BALONCESTO LIGA EBA

Ricki Caballero vuelve al Bball tras un año de experiencia en Primera Nacional

Puede jugar tanto como base como alero, con un buen tiro de tres puntos y rápido en el contra ataque, y en defensa es un jugador disciplinado, que trabaja bien sobre los contrarios.

BBall Ricky
photo_camera Ricki Caballero junto a Francisco Gutiérrez, presidente de Smurfit Kappa Bball Córdoba

Tras la ya anunciada renovación de Luis Rodríguez como base del Smurfit Kappa Bball Córdoba de baloncesto, el equipo que dirigirá José Antonio Santaella recupera uno de sus hijos pródigos. Ricardo Caballero Sánchez (Córdoba, 18 noviembre 1996), escolta de 1,88 metros de altura y formado en todas las categorías de formación de Bball Córdoba, regresa al equipo que lo vio crecer, tras su paso por el Écija Basket Club de Primera Nacional, equipo en el que recaló la pasada temporada tras haberla comenzado en Bball Córdoba de liga EBA.

Preguntado por su retorno a Bball Córdoba, Ricki ha afirmado que "Estoy muy contento de poder volver al club en donde he crecido como jugador después de haber estado un año en Écija". Y es que la experiencia de un año en Primera Nacional le ha venido muy bien y llega al club cordobés "con muchas ganas de empezar a trabajar y poder ayudar en lo máximo posible al equipo para cumplir los objetivo marcados de la temporada".

Respecto al entrenador elegido para el nuevo proyecto repleto de gente joven, Ricki lo ha calificado de "acierto" por su conocimiento de los jugadores locales "y me parece una persona muy profesional con su trabajo, por ello espero aprender lo máximo posible de sus consejos como entrenador".

El jugador ha mostrado su esperanza de que "sea una temporada buena tanto colectivamente habiendo cumplido los objetivos del club como individualmente. No será fácil, pero con trabajo y sacrificio todo puede salir adelante”.

Ricki es un jugador versátil, ya que puede jugar tanto como base como alero, con un buen tiro de tres puntos y rápido en el contra ataque. En defensa, es un jugador disciplinado, que trabaja bien sobre los contrarios.