COLEGIO OFICIAL DE FARMACÉUTICOS

Más de 6.000 cordobeses adultos podrían sufrir insuficiencia cardíaca

Algunos de los síntomas más frecuentes son la disnea, la ortopnea (dificultad para respirar al estar acostado), la disnea paroxística nocturna, la disminución de la capacidad para tolerar el ejercicio, el edema o la fatiga, entre otros
Prueba cardiaca
photo_camera Prueba cardiaca

Entre un uno y un dos por ciento de la población adulta en países desarrollados sufre insuficiencia cardiaca, un dato que en la provincia de Córdoba se traduciría en más de 6.000 afectados y afectadas, dato que se multiplicará a medida que avanza la edad, ya que la prevalencia de esta dolencia se sitúa en un 10% entre las personas de 70 o más años.

A fin de favorecer un mejor control de esta patología –que suele presentar altas tasas de hospitalización y una elevada mortalidad– mediante el manejo de las algunas de las últimas opciones terapéuticas disponibles y la prevención de cuadros agudos, los farmacéuticos cordobeses han mejorado sus destrezas profesionales en este ámbito de la mano de la actividad 'Actualización en Insuficiencia Cardiaca', organizada en colaboración con Novartis.

"En los últimos años hemos asistido a un progresivo interés por esta dolencia, dado que se trata de un problema de magnitud creciente, debido en parte al envejecimiento de la población y también a la existencia de nuevos y más efectivos tratamientos para ciertas enfermedades de corazón que conlleva a que algunos enfermos, sigan viviendo con una función cardiaca deteriorada", destaca el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Córdoba, Rafael Casaño.

La mortalidad por insuficiencia cardiaca excede a la de la mayoría de los cánceres, sólo superada por la del cáncer de pulmón. En concreto, en el curso se detalló que las tasas de mortalidad tras hospitalización por esta dolencia aguda a 30 días, uno y cinco años es del 10,4%, 22%, y 42,3%, respectivamente.

Algunos de los síntomas más frecuentes son la disnea, la ortopnea (dificultad para respirar al estar acostado), la disnea paroxística nocturna, la disminución de la capacidad para tolerar el ejercicio, el edema o la fatiga, entre otros.

La presión venosa yugular elevada, la taquicardia, el cansancio o la falta de aire son algunos de los signos más identificativos de esta dolencia. A veces se puede llegar a sufrir un encharcamiento de pulmones, así como también hinchazón de los tobillos, de piernas y del abdomen, derivada por la retención de líquidos.

Desde el Colegio de Farmacéuticos de Córdoba también se insiste en que los cuadros de insuficiencia cardiaca pueden ser prevenibles. Para ello, es necesario perseverar en la adopción y seguimiento de una serie de hábitos saludables, que contemplen no fumar, controlar ciertas afecciones como la presión arterial alta y la diabetes, mantenerse físicamente activo, consumir alimentos saludables y reducir y controlar el estrés.