La legendaria ciudad de Córdoba recibió el año pasado 2021 nada menos que 1,1 millones de turistas, lo que significa un 63 % más que el año anterior. Además, los turistas, de media, le ofrecen una nota de 8,9 en su visita a la ciudad. No es de extrañar siendo como es una ciudad con un encanto muy especial, acogedora como pocas y con un buen puñado de lugares y rincones emblemáticos, auténticos símbolos históricos que bien merecen ser visitados.
Son tantas las cosas que ver en Córdoba que es altamente aconsejable contratar alguno de los muchos tours que se ofrecen, de este modo, el turista sabrá con seguridad que ha visto lo más importante de la ciudad y habrá recibido la más completa información sobre ello.
En cualquier caso, estos son lugares imprescindibles, esos que se ha de visitar de forma obligada si se quiere decir que realmente se ha estado, y disfrutado, en Córdoba, la ciudad con más títulos Patrimonio De la Humanidad concedidos por la Unesco del mundo.
1. La mezquita
Comenzamos la ruta por Córdoba visitando su monumento más famoso, su construcción más importante, una verdadera joya arquitectónica que, a pesar de haber sufrido reestructuraciones tratando de transformarla en una catedral, sigue manteniendo su esencia árabe. Después de cruzar su bonito patio de los naranjos se entra en una enorme sala con más de 1300 columnas, lugar dedicado a la oración que permite recibir sensaciones casi mágicas. Se trata de una edificación del año 786 construida a partir de una anterior basílica visigoda.
2. Los patios cordobeses
Si Córdoba no tuviera su mezquita merecería visitarse igualmente gracias a la belleza de estos rincones tan pintorescos, coloridos y agradables. La decoración de sus patios deja embelesados a todos aquellos que pasean por sus inmediaciones. Construcciones de raíces romanas para soportar los veranos calurosos. Las casas se situaban alrededor de un patio con una fuente o pozo en su centro que refrescara todo el lugar, pero fue cosa de los musulmanes llenar estos lugares de plantas y darle el fabuloso aspecto visual que mantienen en la actualidad, aumentando la sensación de humedad y frescor.
3. El Puente Romano
Otro de los lugares que no hay que dejar de ver será su fabuloso Puente Romano sobre el río Guadalquivir. Este puente de piedra, el primero en cruzar este río, se construyó en el siglo I a.C, posiblemente formaba parte de la vía Augusta que unía Cádiz con Roma. Una maravilla arquitectónica con una longitud de 331 metros sostenida gracias a 16 fabulosos arcos, de los cuales 4 siguen siendo los originales. También merece pararse un momento y contemplar las puertas de sus extremos; la Torre de Calahorra y la Puerta del Puente.
4. La calleja del Pañuelo y la calleja de las flores
Pasear por las calles del casco antiguo de la ciudad es un placer para los sentidos y es obligado para todo turista que quiera conocer su verdadera idiosincrasia. La primera, como curiosidad, ya que es la calle más estrecha de la ciudad, su anchura es la medida de un pañuelo de caballero estirado en diagonal, de ahí su peculiar nombre, al final de esta calle se encuentra la que muchos consideran la plaza más pequeña del mundo. La segunda calleja aparecerá claramente al paseante, pues es una, también estrecha, callejuela en la que sus paredes están repletas de macetas color azul con geranios de diferentes colores. Si se recorre entera se entrará en otra plaza, con una fuente donde refrescarse y descansar rodeado de fachadas llenas de macetas.
5. La Plaza de la Corredera
Para descansar y tomar un refresco o un café ningún sitio como la rectangular Plaza de la Corredera, la principal de Córdoba. Se trata de una extensa superficie rodeada de edificios de gran belleza arquitectónica que ha tenido durante la historia diferentes funciones, desde cárcel hasta escenario para ejecuciones públicas, pasando por un mercado o por una plaza de toros.
6. El Templo Romano
A unos pasos de la mencionada Plaza de la Corredera se localiza un Templo Romano que fue descubierto hace relativamente poco tiempo, gracias a las obras de ampliación del ayuntamiento en 1950. Se trata de una estructura del siglo I d.C, posiblemente formando parte del foro principal.
7. El Alcázar de los Reyes Cristianos
Este castillo fortificado que servía de residencia al Rey data de finales del siglo XIV, construido sobre otro edificio con la misma función, pero perteneciente a la época de los Califas. Su interior sorprende por la belleza de sus estancias reales, el Salón de los Mosaicos y el Patio Morisco. Sin lugar a dudas, lo más espectacular de esta edificación utilizada para descanso del Rey, cárcel o cuartel militar son sus más de 30.000 metros cuadrados dedicados a jardines.
La visita a Córdoba no se acaba en estos 7 lugares representativos, aún quedarían por visitar las caballerizas reales, la sinagoga, el Palacio de Viana o la cuesta del Bailío, entre otros fabulosos rincones.
