Dicen que todo aquel que ha vivido en su propia piel la libertad y la adrenalina que se experimenta al viajar en moto no vuelve a las cuatro ruedas. De hecho, cada vez son más los que se apuntan al mototurismo para conocer en primera persona los espectaculares rincones de la península ibérica. Y es que, España puede presumir de rutas ideales para disfrutar quemando rueda.
Ahora bien, lo cierto es que también hay varios puntos negros repartidos por las carreteras de todo el país que conviene conocer para tomar las debidas precauciones, sobre todo si eres de los que planean rutas largas o les encanta perderse con la moto. Tener claro dónde se ubican será de ayuda para evitar accidentes y proteger tu motocicleta, a ti y tu acompañante de posibles contratiempos.
De la misma manera, revisar el seguro de moto para encontrar el que ofrezca mejores condiciones al mejor precio es otra manera de invertir en seguridad. Además, actualmente es muy sencillo gracias a herramientas, como el comparador de seguros de moto de Rastreator, que muestran todas las opciones en un único interfaz y ayudan a escoger la que más se ajusta a cada perfil de manera intuitiva.
Si tienes planeada una temporada de rutas y acción sobre ruedas aprovechando que vienen meses de climatología favorable, te conviene echar un vistazo a las carreteras más peligrosas de España para prevenir cualquier posible eventualidad. Recuerda: la seguridad es lo primero.
Los puntos negros de las carreteras españolas para motoristas
Actualmente hay en España 97 puntos negros para motoristas repartidos por sus carreteras, según datos de la DGT (Dirección General de Tráfico). La misma fuente apunta a que la Comunidad Valenciana ostenta el dudoso honor de ser la región que más carreteras peligrosas tiene, mientras que las Islas Canarias lo ostenta en cuanto a kilómetros. Por detrás se encuentran numerosas carreteras andaluzas, cántabras, asturianas o gallegas.
Pero, ¿qué carretera es la más peligrosa de nuestro país para viajar en moto? Para la DGT se trata de la CV-70 de Alicante, con hasta tres puntos negros (entre el kilómetro 0,400 y el 2,700; el 16,550 y el 20,400; y el 28,400 y el 30,000) es una de las más arriesgadas. Otras que destacan del informe es la CV-235, a la altura de Castellón, que también cuenta con dos señalizaciones, una que comienza en el kilómetro 7,900 y acaba en el 9,800 y la segunda que comienza en el 18,100 y termina en el 20,100.
De las Islas Canarias destacan la GC-200 en Las Palmas, que tienen hasta tres puntos negros. El primero de ellos comienza en el kilómetro 7,400 y finaliza en el 9,620; el segundo va desde el kilómetro 44,800 hasta el 46,730; y el tercero fluye desde el 48,860 hasta el 51,050. En Santa Cruz de Tenerife se encuentra la TF-21 que también cuenta con tres señalizaciones en el kilómetro 7,200 hasta el 9,300; en el 17,750 hasta el 20,000 y en el kilómetro 62,450 hasta el 64,750.
Cómo reconocer las carreteras más peligrosas para motoristas
Aparte de tener claro qué tramos son los más peligrosos a la hora de viajar en moto, no está de más tener en cuenta algunas características que comparten los kilómetros de carretera con riesgo alto que suelen ser tramos convencionales, con intersecciones al mismo nivel y una calzada única.
Paradójicamente, las carreteras más peligrosas suelen presentar una intensidad media diaria por debajo de los 10.000 vehículos al día y las más seguras son por las que transitan más vehículos. Esto se explica en parte porque en las carreteras más transitadas se dispone de mayores niveles de seguridad pasiva (no se invade el sentido contrario, no hay intersecciones al mismo nivel…) que en los tramos más solitarios.
Además, las carreteras en mal estado (con grietas en las rodadas, barreras de contención deterioradas o firme en mal estado) aumentarán el riesgo para los motoristas, por lo tanto, conviene evitarlas siempre que sea posible.
Cómo proteger tu moto de accidentes
Tanto si eres de los que disfrutan con las rutas en moto como si solo la usas para desplazarte por carretera, protegerla (y protegerte) de los accidentes debería ser tu prioridad número uno. Conseguirlo empieza por encontrar una póliza que cubra todas las necesidades del conductor, por ejemplo, si eres de los que pasa mucho tiempo en carretera quizá te convenga contratar un seguro a todo riesgo con el que viajar cubierto ante cualquier eventualidad.
Si desconoces el coste de este tipo de coberturas, debes saber que con los comparadores de seguros es sencillo recabar la información y dar con las mejores ofertas para cada contexto. Tan sencillo como introducir los datos solicitados y recibir todas las opciones ordenadas según su precio, de menor a mayor prima. Tras esto, solo queda analizar todo lo que te ofrecen las distintas aseguradoras y elegir aquella que se adapte mejor a tus necesidades. Si sigues con dudas, puedes hablar con un asesor seleccionado para aclarar los puntos importantes.
Tómate tu tiempo para comparar compañías, sopesar todos los detalles y valorar qué tipo de póliza te conviene más para disfrutar de tus rutas con seguridad. Porque, en estos casos, ser precavido es una virtud.
