En torno a 6.000 personas se han concentrado hoy en los alrededores de la Puerta del Puente, en Córdoba Capital, para tratar de hacer llegar un mensaje alto y claro a la cumbre de ministros de Agricultura de la UE y al comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Janusz Wojciechowski: Exigir un cambio en la política agraria europea que garantice el sistema alimentario y un modelo más profesional de la agricultura.
Eso, y ayudas europeas de los Next Generation, pensados para hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de la pandemia de la Covid-19, "para facilitar el acceso al agua de nuevas hectáreas que puedan poner en producción y garanticen esta trazabilidad y esa seguridad alimentaria que necesitan los ciudadanos europeos", en palabras de Ángel Villafranca Lara, presidente de Cooperativas Agroalimentarias de España.
Previamente, y como jugaba en casa, el presidente de Cooperativas Agrolimentarias en Córdoba, Rafael Sánchez de Puerta, ha sido el encargado de aplicar "la insatisfacción que tenemos con la agricultura en la UE", ya que en vez de incentivar, "se está cortando las alas para que deje de producir, se le demoniza y se le culpa de muchas cuestiones medioambientales que son radicalmente falsas, y, al final, lo único que se pretende es abrir las fronteras de la UE a terceros países y desmantelar la agricultura aquí".
Según Sánchez de Puerta, "todos sabemos que el cambio climático está aquí, y todos sabemos que si no se toman medidas todos nuestros secanos se van a abandonar, pero ante eso no se está haciendo absolutamente nada, y nos negamos a aceptar que las más de 4 millones de hectáreas de secano que tenemos en Andalucía sean abandonadas en muy poco tiempo".
Un mensaje similar es el que ha lanado Ángel Villafranca, quien ha recordado que las cooperativas son una parte importante del motor de la exportación española con la única intención de "seguir alimentando a los ciudadanos europeos", para lo cual se requieren de "políticas activas que permitan la rentabilidad de las explotaciones de nuestros asociados en la agricultura".
Por parte de las organizaciones agrarias que han organizado la concentración -Asaja, COAG y UPA, junto con Cooperativas Agroalimentarias- Miguel Padilla, secretario general de COAG, lo primero que ha indicado es que "no estamos en contra de Europa", pero sí de las políticas que se hacen en Europa con respecto a la actividad agraria. En su opinión, con la reconversión del modelo de producción y del modelo profesional, "que son a los que se están echando prácticamente a la calle", la situación en 109 años se va a agravar, ya que seis de cada 10 agricultores y ganaderos se van a jubilar y no hay relevo generacional".
Padilla ha lamentado, igualmente, la ingente cantidad de normativa europea que asfixia a la agricultura. "No podemos soportar esa presión normativa; todo lo que es el bienestar animal, la restauración de la naturaleza, de la granja a la mesa, análisis de suelo, miles y miles de normas... Y nosotros no somos delincuentes", ha señalado.
Su colega a nivel andaluz, Miguel López, lo ha dicho todavía más claro: "Este modelo no nos vale; queremos un modelo con calidad, con seguridad alimentaria, con trazabilidad, un etiquetado, que es lo más simple del mundo, para saber de dónde viene un producto".
López ha lamentado amargamente que las ayudas para la sequía del Ministerio de Agricultura hayan dejado fuera al olivar y a todo el regadío, en una situación económica lamentable con numerosos "autónomos están endeudados hasta las cejas". Por ello, "hay que dar una voz de alarma, porque lo que tenemos en juego es la alimentación y se la quieren dejar a los fondos de inversión y a los mercados financieros, que son los que están invirtiendo y haciendo grandes plantaciones de producciones superintensivas, donde se puede mecanizar y requiere de poca mano de obra".
Igualmente ha estado en la concentración el portavoz de Adelante Andalucía en el Parlamento andaluz, José Ignacio García, para "apoyar a los pequeños agricultores y ganaderos y al campo andaluz", y dejar ante la sociedad el mensaje de que "el campo andaluz no es de derechas". Frente a eso el Gobierno estatal y los ministros comunitarios "se han puesto de lado de Mercadona y de Carrefour", porque "no es normal que la diferencia en lo que se paga el kilo de ajos a los productores y lo que se le vende a las familias haya un 211% de diferencia o que el kilo de melones sea de un 300% de diferencia".
