Opinión

Artículo Periodístico 4.084º: 'Redes de artistas plásticos y Mail Art'

Siguiendo la idea del Mail Art se podrían crear convocatorias en las cuales los autores plásticos, en papel, con un tamaño máximo pudiesen enviar dibujos, pinturas, grabados...

La realidad es que existen miles de autores y autoras plásticas en cada territorio, sociedad, Estado que se dedican a la creación y autoría plástica, uno o diez o treinta o cincuenta años de su existencia. Que realizan algunas exposiciones, que pueden ganar algunos concursos o premios, que pueden vender algunas obras, pero la realidad es que apenas tienen mención, porque son muchos los llamados y pocos los escogidos...

El mundo del arte está formado por una especie de pirámide, arriba, los coleccionistas y museos y compradores son un número limitado, pero abajo en la base, están formado por cien o por mil veces más autores y creadores que compradores. Por consecuencia, siempre se produce una inflación de obras y de producción, con respecto a la venta posible y real. No hay que ofenderse con nadie, ni contra nadie. Es como todo producto mercantil, si existe mucha producción de tomates o de sardinas o de patatas, los precios disminuyen, incluso, para mantener los precios se tiran al mar parte de la producción o simplemente no se recoge –otra cuestión es si es moral o no, dejar que los alimentos no se recojan, estando la situación mundial como está, pero también, el productor indica, que no puede cosechar si va a tener pérdidas económicas–.

Pues algo semejante, sucede con el mundo del arte plástico, y, también el literario, y, otras realidades. Pero por ejemplo, en la música, hasta dónde sé, existen en nuestra Península Ibérica, dos o tres centros documentales y archivos, que toda producción musical, partituras y composición que cualquier persona realice, puede enviar una copia, incluso aunque sea modesta en fotocopias, y la catalogan y la archivan. Pero en las artes plásticas y en las literarias y en otras, mucha producción cultural, las obras están condenadas a la desaparición, pérdida, deterioro, olvido en cajones y depósitos, que con el tiempo, la finalidad última es la nada.

Los museos o fundaciones municipales o provinciales o regionales podrían ir conservando, recibiendo en donación gratuita, obras plásticas en papel, con un tamaño y grosor máximo, de todos los autores y autoras de esos autores –dibujos, pinturas, grabados, fotografías, etc.–. Y, sería la base de documentación y arte de dicho territorio para el futuro...

Comprendemos y entendemos que los museos y fundaciones y archivos no puedan conservar y guardar todo lo que se produce, ni siquiera, aunque se lo regalen y en donación. Pero sí puedo pensar que se podrían crear entidades en los que los autores que quisieran, sin selecciones previas, pudiesen enviar en donación gratuita, obra en papel –dibujos, pinturas, grabados, fotografías...–, con un tamaño máximo. Para que así, quedase algo de la producción de miles de autores y autoras, que de otro modo se perderán, casi toda la producción y los nombres, en la inmensa mayoría de los casos que es lo que está sucediendo. Podría ser por territorios.

Los museos y fundaciones y colecciones actuales podrían crear Archivos Documentales Virtuales, que al menos, en una página introducciones a autores diversos, con un mínimo de biografía y enlaces a páginas de los autores y autoras, dónde se podrían ver parte de la producción. En general para las artes plásticas, o por géneros, o por territorios...

Pero aquí estamos planteando, al estilo del Mail Art, o algo semejante, en sobres podrían insertarse y enviarse, creándose convocatorias de artes plásticas, sin selecciones previas, que se expondrían, y, que serían obras en papel, con un tamaño máximo, y un grosos máximo. Y, así se podrían ir coleccionando obras plásticas en papel, de todos los autores que quisiesen enviarlas. Y, así ir creando colecciones. Los autores no cobrarían nada, los convocantes las conservarían y no pagaría nada por ellas, se haría una pequeña exposición. Siempre respetando la legalidad vigente en cuanto a las normas de correo y sobre el movimiento de las obras de arte, y, otras de dicha sociedad...

Incluso se podría crear redes de comunicación entre autores, que se podrían enviar obras en papel, con un tamaño máximo y un espesor máximo, de unos autores a otros, y, así, se podrían ir formando colecciones particulares de todos los que se dedican a este mundo y en este mundo. Que después conservarían guardadas en cajas, o algunas puestas en las paredes de sus casas. El autor o autora que las envía no cobraría nada, el que las recibe no tendría que pagar nada. Y, se comprometen a intercambios.

También obras por Mail Art, serían obras en papel, dobladas en dos o tres o cuatro partes, con un tamaño estándar del correo normal, que por dentro estaría dibujada o pintada o sería un grabado o una fotografía, y, por fuera, tendrían los sellos normales del correo tradicional y oficial, y por dentro, formarían y conformarían obras concretas de arte. Podrían hacerse exposiciones o convocatorias, se seleccionaría todo, no se cobraría nada, y, todas las condiciones del Mail Art... Quizás, solo podrían enviarse dentro de cada país o sociedad, y, siempre hay que cumplir la legislación vigente en todos los sentidos…

Creo que existen cientos y miles de autores/as de arte plástico en cada territorio, que han dedicado diez o treinta o cincuenta años de su existencia, que han realizado cien o mil o diez mil obras de arte, y, saben que lo más probable que gran parte de su producción se irá perdiendo o ya en vida lo ha estado haciendo. Eso de que Van Gogh vendió un cuadro en toda su vida, sea cierto o no lo sea. Es una realidad, más de lo que pensamos...

Miles de autores y autoras plásticos no pueden entrar en los circuitos oficiales de arte, en galerías profesionales y particulares, en museos o fundaciones, pero desean y han hecho cientos de obras. Pienso que esas personas, realicen arte de primera calidad o de quinta o de décima, pueden y tienen derecho que algo, lo suficiente, de su producción pueda permanecer para el futuro... Creo que es una cuestión de equidad y de justicia... Sólo hay que buscar formas y maneras, y, éstas aquí indicadas pueden ser algunas. Ahora sólo queda que alguien recoja el guante de colores...