Al ser madre, las prioridades que tenías en la vida se vuelcan para cuidar y darle lo mejor a tu bebé. Desde el momento en el que nace el instinto de protección se enciende y siempre buscaremos lo mejor. No obstante, las dudas asaltan en todo momento, especialmente si eres mamá por primera vez.
Dentro de ese mundo de dudas y de infinita felicidad por dar vida, uno de los aspectos más importantes, sin duda alguna, es la alimentación del bebé. De ello, y del amor y cobijo que le brindas como madre, dependerá su buen desarrollo y sano crecimiento.
Dentro de las principales recomendaciones más estudiadas en pro del bienestar de un recién nacido es darle leche materna a demanda, por lo menos, durante los primeros 6 meses de vida, de forma exclusiva y, de manera complementaria, por dos años. No obstante, no todas las mujeres pueden hacerlo de esa forma, por múltiples razones que pueden involucrar situaciones de salud, incomodidades y otras. Todas son válidas y comprensibles.
Por suerte, el propio mercado y los profesionales especializados en esta delicada área, han creado fórmulas de leche especialmente elaboradas para garantizar la correcta alimentación del bebé, así como también, están disponibles biberones y tetinas que ayudan a que el proceso de alimentación sea lo más parecido a amamantar.
Una muestra de ello es el biberon personalizado de Happymami, que es desarrollado por matronas con la intención de que la tetina sea lo más parecida a tu propia anatomía. Te explicamos cómo puedes obtener este biberón único y especial.
Solo tienes que ponerte en contacto con este equipo de matronas que entienden que cada madre y cada bebé son únicos. Por lo que se busca adaptar un biberón a las necesidades de cada caso. Puedes diseñar el biberón para tu bebé y de esta manera, no solo garantizar una buena alimentación, sino también estrechar aún más, ese lazo inquebrantable entre madre e hijo.
Por qué un biberón personalizado
Si por cualquier circunstancia tu pequeño ya no puede tomar leche materna de forma directa, este biberón evitará confusiones en el infante y por ende, el temible rechazo a la alimentación. No en pocas ocasiones, las madres deben volver al trabajo, presentan alguna condición de salud o cualquier otra situación que les impide dar pecho. Es así como este biberón es una gran solución.
También es ideal cuando se lleva a cabo la alimentación mixta. Igualmente, el biberón ayudará a que tu bebé disfrute de ambas formas de alimentarse.
Biberones anticólicos
Una de las situaciones que se presentan con mayor frecuencia en el período de alimentación del bebé con biberón son los cólicos. Muchas veces se debe a la ingesta involuntaria de aire. Con el biberon anticolicos estos delicados momentos de estrés tanto para la madre como para la salud del bebé, se evitan a toda costa.
El diseño de la tetina evita, precisamente, que los bebés ingieran aire mientras se alimenta. Esto es gracias a un sistema de ventilación que permite que entre el aire sin que se formen burbujas. Es un producto que goza de excelentes valoraciones por parte de madres que ya lo han utilizado.
Cómo preparar el biberón para tu bebé
Si le das leche de fórmula a tu bebé o sacas leche materna para suministrarle al bebé con un biberón es muy importante que sepas cómo llevar a cabo la preparación de este con todas las medidas de higiene y seguridad necesarias para cuidar la salud del pequeño.
Es por ello que muchas madres buscan ayuda y orientación sobre como preparar un biberon. Aunque son sencillas y lógicas, es necesario que las conozcas y las cumplas al pie de la letra:
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Es obligatorio lavarse muy bien las manos con agua y jabón antes de manipular los utensilios de preparación de la fórmula, así como el biberón y la tetina.
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Estos deben esterilizarse previamente y ser guardados en superficies adecuadas.
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De acuerdo con lo que indique el pediatra, debes procurar las medidas y cantidad de fórmula necesaria y calentarla.
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Si se utiliza agua embotellada es importante calentarla, por lo menos a 70 grados centígrados para eliminar cualquier bacteria y luego dejarla enfriar para posteriormente, preparar la fórmula.
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Luego de alimentar al bebé debes desechar cualquier sobra si esta no se ha consumido en las siguientes dos horas.
