El alcalde de Córdoba, José María Bellido (PP), ha señalado esta mañana que la capital tiene "agua para los próximos seis años" tras el paso de la borrasca Nelson, que ha dejado el embalse del Guadalmellato al 89,71%, con 131,494 hectómetros cúbicos en su interior, según los datos de hoy mismo de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).
Ha sido una "Semana Santa atípica y triste en algunos aspectos, pero el agua caída ha sido una bendición", ha llegado a declarar y la situación del Guadalmellato significa que "hemos superado por completo la situación de sequía". Es más, este embalse que abastece de agua para consumo humano a la capital "va a tener que soltar agua para llenar, a su ve, el plantaron de San Rafael de Navallana, que es más para uso agrario y de regadío, aunque también funciona como reserva para consumo humano", ha añadido.
San Rafael de Navallana está a día de hoy al 63,66%, con 99,613 hectómetros cúbicos, mientras que el Guadalmellato está ya soltando agua en cantidad de 0,052 hectómetros en 24 horas.
"Hemos vuelto a la completa normalidad y hay consumo para largo", ha insistido el regidor, no sin advertir que hace seis años, en 2018, "estábamos en la misma situación y a principios de 2024 estábamos en situación de sequía", por lo que ha avanzado que "vamos a seguir con nuestra compaña de concienciación de consumo responsable del agua", al tiempo que Emacsa continuará con su plan de aguas regeneradas, que "es el futuro a largo plazo frente a los problemas de ciclos con sequía y agua".
En cuanto al riesgo de inundaciones por la crecida del Guadalquivir, Bellido a indicado que desde Protección Civil se está vigilando el cauce y, "a corto plazo, no tendremos problemas graves de inundaciones". A modo de ejemplo, ha indicado que en algunas partes de las parcelaciones del Aeropuerto la línea de casas está a tres metros del agua, y en otros, a cuatro metros.
