Opinión

Hoy celebramos el Día Internacional del Pueblo Gitano, en plena crisis sanitaria y económica del Covid-19

Ceremonia del Río por el Día Internacional el Pueblo Gitano

Un año más, como 49 veces lo hemos hecho antes, celebramos el Día Internacional del Pueblo gitano y rememoramos el Congreso Mundial roma/gitano celebrado en Londres en 1971 en el que se instituyeron la bandera y el himno gitanos como símbolos universales de nuestra larga historia y nuestra cultura, permanentemente marcadas por la metas de Justicia e Igualdad.

En primer lugar, desearos desde la Federación Kamira que la salud os acompañe a todas y todos vosotros y a vuestras familias, a la vez que enviamos un sincero y emocionado abrazo a todas las familias que han perdido a sus seres queridos. Hoy, 8 de abril, día en que los gitanos conmemoramos el holocausto y honramos a todos los gitanos que cayeron víctimas del nazismo, manifestamos nuestro hondo pesar por todas las victimas de este odioso virus, y queremos expresar para todas ellas nuestro profundo reconocimiento. Hoy también los honramos a ellos.

Estamos viviendo momentos muy duros y atravesando una situación impensable para todos. Por eso, este año, el 8 de abril será distinto, no saldremos a la calle con las banderas gitanas, ni podremos ir a celebrar la Ceremonia del Río para arrojar flores y velas en memoria de los que no están, y para simbolizar nuestro amor a la libertad. Este año, sufrimos una crisis sanitaria sin precedentes, que está cambiando nuestra manera de actuar, y tras la que probablemente nada sea igual. O casi nada.

Sin embargo, pese a lo terrible que es esta pandemia, que está poniendo en jaque el modelo de sociedad actual, no podemos dejar de decir que nos sentimos orgullosos de esta sociedad y de los valores que la representan, y que en esta situación de emergencia, afloran día a día. Y es que todos los días vemos muestras de solidaridad, de generosidad, de ingenio, expresiones de la capacidad de sacrificio y de esfuerzo tanto a título individual como colectivo, anteponiendo el bien común al particular. Y en estas muestras no distinguimos ni a gitanos, ni a no gitanos porque las encontramos por igual, y con la misma generosidad. Y estas muestras constituyen un consuelo para todos nosotros en los momentos mas difíciles, y hacen que nos demos cuenta que pertenecemos a un gran País y que merece la pena pelear por nuestro modelo de sociedad, el que hemos elegido y defendemos.

No nos cansaremos de agradecer a nuestros sanitarios, a esos hombres y mujeres 'héroes' el ímprobo esfuerzo que están realizando estos días para cuidarnos a todos y cómo se están dejando la piel. De la misma manera que a todos los voluntarios, a las fuerzas y cuerpos de Seguridad... A todos los que luchan personalmente contra los efectos de la pandemia.

Si queremos hacer mención de la generosidad de aquellos/as que, como es el caso de muchos gitanos/as se encuentran en situaciones de extrema pobreza, sin apenas recursos o con medios de sustento absolutamente limitados por el decreto del estado de alarma, a pesar de lo cual cumplen, como la mayoría de ciudadanos, con las obligaciones derivadas del mismo. Para ellos, para los más vulnerables, instamos a las autoridades nacionales, autonómicas y locales a que pongan en marcha a la mayor brevedad los planes de ayuda urgentes que son tan necesarios. Para ellos necesitamos una rápida respuesta.

Hay quien aprovecha esta y otras crisis para difundir falsas noticias, haciendo acusaciones infundadas o simplemente sembrando la duda, con el objetivo de culpabilizar al pueblo gitano señalándolos como culpables por saltarse las medidas tomadas para todas y todos, propagando de esta manera el virus. No es la primera vez que ocurre, en épocas de crisis se arremete sistemáticamente contra los colectivos más vulnerables, criminalizándolos sin más motivo que pertenecer a uno de estos colectivos, como es el gitano, intentando señalarlo, culpabilizarlo y estigmatizarlo. Y a evitar esto no ayudan determinados medios de comunicación, afortunadamente, los menos. Al respecto, como sabéis, esta Federación utilizará todos los medios a nuestro alcance para combatir estas conductas, y que sean los tribunales quienes tengan la última palabra.

Hoy no podemos olvidar a nuestros niños y niñas, ni nuestra profunda preocupación por su formación. Se deben articular los mecanismos necesarios para que el alumnado más desfavorecido, gitano y no gitano, aquellos que no tienen acceso a internet, ni a la formación on line, puedan terminar el curso escolar, como el resto de alumnos, con las mismas oportunidades. No podemos privarlos de lo más importante para ellos, en esta etapa, su educación.

Como decíamos al principio, éste será un 8 de Abril diferente. Estaremos lejos de nuestros hermanos y hermanas, de nuestras familias y compañeros de lucha. Este año no arrojaremos flores para que discurran libremente por las riberas, ni depositaremos velas que iluminen con su luz el agua. Este año estaremos lejos de las orillas de los ríos, confinados en nuestras casas, pero pronto, volveremos. Volveremos para recordar la orgullosa historia de resistencia y esfuerzo de nuestro pueblo y a las víctimas gitanas del holocausto nazi, casi siempre olvidadas. Volveremos mas fuertes, una vez superada la adversidad que ahora combatimos .Volveremos para arrojar flores y simbolizar aquello que es tan importante para nosotros.

Hoy más que nunca SALUD y LIBERTAD