Tal día como hoy de 1930, es decir hace ya 92 años, fallecía Julio Romero de Torres, con la ventana abierta a un Patio cordobés, según ha recordado a través de su cuenta de Twitter el Museo de Bellas artes de córdoba. "Murió en mayo, flotaban en la fuente los últimos azahares", así termina el poema de Pablo García Baena dedicado al pintor universal que supo plasmar en su privilegiado lienzo estos recintos a donde se asoma sin pudor alguno el alma cordobesa.
En la web del Bellas Artes, son varias las obras de Romero de Torres donde Los Patios tienen su reflejo. Entre ellas 'Un patio andaluz (Pereza andaluza)', de 1900/1902.
Según se indica en la página del museo, tras una primera etapa de tanteos, en que su obra discurre por caminos de cierto realismo social posromántico, el cambio de siglo supone la adhesión técnica de su pintura al simbolismo y luminismo sorollista, por entonces de moda, que, normalmente, verá con la óptica de lo local, como sucede en esta atípica obra sobre tabla ambientada en el jardín de la vivienda familiar y con su mujer como protagonista.
El título de Pereza andaluza repite el de uno de los capítulos de Tierra andaluza, en el que se describe la siesta de una joven en un jardín, publicado en 1900 por Julio Pellicer, cuñado de Julio Romero.
La Siesta, Mujer en la huerta con pozo, Mal de amores, La huerta de Morales, Aprendiendo a leer o Mujer asomada al jardín o el umbral, son obras suyas en las que, por supuesto, la figura de la mujer es la protagonista absoluta, pero la enmarca en la frescura vegetal de un Patio, que sirve para remediar los efectos de la canícula cordobesa.
Hay que recordar que estos días el Museo de Bellas Artes tiene programadas varias actividades en relación al Festival de Patios, entre las que está la apertura del Patio de su casa, a cargo de la Diputación de Córdoba, o la exposición Antonio Jaén Morente y el patio de la familia Romero de Torres.
