El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ha advertido de que, ante la llegada de la Navidad, "no debemos dejarnos aturdir ni deslumbrar por todo lo exterior", pues, "en una sociedad de consumo como la nuestra, mucho de todo eso es agitado para estimular el gasto, incluso el derroche. Hemos de aplicar nuestro sano juicio para mantener la templanza, puesto que sólo en el silencio interior podremos captar y saborear los misterios que celebramos".
Así lo ha destacado en su carta semanal, en la que Demetrio Fernández ha señalado que "sólo en el desprendimiento podremos salir al encuentro de todos los que sufren por cualquier motivo, y para los cuales también es Navidad".
Más aún, "el Hijo de Dios en su primera venida ha venido en pobreza y desnudez, en humildad y desprecio. No podremos conectar con él si nos instalamos en la extroversión, en el consumo y en el bullicio. No podremos sentir las necesidades de nuestros hermanos más necesitados, si sólo buscamos satisfacer nuestros sentidos".
De hecho, según ha argumentado el obispo, "la Navidad es una fuerte llamada a la solidaridad, porque el Hijo de Dios, por su encarnación, se ha unido solidariamente con cada hombre, cargando con sus penalidades y dándoles su salvación. Qué admirable intercambio".
En consecuencia y según ha subrayado Demetrio Fernández en su carta semanal, "el tiempo de adviento nos abre un panorama esperanzador. Entremos en este tiempo santo con deseo y esperanza de recibir abundantemente para repartir a raudales. Viene el Señor y trae para todos la gracia generosa de su salvación".
