PARTICIPACIÓN CIUDADANA

El Consejo del Movimiento Ciudadano urge a una hoja de ruta para el Distrito Sur

El Consejo de Distrito Sur tiene que participar en su elaboración
Reivindicación vecinal a las puertas de La Normal, en el Distrito Sur
photo_camera Reivindicación vecinal a las puertas de La Normal, en el Distrito Sur

El Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC) se ha dirigido al gobierno municipal para que ponga en marcha antes de que acabe el mes de julio la moción que se aprobó en el último pleno municipal sobre medidas a aplicar en el distrito sur. Esa moción tiene que transformarse en una hoja de ruta que determine cómo se van a ir aplicando los acuerdos adoptados evitando que la moción quede en papel mojado. El CMC entiende que debe aprovecharse la unanimidad en la aprobación de la moción para impulsar los distintos proyectos que el distrito sur necesita para empezar a sacar a los barrios que lo conforman de su situación de pobreza.

Para el CMC, lo primero que debe suceder es que el gobierno local se reúna con el consejo de distrito para pactar esa hoja de ruta, que solo será eficaz si se cuenta con los distintos colectivos vecinales, sociales, sectoriales, deportivos, ... que estructuran la sociedad del distrito. Hay que actuar en el distrito sur pero contando con el vecindario del distrito, haciéndolo protagonista de su propia realidad y no aplicar medidas ajenas a lo que el propio distrito demanda. No son necesarios más estudios ni diagnósticos, solo hay que impulsar los proyectos que el sur de nuestra ciudad viene requiriendo desde hace dos décadas.

El distrito sur necesita de proyectos que cubran las necesidades de sus habitantes pero que el mismo tiempo sean atractivos para el resto de la ciudad, de tal forma que los puentes sobre el río sean elementos de encuentro y no de separación. Abrir de forma completa el edifico de la antigua Normal, especialmente de su biblioteca; crear una equipamiento deportivo de calidad, en torno a una piscina cubierta, en el antiguo solar del Polideportivo de la Juventud; rehabilitar el antiguo campo de San Eulogio, completándolo con otros equipamientos; definir un nuevo proyecto cultural sobre el solar del Palacio del Sur junto a un centro de interpretación del arrabal de Saqunda; y recuperar el proyecto de Museo de Bellas Artes junto a la Calahorra, o los molinos del río, son proyectos que, por un lado estructurarán el distrito, generarán vida ciudadana y economía y serán un atractivo para el resto de la ciudad.

Mientras que se define esa hoja de ruta participada, temporalizada y con financiación definida, el distrito necesita mejorar su accesibilidad y su movilidad, recualificando sus calles y plazas. También hay que incrementar la inversión social haciendo útil la estrategia Eracis combatiendo los niveles de pobreza. Hay que dignificar el barrio incrementando la limpieza, cuidando sus solares y manteniendo sus zonas verdes. Y hay que generar espacios de ocio sano como alternativa a la proliferación de salas de juego. Hacer realidad obras como la del Paseo San Julián y seguir rehabilitando calles en los distintos barrios mejorarán la calidad de vida y la imagen del distrito.