CORDOBA CF

Mirando a Anduva

Segundo día de preparación con vista al crucial encuentro del domingo ante el Mirandés en el que se ausentó Caballero y Kieszek sigue sin participar en los partidillos

Entrenamiento Córdoba
photo_camera Imagen de un entrenamiento del Córdoba en la Ciudad Deportiva de la web del CCF

El Córdoba CF celebró el segundo entrenamiento semanal de cara a la trascendental visita a Miranda del Ebro para enfrentarse al Mirandés (domingo, 20.00 horas). La sesión de preparación transcurrió con normalidad e intensidad bajo el seguimiento de un técnico, José Luis Oltra, que a tenor de lo visto, podrá contar con 18 jugadores de la primera plantilla  para el partido en Anduva.

En el entreno estuvieron presentes 17 profesionales del primer equipo. Por segundo día consecutivo, Caballero se ausentó por motivos personales y Markovic siguió con su habitual plan de recuperación al margen del resto. No apareció Piovaccari (lesionado), ni tampoco el refuerzo anunciado para esta semana. El director deportivo, Emilio Vega, departió con el técnico al inicio y al final, con charlas cortas, quién sabe si sobre alguna novedad del fichaje que se espera para reforzar la defensa.

Hielo para Pawel

El que sigue sin participar del entrenamiento completo con sus compañeros es el portero polaco Kieszek. Pawel, que ayer se cuidó con hielo el muslo izquierdo por unas molestias, realizó los ejercicios con los porteros; pero no se unió al grupo en las postrimerías para jugar los partidillos. Parece que sí; aunque su evolución despejará la duda de si está en condiciones de disputar el choque en Miranda.

Al igual que en la jornada de ayer, el entrenamiento fue completado por un total de ocho jugadores de las categorías inferiores. Siete del filial: Quiles, Vito, Galán, Soler, Vázquez, Esteve y Valera. Además, un portero juvenil fue llamado a participar en una sesión muy numerosa en cuanto a efectivos (26 con Marcovik) con los cinco sentidos puestos en ganar el próximo domingo.

La nota llamativa la puso la presencia de los alumnos del Colegio Santa Victoria, que con sus vítores a jugadores y equipo, llenaron de ilusión un entrenamiento que finalizó con la familiar foto de la plantilla con los niños.