El Plan de Gestión del Casco Histórico y la modificación del Plan Especial de Protección del Casco Histórico (Pepch) para la instalación de material fotovoltaica, "van a ir de la mano", toca vez que el primero de ellos fue ya adjudicado el pasado lunes a la unión temporal de empresas (UTE) Patrimonio Vino por 98.373 euros (el precio de licitación era de 120.000 euros), según ha indicado hoy la edil de Casco Histórico y Participación Ciudadana, María Luisa Gómez Calero.
"En breve se firmará el contrato y nos pondremos manos a la obra con la UTE a la que se le ha adjudicado para empezar a trabajar lo antes posible, y, de hecho, nos reuniremos ya la semana que viene", ha añadido la concejala.
En cuanto a la situación del cambio en el Pepch para poder instalar material fotovoltaica por parte de particulares y de comunidades vecinales, de modo que la factura de la luz salga algo más rentable, corresponde hacerse sobre un plan que tiene carácter de norma, por lo que entra en las competencias de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), ha recordado Gómez Calero. Se trata de una flexibilización sobre la que ya se está trabajando desde Gerencia para encajar esta demanda. "Se han dado ya todos los pasos para empezar hacer esas innovaciones necesarias en un proceso que se va culminar lo antes posible, a pesar de que tiene sus plazos de exposición pública y sus procedimientos", ha indicado la edil.
En cuanto a lo que se prevé que haga al respecto los técnicos encargados de elaborar el Plan de Gestión "es informarse, verlo y trabajar con los técnicos de la GMU", ya que la idea es "unificar todas las cuestiones relativas al Casco Histórico y que se recojan dentro de ese plan". Eso implica todas las innovaciones, las modificaciones o esa flexibilidad que se le quiere dar en el Casco Histórico dentro de esa normativa. Sn embargo, el Plan de Gestión "no viene a cambiar la normativa del Pepch, sino a integrar la normativa que hay con el resto de cuestiones que se tienen que analizar dentro del Casco".
Para ello habrá una colaboración estrecha entre técnicos de ambos planes "para que todo quede perfectamente integrado".
Según ha recordado Gómez Calera, el plazo de ejecución del Plan de Gestión es de 12 meses. "Las empresas que se presentaron respondían a una solvencia bastante buena y ahora los trabajos que queremos ver con ellos es cómo podemos adaptar ese cronograma, porque queremos trabajar lo antes posible", ha especificado la concejala. Para ello, hay que tener en cuenta que existen ya "muchos estudios elaborados y mucha comunicación que se pueden acoplar y pueden ayudar a rebajar ese plazo de entrega".
La idea es que en los primeros seis meses, la mitad del plazo, "tiene que haberse elaborado ya un buen borrador de gestión concreto", de modo que en los siguientes seis meses "se pueda debatir y trabajar mucho más, no con expectativas, sino con el documento real en la mano".
