Unas 3.500 personas se han sumado a la manifestación del Primero de Mayo en Córdoba, en el que ha constituido el acto central de los sindicatos CCOO y UGT en Andalucía y que este año ha llevado por lema “Contra la pobreza salarial y social. Trabajo y derechos”.
La derogación de la reforma laboral y la petición del voto para la izquierda en las próximas elecciones generales han sido los principales mensajes de los sindicatos que han vuelto a reclamar un giro en las políticas económicas y sociales.
“La situación de paro es insostenible. Nuestros gobernantes siguen haciendo propaganda de lo bien que le va al país y lo bien que nos va a ir las personas pero la realidad es que un tercio de las personas que tienen empleo no alcanzan el SMI, el 52% de las personas paradas en Andalucía no cobran nada, el 35% de la población andaluza está en riesgo de pobreza. Esto no puede continuar así”, dijo el secretario General de CCOO de Andalucía, Francisco Carbonero.
“Hoy lo que estamos demandando es empleo de calidad porque sin empleo de calidad no hay recuperación”, señaló su homóloga de UGT, Carmen Castilla, quien pidió que”se recupere la fuerza de la negociación colectiva que después de la reforma laboral del PP tuvo un ataque directo en su línea de flotación”.
Carbonero considera que “los partidos políticos han fracasado” y no han sido capaces de asumir el encargo que la ciudadanía les hizo el 20 de diciembre, que es que “este país requiere un cambio social donde se elimine esta política de ruina y de pobreza social que tanto sufrimiento está generando a tanta gente”.
Por eso, “esperemos que en las próximas elecciones tengan en cuenta que la solución de los problemas es el consenso y el diálogo” aunque reconoció que viendo que no dan respuesta a las necesidades que tiene el país es “muy probable” que trabajadores y la izquierda “vayan a la abstención”, dijo el líder de CCOO que, en todo caso, pidió a los trabajadores y trabajadoras que voten las opciones de izquierdas porque “no puede permanecer más la derecha y las políticas neoliberales gobernando este país”.
Castilla también animó a votar a “aquellas fuerzas que lleven en sus programas las derogaciones de las reformas laborales y de toda aquella legislación cercenadora de derechos ciudadanos”. En este sentido, apuntó que espera que de las próximas elecciones, que considera un fracaso de la clase política, derogue las reformas laborales que “tanto daño han hecho a las clases trabajadoras” porque si no, “volveremos a vernos en las calles”.
En este sentido, Carbonero afirmó que “aunque los políticos a veces desprestigian la política, sabemos bien que las soluciones vienen de la política. Por eso exigimos al Gobierno andaluz que tenga más coraje para defender un plan de emergencia social frente al Gobierno de España” y “una inversión que genere y regenere la industria andaluza” y al Gobierno de la nación le reclamó que “hay que tener en nuestro país una política fiscal capaz de recaudar y de mantener las políticas públicas”.
Por otro lado, los sindicatos pusieron el acento en la situación de los refugiados, sobre la que Carbonero remarcó que es hora de decir a Europa que tiene que cambiar sus políticas de migración porque es “vergonzoso” e “indigno” que una de las zonas del planeta donde más bienestar hay “se desprecie a la gente que huye de la masacre, de la guerra y de la muerte”.
La líder de la UGT de Andalucía coincidió con su homólogo al afirmar que hoy es también “un día de atención para que Europa reaccione a la crisis de los refugiados, también nos vamos a acordar de esas miles de personas que están durmiendo en el barro y mientras tanto Europa mira hacia otro lado”.
No fueron estas las únicas reivindicaciones de los sindicatos este Primero de Mayo. La derogación de la Ley Mordaza, la recuperación de la negociación colectiva y la defensa de lo público, fueron otras de las cuestiones en las que pusieron el acento los responsables sindicales.
