SEGURIDAD

La criminalidad baja en Córdoba casi un 2% en un año

Los delitos por tráfico de drogas han bajado un 15,2% pasando de los 164 registrados en 2014 a los 139 del pasado año. Asimismo descienden los robos con violencia e intimidación un 8%, seguidos de los robos con fuerza en domicilios que también bajan un 6,5%

Antonio Sanz índices criminalidad
photo_camera Antonio Sanz en la comparecencia donde ha ofrecido los índices criminalidad

El índice de evolución de la delincuencia volvió a experimentar una bajada en 2015 por cuarto año consecutivo en Andalucía, con una disminución del 4,4 por ciento de las infracciones penales respecto a 2014, según los datos facilitados hoy por el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz. En la provincia de Córdoba, durante el año 2015, se registraron 25.495 infracciones penales, frente a las 27.114 registradas en el año 2014, lo que supone un descenso del 6%. La tasa de criminalidad desciende 1,9 puntos, pasando de 33,9 puntos del año 2014 a los 32 en el año 2015.

En cuanto a los indicadores de criminalidad en Córdoba hay que destacar el descenso registrado en los delitos por tráfico de drogas que han bajado un 15,2% pasando de los 164 registrados en 2014 a los 139 del pasado año. Asimismo descienden los robos con violencia e intimidación un 8%, seguidos de los robos con fuerza en domicilios que también bajan un 6,5%. Por su parte, los daños han descendido un 4% y los hurtos un 3,8%. Con respecto a los robos en explotaciones agrícolas y ganaderas, el Ministerio del Interior ha contabilizado un total de 1.043 hechos delictivos en la provincia durante 2015 frente a los 1.292 del 2014, lo que supone un descenso del 19,3%.  

Así, el total de infracciones penales (delitos más faltas) se redujo en el último año un 4,4%  en Andalucía, desde las 352.221 registradas en diciembre de 2014 hasta las 337.137 contabilizadas en 2015.

Sanz ha destacado, además, que este ha sido el cuarto año consecutivo en el que se registra una bajada de las infracciones penales, con un descenso global del 17,18% en el conjunto de la legislatura, lo que hace “que Andalucía se perciba en el exterior como un lugar seguro, con bajos índices de criminalidad”.

En consecuencia con esta disminución de las infracciones penales, la tasa de criminalidad también ha alcanzado su cota histórica más baja desde 2004, cuando se empezó a registrar la estadística, situándose en diciembre de 2015 en 40,1 delitos y faltas por cada mil habitantes. Es decir, 1,8 puntos por debajo de  2014 y con un descenso de 8,2 puntos respecto a 2011.   

EJES DEL MODELO DE SEGURIDAD 

Todo ello induce a pensar, a juicio del delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, que “el modelo de seguridad sobre el que ha trabajado el Ministerio del Interior” durante la pasada legislatura, basado en cinco ejes, “funciona y está dando buenos resultados”. Sanz se ha referido, en especial, a la preparación y ejecución de planes operativos dirigidos a frenar y disminuir tipologías delictivas específicas, entre los que ha destacado el Plan contra el robo en viviendas -puesto en marcha en diciembre de 2012- y que ha dado como resultado entre 2013 y 2015 disminuyeran un 19% de los robos con fuerza en domicilio.

Igualmente, desde el despliegue de los equipos ROCA contra los robos en el campo, en septiembre de 2013, se ha experimentado una bajada del 29% en las infracciones penales registradas en explotaciones agrícolas y ganaderas de Andalucía.

Según ha explicado el delegado, los otros cuatro ejes del modelo de seguridad han sido, junto a los planes específicos, “el uso racional de los medios existentes”, que pone de relieve la eficiencia con la que se han empleado; “la profesionalidad” de nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que figuran “entre las instituciones más valoradas por nuestros ciudadanos”; el constante análisis de la realidad criminal y la prevención y anticipación delictiva.

Finalmente, el delegado ha destacado “el esfuerzo de transparencia” realizado durante la X Legislatura, con la publicación de los datos de criminalidad con carácter trimestral y en formato abierto; difusión de datos no solo a nivel nacional, sino también desagregados por Comunidades Autónomas, provincias, capitales de provincia, localidades con población superior a 50.000 habitantes y territorios insulares; inclusión de datos de policías autonómicas y policías locales, lo que permite realizar un examen y análisis más óptimo de la realidad delincuencial. Junto a ello, se han difundido informes periódicos sobre fenómenos delictuales, como delitos de odio, cibercriminalidad y delitos contra la propiedad industrial e intelectual.