Opinión

Echar la culpa a alguien: La falacia de los chemtrails

Vivimos en una época confusa. Disponemos de herramientas enormemente potentes para tener a mano cualquier conocimiento que se haya conseguido o se esté conociendo. Sin embargo, lo que pulula en las redes y medios y gana adeptos es la desinformación, las pseudociencias, los engaños y la superstición. Es, sencillamente, alucinante. 

Hemos pasado una pandemia en la que hemos tenido que sufrir la desinformación, muchas veces interesada, en especial procedente de ciertos estamentos políticos, de los que abogan por un origen 'artificial' del virus. A ellos se han sumado los que negaban la existencia de tal virus y decían que era una gripe más, pero que luego mutaron a que se había generado un virus contra nosotros para vender vacunas y que finalmente mutaron para decir que con las vacunas nos querían diezmar como población. Tres meses, un año, dos, ya vamos por más de dos y la gente vacunada no se muere así que hay que encontrar otra conspiración porque el circo se acaba y no hay número nuevo. 

Como lo de que el mundo se acaba ya está muy manido y tenemos muchos ejemplos de que las fechas se anuncian, llegan y pasan sin que nada ocurra fuera de lo normal, hay que buscar algo que sí esté ocurriendo y ahí tenemos la sequía. No llueve, es muy raro, algo pasa, nos controlan, ponen cosas en el aire para que no llueva, los aviones dejan estelas, hete aquí la causa. Un razonamiento muy absurdo por la cantidad de errores y la falta de evidencias, pero parece que permea en la población. 

Permea tanto que ahí tenemos a parlamentarios haciendo preguntas al Gobierno de España sobre si está modificando el clima con las estelas de aviones u organizaciones agrarias como ASAJA que ya en 2016 decían que había aviones que usaban sustancias para sembrar nubes, pero que lo que hacen es que no llueva. Cualquier cosa con tal de no reconocer que está ocurriendo lo que se estaba anunciando, que no podemos hacer mucho para evitarlo y que llegamos tarde para haber tomado las decisiones oportunas para paliar sus efectos. 

Cualquier cosa para que la culpa sea de alguien y la responsabilidad de nadie. 

Las estelas de los aviones son contrails y no chemtrails

La diferencia entre el real contrail y el ficticio chemtrail es enorme. El contrail es una estela de vapor de agua condensado y enfriado hasta formar cristales de hielo debido a su paso por las turbinas de los motores de un avión mientras que el chemtrail es una paranoia inventada por unos cuantos para decirnos que nos están haciendo algo malo como que se cargan aviones con productos químicos y se tiran a la atmósfera. Para algunos aviones que no aparecen en los radares, para otros simples aviones de línea pero con sus bodegas llenas de químicos. De todo hay en la viña del señor. 

La historia de los chemtrails es demencial. Se han propuesto para decir que nos fumigaban para hacernos homosexuales, para enfermarnos, para crearnos cáncer y, ahora, como hay sequía, para evitar que llueva. Contra esto último simplemente hay que usar física básica para entender que no tienen sentido alguno. (Permítanme no poner los enlaces. Si los quieren, busquen en Google).

Voy a intentar explicar qué es un contrail. Las estelas que ven tras los aviones no son más que el resultado de la relación entre presión, volumen y temperatura. La ecuación que describe esta relación entre la presión, volumen y temperatura es: 

P · V = n · R · T

Siendo P = presión; V = volumen; n= moles de gas; R = constante de los gases perfectos; y T = temperatura. 

Para poner un ejemplo claro. ¿Recuerdan lo que pasa con una cerveza líquida bien fría cuando abren la botella? Sí, eso mismo, que se congela. Los líquidos no son gases perfectos, pero podemos aplicar esta ecuación también. Así, lo que pasa en la botella es que hemos abierto el tapón, la presión ha bajado rápidamente y, por tanto, la temperatura también lo ha hecho. El volumen no cambia mucho porque es un líquido, pero algo se sale por el cuello de la botella. Así de sencillo, la temperatura baja por la presión y la cerveza se congela. 

Lo mismo pasa en un contrail. El aire, con cierta humedad, pasa por los potentes motores de un avión, se comprime por efecto del motor por lo que aumenta la presión en gran cantidad y algo disminuye el volumen. Eso hace que la temperatura del aire aumente al pasar por el motor. Pero una vez que lo deja, la presión vuelve a ser baja, el volumen aumenta un poco y la temperatura tiene que bajar mucho. Si hay suficiente humedad y teniendo en cuenta que a 10.000 metros de altura la temperatura es muy baja (del orden de -40 ºC), el vapor de agua condensa y forma cristales de hielo. A estos se les llama cirros homogenitus y son muy parecidos a los cirros normales que son solo nubes a gran altura formadas por cristales de hielo. Por eso tienen esa forma de plumas deshilachadas. 

No se puede fumigar nada a 10.000 metros de altura 

¿Han visto alguna vez fumigar algún campo? Se suele hacer mucho. Se usan pequeñas avionetas con aparatos que dispersan el producto que sea. Estas avionetas vuelan muy bajo, a nivel de las copas de los árboles. Supongo que no se les escapa por qué se hace así. Me cuesta tener que hacerlo, pero se lo voy a decir. Se hace para asegurar que el producto llega a donde tiene que llegar. Por eso se fumiga a escasos metros de la zona que se quiere fumigar. 

