Las obras de reforma del antiguo Mercado del Alcázar han finalizado ya, y ahora sólo resta equipar el nuevo edificio para que antes de abril se abra ye tenga de nuevo un uso vecinal. El antiguo mercado se encontraba en un estado bastante deteriorado y, tras conversaciones con los vecinos y vecinas llevadas a cabo en el mandato anterior, el Ayuntamiento optó por acometer esta remodelación que ha durado seis meses, aunque previamente las actuaciones estuvieron paralizadas debido a que las afecciones que se esperaba que tuviera el edificio originario de los años 50 del siglo pasado eran peores de las inicialmente previstas.
Según ha expuesto el concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Torrico (PP), este nuevo equipamiento va a suponer la revitalización y dinamización de la vida de los vecinos más mayores de la zona de Vallellano y San Basilio. En su interior hay ahora un salón de usos múltiples y se impartirán distintos talleres de actividades pensadas para mayores, un estudio de edición gráfica y audiovisual, además de espacios para almacenar material y otras dependencias más funcionales.
La superficie construida es de 383 metros cuadrados, de los cuales útiles son 356 y se han destinado a estas obras a cargo de la empresa cordobesa Construcciones Serrot casi 600.000 euros.
Tal y como ha explicado Javier Valverde, arquitecto de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) responsable de la obra, el aspecto exterior no ha cambiado en exceso y mantiene la imagen original de su inauguración en los años 50 del siglo XX, y de hecho, "es una de las primeras obras de arquitectura del movimiento Moderno que se hicieron en Córdoba". No obstante, toda esa estructura en hormigón armado tuvo que se restaurada. Aunque en su interior sí se ha llevado a cabo una actuación más en profundidad para adaptarse a las necesidades vecinales, con los que se ha contado para redactar el proyecto.
De este modo, "el resultado interesante que obtenemos es un volumen construido a principios del Siglo XXI, dentro de un cascarón, que es una obra de los años 50 del Siglo XX y, a su vez, en un entorno patrimonial de época medieval, y lo que esperamos es que los vecinos lo disfruten", ha indicado el arquitecto.
También el alcalde, José María Bellido (PP), ha explicado que el uso final de este edificio, ya incorporado a la red de centros ciudadanos de la ciudad, será el de centro cívico complementario al que hay en La Corredera para vecinos y vecinas que viven algo más alejados de esa plaza, y también como centro complementario al Centro de Mayores del Alcázar Viejo, que se ha quedado ya bastante pequeño para atender a todas las demandas y que "realiza una labor muy digna".
El mercado estaba en desuso desde 2006, fecha de su cierre por falta de puestos en su interior. Y ya en anteriores mandatos se produjeron intentos por recuperarlo, tanto a través de inversiones públicas, como posible incorporación al edifico que tiene enfrente de investigaciones, como inversiones privadas, pero todas acabaron mal. Y en este contexto, Bellido llevó su recuperación en el programa del año 2019 y en 2023, porque "más allá de lo simbólico y de que sea un espacio importante dentro del barrio, esa zona de la ciudad ha evolucionado después de casi 80 años, y ahora conviven personas mayores con familias de nueva llegada. Tanto para unos como para otros era necesario contar con ese espacio público.
Para los mayores, porque el único centro que tenían alrededor era el del Alcázar Viejo, demasiado pequeño, y el centro cívico que funciona es el de la Corredera, que "está a una distancia considerable de estos barrios de la ciudad, como Vallellano, el Casco Histórico-Judería y el Alcázar Viejo, y ahora tienen un centro complementario mucho más cercano".
como ha explicado Bellido, se trata de un edificio muy funcional con espacios separados y otros que se pueden ir configurando a través de unos paneles móviles que hay en el techo para que "pueda haber diversas salas con diversos usos y diversas configuraciones, según las necesidades que vayan teniendo los vecinos".
De igual modo, el alcalde ha avanzado que el equipamiento se va a cubrir con material que ya hay almacenado en las naves de Infraestructuras, por lo que no hará falta sacar ninguna licitación nueva sino que se va a aprovechar lo que ya hay, y se dotará de ordenanzas para que puedan tener el control de acceso, de apertura y cierre del edificio.
