La reunión mantenida esta tarde en el Ayuntamiento entre responsables del gobierno local, la Junta y la Agrupación de Cofradías ha dado como fruto un protocolo para, a pesar de que sigue vigente la no recomendación por parte de la Junta de realizar este tipo de procesiones, una vuelta "prudente y gradual" de los cultos religiosos a la calle, según ha señalado el alcalde, José María Bellido (PP).
Básicamente, ese protocolo consiste en hacer los recorridos por las calles más anchas, evitando, así, estrecheces que pudedan abocar a aglomeraciones de público; recorridos más cortos, y, por ahora, que se saquen los pasos en andas, como ocurre en la Santería lucentina, o parihuelas. Además, el regidor ha incidido en que hay que cumplir la normativa sanitara vigente y publicada en el BOJA en lo que respecta a bandas de música, así como en el resto de medidas de distancia social tanto por parte del cortejo como para los que lo vean desde fuera.
Se trata de un paso "importante", por lo que implica de recuperación del culto en la calle, y se trata una medida gradual y transitoria, que se verá revisada cada mes o cuando se produzcan cambios sustanciales en los niveles de alerta o si la Administración sanitaria así lo estima en cuanto a criterios a seguir respecto a las procesiones.
Las medidas están en vigor en este mes de septiembre, salvo que haya cambios sustanciales en los niveles de alerta, ha añadido el regidor.
