Opinión

El cambio debe reflejarse en los presupuestos

Con el nuevo curso político que comienza en septiembre, los gobiernos municipal y provincial deben poner en marcha los mecanismos necesarios para la aprobación de los presupuestos municipales de 2016. Unos presupuestos que no deben defraudar las expectativas que la ciudadanía ha puesto en gobiernos de progreso y en los que tienen que verse reflejadas las nuevas políticas que han de ser la base del impulso de la economía de nuestra capital y de la provincia, al tiempo que se da cobertura a aquellas personas y núcleos familiares más desprotegidos.

La situación de emergencia social que se vive en nuestra provincia, con cerca de 35.000 hogares donde todas las personas activas se encuentran desempleadas, está suponiendo muchos problemas habitacionales o de suministros de energía y agua, a los que hay que dar una respuesta de forma inmediata contando con el concurso de las administraciones autonómica y central.

Un empleo digno, de calidad y estable es el derecho reconocido en nuestra carta magna que debe permitir a las personas acceder a esos mínimos básicos sin necesidad de acudir a la caridad. Por ello, es fundamental que las administraciones impulsen políticas que posibiliten el desarrollo social y económico en su ámbito, así como una redistribución más equitativa de la riqueza y de los esfuerzos que las personas, las empresas y las instituciones tienen que realizar para recuperar y fortalecer los servicios públicos fundamentales y que permitan un acceso igualitario para todo el mundo.

Desde CCOO creemos que, cuanto antes, se deben iniciar los contactos para fijar las líneas que se van a desarrollar por parte de dichas administraciones.

Hemos vivido cuatro años en los que el PP ha obviado a los agentes sociales y a la ciudadanía a la hora de elaborar las herramientas fundamentales de las que disponen para desarrollar las políticas públicas y su repercusión en la economía y en la vida de la ciudadanía, excepto en aquellos casos en los que no tenía más remedio que consultar con los órganos de participación, como es el caso de Córdoba, ya que el Consejo Social tenía que emitir informe preceptivo en éstas y otras materias.

En este sentido, desde CCOO creemos que, cuanto antes, se deben iniciar los contactos para fijar las líneas que se van a desarrollar por parte de dichas administraciones.

La Diputación debe poner en marcha mecanismos de participación social en los que se puedan debatir las políticas presupuestarias, económicas, de igualdad, de desarrollo económico y social con las organizaciones principales de la sociedad cordobesa provincial. Recuperar la concertación provincial con las organizaciones sindicales y patronales mayoritarias, así como con aquellas otras organizaciones sociales que sean representativas en diversos ámbitos de la sociedad, debe ser una de las tareas que el equipo de gobierno de la Diputación debe ponerse a elaborar.

Dentro de ese contexto, la recuperación del Consejo Económico y Social, que el PP hizo desaparecer durante su mandato, y que estaba anclado en los acuerdos de concertación que se habían firmado con las organizaciones sindicales y patronales más representativas, tiene que verse reflejado en los presupuestos para 2016, iniciando las conversaciones para su desarrollo lo antes posible.

También el gobierno municipal de Córdoba capital tiene que poner en marcha nuevas iniciativas. Iniciativas que tienen que poner bases lo suficientemente sólidas para garantizar un desarrollo armónico y equilibrado de la ciudadanía cordobesa.

La participación de la sociedad en la política municipal es un elemento que ha caracterizado a Córdoba durante muchos años y que en esta última etapa, gobernada por el PP, ha brillado por su ausencia. Se han dilapidado por parte de la derecha unos mecanismos de participación que habían surgido de la lucha y el esfuerzo de la sociedad cordobesa organizada en sus diferentes ámbitos territoriales y sectoriales desde los tiempos de la dictadura, y que se concretaron en escenarios participativos cuya importancia trascendía nuestros límites geográficos

El gobierno municipal de Córdoba debe liderar las alianzas necesarias con los agentes sociales más representativos para que, junto con las administraciones públicas provincial, autonómica y estatal, establecer foros que permitan consensuar el diagnóstico de la situación, los instrumentos y los mecanismos de evaluación, para estimular el desarrollo económico y social de Córdoba.