El central del Córdoba CF Dragi Gudelj, que ayer se desplomó en pleno encuentro ante el Rácing de Ferrol y al que se tuvo que aplicar descargas eléctricas para evitar la muerte súbita, ha pasado buena noche y "en breve pasará a planta", paso previo para darle la libertad para volver a su casa.
El club ha agradecido a través de las redes sociales la "rápida actuación de nuestros servicios médicos (los doctores José Miguel Bretones, Antonio Escribano y Martín Luna), nuestros fisios Álex Rueda y Fran Plaza, las asistencias de Los Ángeles de la Noche, así como la doctora Verónica Arroyo y el cardiólogo José María Segura. Gracias por salvar a nuestro Dragi".
Igualmente ha dado las gracias por su "compresión y disponibilidad de todo el staff del Racing de Ferrol" ante la situación.
El partido se tuvo que suspender cuando en el marcador había un empate a uno con goles del visitante Fran Manzanara (en el minuto siete) y del local Willy (en el minuto 9). El suceso ocurrió en el minuto 10 y 45 segundos del partido (las 20.43 horas), según el acta arbitral, firmada por Miguel Sesma Espinosa.
Acta arbitral
Ahí se indica que "el partido fue detenido por el desvanecimiento repentino del jugador número 8 del Córdoba, D. Dragisa Gudelj" y "tras solicitar la entrada de las asistencias médicas, el jugador tuvo que ser reanimado con maniobras de RCP y desfibrilador, ya que habñia sufrido una parada cardiorrespiratoria".
Añade que "durante la atención ingresaron en el terreno de juego varios sanitarios presentes y la ambulancia. A los seis minutos el jugador recuperó el conocimiento y fue trasladado en ambulancia debido a la gravedad de la lesión".
Después de suceso, "nos reunimos aún dentro del césped con los entrenadores, delegados y capitanes de ambos equipos para decidir cómo actuar ante una situación tan delicada". Así, los técnicos y jugadores del equipo local "me comunican que sus jugadores están afectados por la seriedad de la situación y la preocupación por el estado de su compañero".
Ante estos hechos, el Rácing Club de Ferrol "se pone a disposición absoluta del club local y apoyan la decisión de sus rivales para no continuar el partido". Por tanto, tras ocho minutos con el partido detenido, "decido suspender definitivamente el encuentro debido a la gravedad de los acontecimnein tos y la dificultad de los jugadores locales para poder continuar jugando los minutos que quedaban por disputarse".
También detalla la situación justo cuando el partido fue detenido. Así, el CCF "defendía la portería ubicada a la derecha del túnel de vestuarios" y el Rácing estaba en la mitad izquierda del terreno de juego. Cuando el partido fue detenido el balón lo tenia el CCF, a cinco metros a la derecha del círculo central y a la altura del medio campo.
Por ello, de haber seguido, "la reanudación debía realizarse mediante un balón a tierra para el equipo local justo en esa zona del césped".
