cargo de esas cuestiones y se actúa. "Hablamos de un mapa amplísimo de más de mil actuaciones, que ya estamos rebajando muchísimo, pero se incrementa con nuevas peticiones y se atienden todas".
Las plazas de movilidad reducida son fácilmente identificables en azul, mientras que en cultura inclusiva y accesible ayer mismo se presentó el bucle magnético para el espectáculo de luz y sonido de la calle Cruz Conde, algo que, según ha señalado ya la empresa encargada del montaje, "van a aplicar a todos sus proyectos, porque es una solución barata y llega a un colectivo olvidado para esas actuaciones", al tiempo que hay teatro incluso en el Gran Teatro y en cualquier actividad que sale de Cultura o de Promoción, como FLORA o Los Patios, "ya van con el componente de accesibilidad".
Este año se ha puesto en marcha también el sello 'Córdoba Incluye', para que los agentes que no son Ayuntamiento se sumen en esa línea. Es el caso de un callejero a modo de guía de los museos al que "se están adhiriendo un montón de establecimientos para que la ruta sea perfecta y lo más accesible posible".
Para todo ello el concejal se ha gastado los casi 700.000 que tenía de presupuesto, más otra cantidad solicitada después de los remanentes, hasta práctivamente un millón de euros. "A mí si me dan más me lo gasto y sé dónde gastarlo y eso lo sabe el alcalde ya", ha indicado el edil.
