El Consejo Rector de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) aprobará el próximo miércoles el inicio del expediente de resolución del contrato para la obra del edificio de La Normal, que se quedó supuestamente ejecutada en un 90%, según la certificación última de obra, y que, en palabras del presidente del organismo público municipal, Pedro García (IU), en unos tres meses, aproximadamente, "la cuestión se quedará resuelta" para rematar esas obras.
Eso no significa, no obstante, que para este mandato, La Normal pueda empezar a funcionar de cara al público, ya que ahora el expediente, fruto del desacuerdo con la constructora, Vías y Construcciones, para llegar a una acuerdo, permanecerá unos días en fase de exposición pública, para que luego el informe se lleve al Consejo Consultivo, que, a su vez, tendrá un mes para resolver el caso. "Es complicado que en lo que queda de mandato se pueda inaugurar", ha explicado García, por no decir imposible, ya que las resoluciones son procesos administrativos complicados y queda, además, por volver a adjudicar la obra, mientras que para que se termine el mandato el plazo restante es de cinco meses.
Abrir con garantías
"Pero lo que sí hay que hacer es darle impulso para que se finalice bien lo antes posible y que se pueda abrir con todas las garantías" en un próximo mandato, gobierne quien gobierne, ha expuesto, por su parte, el gerente de la GMU, Emilio García.
Las obras, tal y como ha recordado el primer teniente de alcalde, ha arrastrado consigo muchos problemas y se encuentra ejecutada al 90%, aunque nunca llegaron a recepcionarse. Además, le restan cuestiones de remates e instalaciones y derivados de la no ejecución adecuada o sin finalizar del todo en algunas partes importantes que habrá que arreglar en la liquidación.
Las obras, incluidas en el Plan Urban Sur y con 5,2 millones de euros de inversión, comenzaron en enero del 2014 con plazo hasta abril de 2015, tal y como se especifica en el cartel de obras que aún está en el frontal del edificio, pero se paralizaron. Con unos 6.000 metros cuadrados, el nuevo espacio acogerá zonas para los vecinos, un centro de producción e iniciativas, una biblioteca, salón de actos y hasta una zona de I+D+i.
