Opinión

Artículo Periodístico 2.072º: 'Red de ciudades cervantinas'

El fin de la esta entidad es una interrelación entre Cervantes, sus obras y diversos lugares, que por su biografía se conocen que habitó o que mencionan en su producción o por iniciativa de entidades. Hasta ahora existen una veintena de ciudades, entre otras Alcalá de Henares, Azul, Valladolid, Montevideo, Córdoba, Argamasilla de Alba, Baeza, Madrid, Barcelona, Lisboa, Esquivias, El Toboso, etc.

Entre otros muchos objetivos es difundir la obra de Cervantes, y el conocimiento de su biografía y su producción cultural con una diversidad de actividades culturales de todo tipo. Diríamos que esta bajo el patrocinio de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.

Esta iniciativa está abierta a que nuevos lugares o aldeas o pueblos o ciudades se inscriban, incluso ciudades que por diversas razones no están directamente relacionadas con la biografía de Cervantes, ni con la mención de y en sus obras. Por ejemplo, Guanajuato que dispone de uno de los mejores museos de arte o icnográfico sobre El Quijote podría pedir la admisión.

Cervantes que tuvo una vida compleja, y que diríamos fue muy andarín, comparado con la media de la población de su tiempo, pueden que muchos lugares, puedan realizar actividades especiales, realizar pequeños museos o centros documentales sobre la obra y el autor, e intentar inscribirse en esta entidad de estudio y difusión de dicho autor.

En la Edad Media, las reliquias de los santos y santas, además de su sentido religioso y espiritual y de búsqueda de salud, porque existían reliquias para todas las necesidades humanas, también era una fuente económica y de turismo, de producción de empleo, y por consecuencia, digna de vivir y para existir los seres humanos en el mundo, o al menos algunos. En pueblos y ciudades pequeñas, como generalmente están instalados estos enclaves, al menos de la mitad de los existentes antes mencionados, las administraciones públicas y privadas de esos entes territoriales se podrían esforzar, en incentivar esta idea y esta sugerencia…

También indicar, que quizás otras rutas artísticas culturales, sean literarias o sean plásticas, sea de Quevedo o Lope de Vega, sea del Greco o de Velázquez, sea de cualquier autor o autora plástico o literario o musical podrían copiar esta idea, y empezar a realizar diríamos, los primeros pasos en este sentido, ciudades o lugares o museos o aldeas que tienen especial interrelación con uno o varios autores, sea de la actividad cultural que sea. Especialmente en territorios que no tienen playas, no tienen grandes infraestructuras museísticas y turísticas, como es media Península Ibérica podría ser una pequeña razón de turismo cultural y por consecuencia, relacionar estos hechos y datos y acontecimientos culturales estéticos o artísticos, con otros, como la gastronomía, el paisaje, las fiestas populares, otros museos de otras temáticas, etc.

España está llena, casi en cualquier lugar, de palacios, casonas, monasterios, conventos sin habitar, o a punto de dejar de tener su finalidad principal. Por lo cual, todos estos edificios son propensos para tener una segunda vida, y además de hoteles y otras finalidades, que se les está dando, podrían tener una segunda vida cultural, sean bibliotecas, museos, fundaciones artísticas y culturales, etc. Quizá, ahora estamos a disposición.

En mi modesta percepción de la realidad, una colección o esta iniciativa o similar, puede empezar, esencialmente de dos maneras o formas, que se pueden combinar, primero, con una idea o iniciativa equis, pongamos por caso, en este ejemplo, con algo en relación al Quijote, y se empiezan a coleccionar, pequeñas piezas según la idea o motivo o razón; segundo, con una idea o sugerencia, pero también, desde el principio con un pequeño lugar, aunque sean dos habitaciones de una casa de cultura, o de un ayuntamiento o de otra entidad municipal o local.

Las dos maneras o formas, si existe dicha iniciativa o fin, si existe un pequeño grupo de personas que quieren llevar a cabo dicha realidad. Aunque empiece de forma muy modesta, con el tiempo, puede ir creciendo en todos los sentidos, coleccionar más piezas, conseguir un lugar de habitabilidad mayor, realizar actividades, recibir donaciones particulares, realizar pequeñas compras, etc.

También es cierto, que en algunos casos, no minoritarios, se han recibido en donación una biblioteca o colección de alguna persona, que quiere que el trabajo de estudio o de acumular obras sobre un autor, en este caso sea El Quijote o de las obras de Cervantes, quiere y desea que dichos cientos de referencias queden unidas. Por lo general, se lo donan al ayuntamiento de su pueblo o ciudad, para que lo gestione. En este caso, la ciudad que ha recibido este legado, que puede estar abierta más o menos a esta iniciativa, podría ayudarla e incentivarla y recrearla, por la diversidad de razones antedichas.

Hemos hablado de algunos aspectos del Quijote y del Cervantes, pero nos hemos olvidado de dos aspectos: uno, que la literatura nos intenta enseñar a vivir y a reflexionar. Segundo, que dichas ciudades podrían empezar los pasos para que la Unesco considere una ruta como Bien Inmaterial de la Humanidad, con el título de las ciudades del Quijote en el mundo, o considerarlas como Ciudades Creativas de la Unesco o Ciudades de Aprendizaje de la Unesco o Ciudades de la Literatura o MOW como Programa del Mundo…

- ¡Ahí dejo el guante, amigo Sancho, dijo El Quijote, para si alguien recoger este lance y ponerlo en práctica en siglos venideros!

- Mi señor Quijote, pero los hombres tenemos la cabeza muy dura, y no distinguimos muchas veces el día de la noche, ni la tarde de la mañana, ni lo bueno de lo malo.

Y los dos se marcharon por la mancha amarilla de la Mancha curando entuertos…