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Aumente avanza que en la fiesta de Fin de Año habrá un control de petardos más exhaustivo

El concejal de Seguridad informa de que "nadie ha pedido permiso" para arrojarlos en Nochevieja

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photo_camera Petardos decomisados en los últimos días

La fiesta de Fin de Año en la Plaza de Las Tendillas va a contar con un control más exhaustivo por parte de la Policía Local en materia de petardos, para evitar que puedan producirse situaciones de peligro con avalanchas de personas asustados por el ruido de una 'bomba' creyendo que se trata de “otra cosa diferente”. Así lo ha expuesto el concejal de Seguridad Ciudadana, Vía Pública y Gestión, Emilio Aumente, quien ha reconocido que "nadie ha pedido permiso" para el uso de petardos en la madrugada del 31 de diciembre al 1 de enero, ni en Las Tendillas ni en ninguna otra parte, si bien es tradicional que desde el edificio de El Corte Inglés se lancen algunos fuegos artificiales para celebrar el cambio de año.

De hecho, el responsable municipal de Vía Pública ha considerado que, a pesar de que se ha endurecido el control policial con este tipo de artefactos ruidosos, haciendo cumplir a rajatabla el bando municipal, "no todo está prohibido", como sería el caso de alguna bengala o petardo menor.

Por contra, los del tipo F3, que son los más duros, están terminantemente perseguidos por la Policía y, precisamente, son prácticamente la totalidad de las 10.000 unidades decomisadas en los últimos 20 días por los agentes municipales.

"Son los que tienen un peligro mayor, porque pueden explotar en la mano y puedes perderla y los que más molestan tanto a las personas mayores como a ciertos animales de compañía, como los perros, que lo pasan muy mal con los ruidos", ha comentado.

En cuanto a las sanciones que se han levantado contra vendedores ilegales y lanzadores de petardos, Aumente no supo precisar la cantidad de las multas que les pueden caer, pero el concejal habló de hasta 600 euros para los que fueron sorprendidos tirando petardos, mientras que los establecimientos que vendían este material de forma ilegal bien pueden enfrentarse a una sanción mucho más elevada, con un límite de 600.000 euros.