Los aviones que dejan las estelas que vemos en nuestros cielos vuelan entre 10 y 11 kilómetros de altura sobre nuestras cabezas. ¿En qué cabeza cabe que algo que soltasen a esa altura iba a caer sobre un punto o área definida? Es totalmente imposible determinar dónde podría llegar eso que supuestamente sueltan. A no ser, claro, que sólo sea vapor de agua generado por el motor que ya se dispersará de nuevo por la atmósfera volviendo a su equilibrio habitual. 

Por poner un ejemplo simple. Quieren ustedes abonar un terrenito en las afueras de Córdoba. ¿Echarían el abono en Jaen? ¿A que no? Pues eso mismo podemos pensar de quienes dicen que tirando algo a la atmósfera a 10.000 metros de altura va a caer sobre una localización definida. Es totalmente absurdo pensar en eso. 

El ioduro de plata no elimina nubes, se usa para sembrarlas (aunque poco eficientemente) 

Otro de los comentarios que pululan por las redes y por ciertos medios de comunicación, que parece que no entienden que su labor es la de informar y no la de hacerse eco de supuestos hechos sin base lógica alguna, es la de que se dispersa ioduro de plata para que no llueva.

El ioduro de plata se ha propuesto, y aparece en la página de la AEMET, como método para hacer que la humedad se condense, forme gotas más grandes y pueda, así, acabar precipitando e incluso evitar que se forme granizo. Es decir, para generar lluvia. Aquí he de decir que con muy poca eficacia que se cuantifica en un 10%. Mucha plata para poca agua, la verdad. 

Pues bien, ahora parece que hacer eso es para evitar que llueva. Un absurdo como una casa, pero ahí tenemos los vídeos de aviones sobre cielos muy azules que, supuestamente, están haciendo que no llueva sin que se aprecien nubes que puedan producir alguna lluvia. De hecho, hasta ASAJA se hizo eco hace mucho tiempo de esto y acusaron a 'alguien' de usar aviones para sembrar ioduro de plata para dispersar lluvias. Es como si dijeran que se siembran semillas para dejar campos baldíos. Totalmente absurdo. 

También se está hablando de que hay cañones de ondas que evitan que las tormentas suelten agua. Más bien se usan para evitar que haya granizo, pero ya les digo yo que con muy poca eficacia o más bien nula. La velocidad y las fuerzas que generan el granizo no se pueden contrarrestar con cañones de ondas de fabricación humana. No funciona así, las tormentas se generan con fuerzas imposibles de domesticar, pero no parece que seamos capaces de entenderlo. 

Todo con tal de evitar asumir nuestra propia responsabilidad 

No sé si se han enterado pero el cambio climático (yo prefiero ya llamarlo el desequilibrio climático) ya está aquí. Los mares y océanos han aumentado su temperatura y eso influye en las corrientes atmosféricas que se nutren de las corrientes marinas. Eso hace variar la disposición habitual de anticiclones y borrascas y lo que antes solía ser habitual en una zona ahora ya no lo es. 

Si no recuerdo mal no hemos tenido una estación intensa de huracanes por lo que es de prever que no va a ser muy intensa de borrascas atlánticas que son las que nos suelen llegar. Eso me lleva a una explicación más; la de la sombra de lluvias

Hay zonas donde no suele llover mucho por el simple motivo de que se encuentran en lo que conocemos como zona de sombra de lluvias. Los frentes cargados de humedad entran por la Península y se topan con cordilleras o zonas montañosas. Al hacer eso, las nubes que acompañan a los frentes se elevan debido a las montañas y el aire va disminuyendo de temperatura, lo que provoca que se condense más agua. Esa agua acaba precipitando mucho en la vertiente de la cordillera que choca con el frente. Por ejemplo, en España, en Galicia, la Cordillera Cantábrica, el Sistema Central y los montes de Cádiz y en especial Grazalema. Y en Canarias, en la cara norte de las islas, ya que ahí los Alisios son de componente norte. 

Pero eso tiene un efecto. Una vez sobrepasada la cordillera, las nubes ya no llevan tanta humedad, son de un algodón muy blanco, impresionantemente blanco y con poca o nula posibilidad de dejar nada de agua. Y eso hace que en el sur de Tenerife o de cualquier isla canaria apenas llueva y sea desértico, o en Almería, Murcia o Albacete, o en Aragón, o en Madrid o Guadalajara. Están en zona de sombra de lluvias y apenas llueve porque los vientos dominantes siempre vienen del norte en las Canarias o del oeste en la Península. Lo único que puede solucionar esta parte es la llegada de precipitaciones del Mediterráneo, que pueden ocurrir, pero que, de normal, suelen ser tormentosas. 

Así que antes de buscar conspiraciones, ataques, contubernios gubernamentales o simplemente culpables, hay que entender a qué nos enfrentamos y en qué situación estamos. Pretender seguir sembrando en regadío con una previsión de menor cantidad de lluvia es absurdo. Pretender legalizar regadíos cuando apenas hay agua disponible es absurdo.  Denunciar que no llueve porque alguien lo está manipulando todo es absurdo. Todo eso no es más que buscar culpables cuando lo que tenemos que hacer es asumir la responsabilidad y buscar la mejor solución posible, los cultivos más eficientes ante una baja disponibilidad de recursos hídricos, poner la inteligencia al servicio del futuro. 

Pero no, buscamos culpables. Como decían Les luthiers, "errar es humano, pero echarle la culpa a otro es más humano todavía" o esta otra "el que es capaz de sonreír cuando todo le está saliendo mal es porque ya tiene pensado a quién echarle la culpa". 

No es tiempo de culpas, es tiempo de encontrar soluciones, pero es más fácil buscar culpables y dejarse llevar por las conspiraciones. Lo de encontrar soluciones es muy cansado y obliga a pensar, pero así no llegamos a nada útil.