El colectivo Nodo Corduba ha denunciado hoy la "actitud hostil" del alcalde de Córdoba, José María Bellido (PP), con respecto al Casco Histórico y a las múltiples solicitudes de reunión que se le han planteando a cuenta de la inseguridad que hay en algunas zonas, en unas con más intensidad que en otras, y la ausencia de respuesta "a las 120 firmas que se le han entregado y registrado en sede electrónica exigiéndole una reunión".
Según ha indicado el portavoz de Nodo Corduba, Manuel Ortega, esas firmas también reclaman la convocatoria de una junta técnica de seguridad para el problema concreto que hay en el Casco. "Tuvo que celebrar una junta obligado, porque no quería convocarla, a pesar de ser presidente y de que el reglamento establece que es el alcalde quien ha de convocarlas, y mucho nos tememos que en esa reunión del 6 de febrero sólo se habló de algunas zonas que al alcalde le interesaba, porque parece ser que El Brillante es el único barrio que existe para él y posiblemente María la Judía".
El caso es que en el Casco se han presentado denuncias por hurtos y robos que el alcalde se niega a reconocer, al igual que la realidad del Casco, abandonado diversos aspectos, a pesar de que se está elaborando o redactando un plan de gestión, del que "también hemos pedido información al respecto y no se nos ha concedido".
Se trata de una situación que se viene arrastrando desde 2021 y desde entonces "llevamos registrando escritos en sede electrónica para exigir una reunión y que se convoque la Junta Local de Seguridad". A finales de septiembre o principios de octubre de 2023 en rueda de prensa conjunta con vecinos y comerciantes se planteó el problema abiertamente y se han recopilado ya numerosos denuncias desde La Medina y San Lorenzo, reclamando un plan de actuación conjunta y ordenada. Igualmente se llegó a plantear en el Consejo de Distrito.
Por su parte, la también portavoz de Nodo Corduba, Lourdes Martínez, ha detallado que "llevamos más de un año sufriendo una oleada de robos y tirones en los negocios y viviendas del Casco Histórico, especialmente en La Judería". Tanto es así, que desde las tiendas se va avisando a sus clientes y a los grupos de turismo de que hay carteristas y que lleven las maletas y mochilas a la vista sin separarse del grupo.
"De las carteristas tenemos fotos y las conocemos bien y vamos avisando como ocurre en otras ciudades de España, y aquí estamos esperando a que el Ayuntamiento se digne a recibirnos". Según Martínez, ayer, lunes, se llevaron 14 vestidos de una tienda y el dueño tuvo que salir detrás del ladrón "que es un habitual".
La portavoz ha señalado que la vecindad y los comerciantes están más que cansados y algún día "se puede dar un problema" o van a tener que actuar como hicieron los vecinos de Sanlúcar de Barrameda con los dos ladrones de la joyería.
La cifra de denuncias es ya muy elevada, pero está el problema de que al ser robos por valor de menos de 400 euros la denuncia no sale adelante y si es un turista extranjero "éste no va a regresar de su país natal a reconocer al chorizo o a ir a un juicio".
De igual modo, los ladrones entran en las viviendas y se llevan bicicletas y todo lo que haya almacenado en trasteros. Además, "como las terrazas del Casco se comunican unas con otras, ahí tenemos el paseo que se pueden dar estos chorizos".
Martínez ha recordado que se ha solicitado en innumerables ocasiones la presencia policial efectiva, a pie, en bicicleta o en moto, "como había antes", porque los agentes que hay a caballo "sólo están de adorno para hacer fotos".
En este punto de la situación y si sigue sin haber respuesta, Manuel Ortega ha avanzado que se presentará la correspondiente queja al Defensor del Pueblo Andaluz, "ante la indefensión que sentimos por parte de nuestro Ayuntamiento".
