El colectivo cordobés en defensa del patrimonio Nodo Corduba ha remitido un comunicado con las múltiples deficiencias que existen en la zona del Casco Histórico, del que dicen "se está muriendo", tanto a nivel de limpieza, como de infraestructuras, urbanismo y seguridad. "Desde el Consistorio creen que somos pesimistas y que no vemos la realidad", han señalado en la nota, para añadir que "quizá a los pocos vecinos que ya quedamos, unos 29.000, nos haga falta unas gafas de amplia graduación".
Según la misma fuente, en materia de limpieza los contenedores están "sucios y apestosos tras pasarse semanas sin limpiar"; las papeleras las han retirado, de modo que "las ventanas de nuestras viviendas son ahora papeleras"; las farolas "con los cristales llenos de roña" y hay calles que son "boca de lobo por falta de luz".
A eso se le añaden calles sucias y las barredoras con los cepillos levantados; el baldeo incluye las fachadas, puertas y locales y "se aplica muy poca escoba".
Las deficiencias en infraestructuras parten de aceras intransitables, calzadas deterioradas, socavones constantes que se "parchean con mero alquitrán", y no existe un equipo de mantenimiento que se ocupe de ir revisando los desperfectos de nuestras calles, lo que supone "una promesa sin cumplir por parte de la Delegación del Casco Histórico".
En cuanto a urbanismo, Nodo Corduba habla de viviendas y solares abandonados y en estado ruinoso "llenos de ratas y suciedad"; deficiencia energética; falta de aparcamientos; ausencia de zonas verdes ningún equipamiento infantil.
La cuarta pata es la seguridad, y ahí el colectivo indica que "constantemente nos están robando en nuestros negocios"; hay falta de agentes del orden que controlen a "esos ladrones que están identificados por parte de los comerciantes"; se reclama la apertura de la Comisaría conjunta no sólo los días laborales, sino también los días festivos, "ya que los chorizos no descansan", al tiempo que se preguntan "¿dónde está la Policía Turística?", para responderse que fue sólo "una pantomima para llevar a Fitur".
Frente a todas esas deficiencias Nodo Corduba considera que el Casco Histórico tendría que ser un modelo de limpieza, "envidiado por sus calles arregladas, por sus viviendas pintadas, sus jardines y por sus vecinos". Y es que, por ejemplo, esos solares abandonados "bien podrían ser viviendas, aparcamientos y zonas verdes, y dejarían de ser una imagen de absoluto abandono".
Se busca con todo esto "recuperar la esencia y el motivo real por lo que se nos dio la catalogación de Patrimonio, en 1994, y que son sus vecinos", que "no pueden ni deben ser expulsados por apartamentos turísticos, restaurantes, locales de ocio o por el exceso de actividades, sean de la índole que sean, y todo esto consentido por los responsables del Consistorio".
Por ese motivo, la vecindad tiene derecho al descanso, a acceder a sus viviendas sin que una actividad lúdica se lo impida, a vivir, a descansar y a ser respetados, porque "no somos un decorado de una película". Remata la nota de Nodo Corduba diciendo que "por todas esas 'pequeñeces' de las que nos quejamos a nuestro Consistorio, modelo de empatía vecinal, éste nos dice que tenemos una visión de nuestro Casco Histórico negativo".