Opinión

El regreso de los privilegiados

¿Permitirá este gobierno local gracias a #ElPactodelCabildo que el patio de los naranjos se privatice por parte del cabildo? ¿A qué viene el cambio de taquillas al palacio episcopal? ¿No existe ya un centro de recepción de visitantes?

El ritmo de concesiones y permisos por parte del PP en el Ayuntamiento es obsceno. Será una forma de gobernar, pero es sectaria y servil, no iguala a ciudadanos sino que polariza y mientras muchos vecinos y empresas esperan meses interminables un permiso, #ElPactodelCabildo agiliza para algunos esta espera.

Es más que evidente, y no hay pudor en sus declaraciones, que tanto Obra pía como Cabildo demuestran claramente su agradecimiento ante las iniciativas desbloqueadas por el actual equipo de gobierno municipal.

Tal como dice Córdoba Laica nos sumamos a la preocupación por la intolerancia y la falta de respeto hacia el derecho constitucional de todas las personas, independientemente de sus creencias, a ser tratadas en igualdad por las institucionesy a que estas preserven el uso general y no sectario de los espacios públicos ante el confesionalismo exacerbado mostrado por el gobierno municipal en los últimos meses, evidenciado en la foto del obispo y el alcalde en el Ayuntamiento en el comienzo de la legislatura, y con actuaciones como las que evidenciamos.

Queremos demostrar además, en cuanto a la utilización de nuestro patrimonio histórico y cultural, que el Cabildo catedralicio ha intensificado en los últimos años y más ahora con la connivencia y permisividad del cogobierno local y ante la pasividad de la Junta de Andalucía, la ocupación injustificada, insistente y sin criterio museístico de un monumento excepcional como es la Mezquita de Córdobaque merece una gestión profesional respetuosa con los valores reconocidos por la Unesco como testimonio irreemplazable de la civilización del Califato de Córdoba. En este sentido, la propia UNESCO recomienda que los bienes del Patrimonio Mundial se doten de planes de gestión y órganos rectores que regulen adecuadamente los usos del monumento conforme a criterios culturales, NO CONFESIONALES.

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Nos hacemos eco y afines totalmente a las demandas de la Plataforma Mezquita-Catedral, Patrimonio de Todxs cuando acusa al obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, de haber "inundado la totalidad del Conjunto Monumental Mezquita-Catedral con decenas de pasos de Semana Santa (en diversas y cada vez más asiduas ocasiones) en un nuevo despropósito contra el más relevante edificio del patrimonio histórico andaluz y cumbre de la arquitectura andalusí", tal como reconoció la Unesco en su designación como Patrimonio Mundial en 1984.

Esta plataforma cuenta con el respaldo de 400.000 firmas.

En conclusión, han regresado los privilegiados al consistorio local y están influyendo decisivamente en políticas locales, subvenciones, permisos y cambios en el patrimonio y su gestión.¿A qué precio ha vendido su alma al diablo este cogobierno de derechas? ¿Cómo va a afectar al futuro sostenible, democrático y contra la desigualdad en nuestra ciudad?