El delegado del Gobierno de la Junta en Córdoba, Antonio Repullo (PP), ha asegurado esta mañana que la finca Los Posteruelos, de Villaviciosa de Córdoba, donde la semana pasada se abatieron 470 reses entre ciervos y jabalíes tenía autorización, ya que el plan técnico de caza presentado permitía ese cupo o aforo de capturas.
Repullo ha indicado que esa finca tiene 3.200 hectáreas y las piezas abatidas, pese a ser una cantidad elevada, entran dentro del aforo de reses de captura en proporción a los animales que viven en esa extensión. "La dinámica de las autorizaciones por parte de Medio Ambiente para una montería viene determinadas por un plan técnico de caza que presentan los gestores de la finca", ha señalado el responsable autonómico.
En este caso se concedió la autorización porque el aforo lo permitía. "No, hay por tanto, irregularidad, ni tampoco existe como tal la figura jurídica de caza masiva", ha indicado, para añadir que si llegan nuevas denuncias "se investigarán y si algo no se ha hecho acorde a la Ley se abriría el correspondiente expediente".
La cantidad de animales muertos en esa finca cordobesa ha alcanzado trascendencia nacional y colectivos animalistas han calificado este fin de semana de "orgía de sangre" y de "matar por matar, sin justificación de descaste o de control poblacional de reses", lo ocurrido en esa montería, durante las concentraciones contra la caza celebradas en una cuarentena de capitales españolas y en cuatro de otros países europeos.