En su opinión, hay dos víctimas e la situación: Los productores y los consumidores. "No es normal que los productores de aceite no puedan pagar el coste de producción y, a la vez, las familias que están ahogadas no puedan comprar ese aceite andaluz", ni que "en plena sequía se mantengan 109 campos de golf en Andalucía y estén los agricultores con restricciones".
También ha hablado el presidente nacional de Asaja, Pedro Barato, quien ha asegurado que "es un día importante y debe ser el comienzo de un trabajo de todas las organizaciones agrarias para intentar modificar la atrocidad que se ha hecho en la política agrícola común con respecto a nuestro país".
Los ministros europeos "tienen que oír al campo español", que necesita "una política totalmente distinta", ha dicho Barato, quien ha agregado que "es una pena que tenga que estar el campo español permanentemente exigiendo poder trabajar", por lo que "hoy se le dice al gobierno de la Unión Europea y al ministro español, 'basta ya' y que hagan caso a los problemas que tiene el campo".
Entretanto, el vicesecretario general de UPA Federal, Cristóbal Cano, ha lamentado que, "poco a poco, el agricultor y el ganadero dejan de estar en el centro de las políticas europeas y nos preocupa la orientación que otros sectores productivos y que otros lobbies de influencia están teniendo".
La agroganadería es "una actividad esencial, una actividad que estamos dispuestos a hacerla de una forma sostenible porque a nadie se le ocurre que los agricultores y ganaderos le demos la espalda al medio ambiente, todo lo contrario, formamos parte del paisaje" y para ello "necesitamos la complicidad y los apoyos de las instituciones europeas".
Por último, el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Fulgencio Torres, ha reivindicado que el agua que piden los agricultores, ganaderos y cooperativistas "la utilizamos para producir alimentos" y no la "despilfarramos", porque es "un bien natural escaso". "Para nosotros el agua es la vida", ya que "una agricultura, una ganadería y sin agua no tiene futuro, está muerta".
De igual modo, el portavoz de Vox en el Parlamento Europeo, Jorge Buxadé, junto a la portavoz parlamentaria de Vox, Pepa Millán, ha exigido este martes "a las instituciones de la Unión Europea respeto a nuestros productores, a los agricultores y a los ganaderos" y "medidas de ayuda a un sector que está absolutamente criminalizado por la Comisión Von Der-Leyen durante toda esta legislatura" y que está "haciéndoles responsables de los males del planeta".
Buxadé ha señalado que dicha comisión "también se ha dedicado a firmar acuerdos comerciales que perjudican a nuestro campo", lo que ha provocado "una situación de falta de competencia leal y de competencia justa", todo ello "ahogando a nuestros productores con impuestos altos, restricciones, limitaciones, prohibiciones del uso de fertilizantes o fitosanitarios o, incluso, la adopción de medidas que directamente es la persecución a través de las inspecciones".
Además, el presidente de la Confederación de Cooperativas Agroalimentarias de la Unión Europea (Cogeca), Ramón Armengol, ha advertido esta mañana de la situación "compleja, sobre todo en los países del sur" de Europa, con "las altas temperaturas y la sequía", que hacen que "haya mucho nerviosismo en el campo", de ahí que vea "necesario implementar ayudas adicionales".
Según ha expuesto a los periodistas, "es normal que la gente proteste un poco", en relación a las protestas convocadas en el marco de la RIM en las puertas del Palacio de Congresos, donde se reúnen los ministros.
No obstante, ha comentado que desde su organización han trasladado al ministro "la necesidad de implementar más medidas de las ya anunciadas", de modo que "el Ministerio en España ha anunciado unas ayudas que se van a dar ya en octubre", si bien considera que "hay que acelerar", porque "hay casos y cultivos verdaderamente graves".
